Rosas.

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-Hasta mañana nena—Dice Abraham antes de subirse al taxi que ha ido por él
Yo sonrió como tonta, cuando subo a mi cuarto parece que mis pies no tocan el suelo como un día puede hacer la diferencia en la vida
Al día siguiente un sonido distante me despierta identificó el timbre de mi celular corro casi cayendo

-Bueno— Digo sin siquiera ver el número

-Como amaneciste Preciosa—Sonrió al escuchar la voz de Abraham

-Perfectamente — Contestó con esa sonrisa estúpida en mi cara

-Nena lo siento hoy no podremos salir tengo unos asuntos— Yo me quedo en silencio

-No te meterás en problemas o ¿Si?

-Para nada, tú tranquila— Yo me relajo

-Te extrañare— Confieso noto que sonríe del otro lado de la bocina

-Yo más nena, me tengo que ir hablamos luego te mando muchos besos— Dice

-Quisiera tenerlos por entrega personal— Digo él suelta una carcajada

-De eso no te preocupes tus deseos son mis órdenes— Dice sonriendo

-Ya corre te quiero— Digo antes de hacer más largo esto cuelgo con una risa tonta en mi rostro

Me doy una ducha rápido y bajo a picar algo de fruta busco en todos los canales y no hay nada hasta que mis padres llegan con la pequeña Jud que me distrae un rato

-Hola guapa— Dice Alejandro quien llega con Tony

-Hola Mia— Dice Tony tan sonriente como siempre el viene en línea y mi hermano aún con su ropa de fútbol los observo

-No digas nada Tony ha pasado a cambiarse primero— Yo sonrió y veo como Alejandro sube rápidamente

-Ven Tony siéntate— Él sonríe y rápidamente Jud va junto a él siento como vibra mi celular

«Espero que me estés extrañando tanto como yo a ti» 

No puedo evitar volver a sonreír cuando veo el mensaje de Abraham tecleo rápidamente
«Aún sigo esperando mis besos»

No tarda en vibrar

«Más temprano que tarde, tus deseos serán los míos»

Sonrió como una tonta hasta que siento como Tony me observa sonriendo y evitando una carcajada

-Esa es la cara de una chica enamorada—Dice Tony

-No hago ninguna cara— Digo se que me he puesto más roja que un tomate

-No te preocupes y bien es que el
candidato ya ha ganado la contienda—Dice Tony

-Ya la ha ganado

-Enhorabuena Mia ese hombre es un suertudo— Dice sonriendo

-¿Y tu no tienes novia Tony? —Él niega con la cabeza trayendo un recuerdo evidentemente

-El amor de mi vida lo he dejado en España— Dice

-¿Porque?— Digo transtornada

-He preferido salvar a mi familia—Yo lo observo confusa pero mi teléfono. Comienza a sonar

-Permíteme Tony— Él asiente y vuelve a jugar con Jud

-Hola— Digo

-Cerebrito si fuera tú vería el ramo de flores que han dejado afuera de tu casa— Dice Abraham y cuelga yo confusa camino

-En un momento vengo Tony
-Claro ve aquí me quedo con Jud

Cuando abro la puerta mi sonrisa se hace doble cuando veo a Abraham con un ramo de rosas rojas, yo corro rápidamente él me atrapa para cargarme yo cruzó mis piernas alrededor de su cintura para no caerme él sonríe

-Alguien si me ha extrañado— Dice sonriendo

-Demasiado— Digo aspirando su aroma

-Alguien quería entrega a domicilio de una docena de besos—Dice acercándose a mi boca dándome un casto beso uno tras otro hasta que su beso se hace más profundo y entregado

-Me bajaré te vas a cansar—Digo

-Para eso hago ejercicio— Contesta sonriente y sin darme cuenta estoy tocando sus brazos más que fuertes él me observa con una mirada muy coqueta

Cuando me baja me entrega el ramo de rosas y le respondo con un beso y me percató de una camioneta blanca y podría decir que es del año

-¿Es tuya?—Pregunto señalando

-Si la he robado— Yo me quedo viéndolo y él suelta una carcajada—Es broma

-Pues si te la creo— Digo él sonríe

-No robaría por ningún motivo excepto uno

-¿Cuál?

-Robarte a ti y llevarte a un lugar para hacerte completamente mia— Yo siento como los colores inundan mi rostro

-Esperaré por ello— Él alza las cejas sorprendido

-No lo dudes— Dice mientras me guiña un ojo

-¿Quieres pasar?—Pregunto esperanzada—Ahora podrás conocer al nuevo amigo de mi hermano—Digo podría conocer a Tony y contarle que ya alucinaba que se parecían.

¿ Y si esto es amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora