Bestia 🔗Yoontae🔗

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Se volvió costumbre, una rutina que lo mantiene feliz y alegre durante los días; el ir y venir de una choza a otra con total calma y serenidad.

De dormir en la choza del alfa Min y pasar todo el día en la choza de sus padres; cuidando a sus hermanos, ayudando en la aldea y de vez en cuando visitando a los pocos amigos que le hablan, la mayoría de ellos se enlazaron durante el invierno haciendo difícil el poder reunirse como antes o de siquiera hablar como meses atrás lo hacían.

Sus actividades como Omega cambiaron ahora que está enlazado y que su alfa no hace guardias como los demás alfas, ya demasiado tiempo de que no sale pero, ciertamente, no le preocupa, de esa manera está bien y tranquilo, haciendo lo que le toca y la sensación de pesadez es más baja desde que puede salir y distraerse de sus responsabilidades de Omega enlazado.

Más de uno de sus conocidos y amigos le han preguntado indirecta y con poca discreción la razón por la que se enlazo con el alfa Min y si pronto estará en espera de un cachorro.

Cuestiones que le incomodan hasta el alma pero niega rápidamente ante ello, es algo que sabe debe ocurrir pero no quiere que pase, no por el momento.

Las cosas son completamente diferentes a lo que se supone debe ser una pareja enlazada y eso nadie más que él y el alfa Min lo saben perfectamente.

No puede y no le gusta decirle a todo el mundo la verdadera razón de todo y más aún lo que sucede en su choza, en la intimidad o la forma en la que todo eso sucedió.

Nadie más que ellos dos saben lo que ocurre dentro de su choza y la forma en que están las cosas entre ellos.

Aunque más de uno tiene una idea de lo que sucede entre ellos, las miradas curiosas y poco discretas de todos a su alrededor hace que la incomodidad crezca apesar de que no lo hacen con esa intención.

Y la vergüenza de encontrarse con Jungkook después de aquel beso que le dio le provoca nervios y un sonrojo que se mantiene en su mente cada que piensa en el alfa más joven.

El miedo apoderándose de su ser al recordarse que ya no es un Omega soltero y que existe un alfa y un lazo que lo tiene apresado en una relación que apenas empieza y de la que no sabe cuándo o cuánto puede durar.

— ¡Taehyung! — detuvo sus pasos al escuchar el grito de jimin a la distancia, buscadolo con la mirada.

A un par de metros lo ve, su pequeña panza le recuerda lo gran y bendecido que es en la vida y lo precioso que de ve en estado.

— Escuché que regresaras a las afueras de la aldea, ¿Es cierto? — asiente con la cabeza a la pregunta de su amigo, uno de los pocos que aún conserva, pero que estando embarazado hace que no salga por mucho tiempo durante el día.

— Si, soy quien mejor conoce la zona y el único que hasta ahora puede salir.— comento haciendo la canasta de lado.

Regresaba a su choza después de un largo día de ayuda en la aldea, la nieve dejo de caer y el pasto verde estaban llenando los alrededores, el poco tiempo que estarían saliendo a cazar y sembrar las próximas cosechas del año.

— Es así,  ¿El alfa Min esta de acuerdo en que salgas tú solo allá fuera? — es una pregunta que se hizo muchas veces y sabe que existe el riesgo de que le prohíba salir de la aldea ahora que están juntos pero es una de sus principales actividades dentro de la aldea, la forma en que antes de que lo marcará lo vigilaba y lo espiaba sabe, ahora con seguridad que era él el que siempre lo seguía y lo vigilaba desde algún lugar a la distancia y que más de una vez lo encontró en sus recorridos, no le habló pero era era evidente el hecho de que lo seguía a un par de metros.