Un beso de Judas | Biblebuild

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Cerré completamente la distancia entre nosotros, ni siquiera sabía que estaba haciendo, solo, le hice caso a mis impulsos.

El me tomo de la cintura, sentía mis piernas perder fuerza, me abrazo por la cintura y sentía su lengua golpear mi labio, entonces haciendo caso a su orden, abrí la boca, sentía su lengua jugar con la mía, torpe e inexperta.

Entonces empezó a avanzar sin romper el beso, sentí la pared fría golpear mi espalda, fue en ese momento cuando reaccione, esto está mal.

Separe casi de un empujón a Wichapas, ¿Me he vuelto loco?, No sabía que estaba haciendo, no entendía la reacción que tenía mi cuerpo hacia el tacto de alguien como Wichapas.

- Y-yo, lo siento, pero, n-no, no puedo- dije nervioso e intenté salir

- ¿Que pasá?- pregunto impidiendo que me fuera con su mano. - ¿Que tiene de malo besar a alguien?- agrego.

- Y-yo, simplemente, no puedo- dije.

- Espera, ¿Ese fue tu primer beso?- dijo burlón.

- Claro que no!- dije molesto. - Yo di algunos- agregué.

- ¿Si?- dijo incrédulo.

- ¡Si!- le grite.

- ¿Cómo cuál?- dijo en tono de reto.

- E-en, en el jardín de niños- dije.

- Eso no cuenta- dijo riendo a carcajadas.

- ¡Si cuenta!- dije con una sonrisa, pues sus carcajadas eran divertidas.

- Dios, yo le di su primer beso a el hijito de la familia Puttha- dijo con tono victorioso.

- ¡No menciones a Dios después de haberme besado!- dije en reclamo. - Y-yo, mejor me voy- dije y salí prácticamente corriendo.

- Adiós smiley- grito y lo escuché a lo lejos.

¿Que acababa de pasar?, Quizá todo fue culpa de la pelea que tuve con mamá en la mañana, los pensamientos se irían tarde o temprano.

Eran las 9:14pm, caminaba por la calle ventosa y cuando doble la calle para llegar a mi casa mi madre estaba en el jardín, estaba parada, sin moverse, voltee a ver su mano y tenía un corte que aún sangraba.

Corrí a ella y la abrace, ¿Que estaba pasando?, Por qué estaba así, ella ni siquiera se movía, solo acarició mi cabello.

- ¿Lo ves?, Tu perteneces aquí, no puedes irte, me necesitas y yo te necesito a ti, no necesitas a nadie más que a tu familia- me dijo tranquila.

- Lo siento, mamá- dije sin aliento. - ¿Que te paso en el brazo?- le pregunté con un nudo en la garganta.

- Esto es lo que pasa cuando te alejas de mi, se me cayó un vaso y cuando lo recogí un pedazo de este me cortó, necesitas cuidar de tu madre, me estoy haciendo vieja- dijo, sentí alivio, ella no pasaba lo mismo que yo.

Ella estaba sentada a la orilla de su cama y yo estaba hincado con un botiquín a un lado, limpiaba su herida, se veía profunda, pero no era peligrosa.

Cuando termine la acosté, la tape con su cobija, estaba apunto de salir, pero no pude, quería pedirle perdón y a la vez gritarle, pero la amaba.

- Lo siento, mamá... te amo- le dije y dejando un tierno beso en su frente salí de su cuarto.

Cuando entre en mi cuarto, cerré la puerta con seguro, me senté en el piso y solo lloré, lloré todo lo que aguante mientras la veía así, ella era mi mejor amiga y a la vez sentía que era mi enemiga.