¿ Y si esto es amor?

Revelación

Susana se queda pensativa como si tratará de organizar sus pensamientos

-No se por donde empezar— Dice

-Tranquila— Dice Antonio pasando sus manos por su brazo

-Disculpa hija— Dice con su voz entrecortada

-No se preocupe— Digo tranquilamente pero estoy todo menos eso, esperando a que empiece a hablar

-Él te ha hablado de nosotros— Dice con una voz esperanzada

-No— Contesto con sinceridad veo como poco a poco se pone triste

-¿Nunca?— Pregunta esperanzada

-Alguna vez lo hizo pero nunca me dijo que no les hablaba,  yo le he preguntado pero prefiere cambiar de tema— Veo como una mueva se forma en el rostro de los padres de Abraham

-Ya veo— Dice Antonio frotando su barbilla

-Te contaré como era Abraham, pero no quiero que cambies la imagen que tienes de él ahora— Dice Susana

-Esta bien—Mi cuerpo se tensa con un temor desconocido, pongo toda mi atención se que esto será interesante

-Abraham era un niño dulce— Se queda recordando— Era un gran hijo y era un gran hermano todo lo hacía con amor y dedicación, empezó con la música y se hizo un romántico pero hubo un tiempo en que nos fuimos a vivir a Londres y él se quedó con su abuelo y tíos pero ellos eran dueños de un casino confiamos en la actitud de Abraham, cuando regresamos dos años después no era el mismo— Se detiene para tomar un poco de aire los ojos de Susana están llenos de lágrimas— Disculpa hija, Abraham mi niño ya no era el mismo usaba su lado de músico para conquistar muchas mujeres, le fascinaba apostar amaba jugar billar empezó con unos vicios, pero todo se desató cuando recibió esa herencia sus tíos querían que él siguiera el mismo camino que ellos, unos vividores adictos a las mujeres y el juego hasta que pasó lo más difícil— Yo observo a Susana mis sentidos se van esfumando poco a poco

-¿Qué pasó?— Digo ansiosa por saber

-Comenzó a meterse con más y más mujeres hasta que se metió con una mujer comprometida y después con otra —Dice Susana con un nudo en la garganta

-¿Que?— Digo dejando mis palabras en el aire sin poder creerlo

-Así es, después de la última él simplemente dejó el país no lo localizabamos paso más de un año hasta que nos enteramos de que tenía un inmueble en México y que él lo manejaria personalmente, entonces no lo encontrábamos hasta que nos enteramos que el destino había hecho a tu hermano y Tony amigos, después tu descubriste que Abraham era el hermano de Tony, eres nuestra esperanza

-Susana, Yo— Digo sin poder decir nada

-Lo sé hija y no quiero presionar— Me ve con los ojos torturados de una madre, Tony su Padre se quedan viéndome, pero pienso en cuanto amo a Abraham, pensar en su pasado turbio y pensar al Abraham cariñoso y juguetón hace que mi corazón tenga esperanza

-Tranquila una de mis metas es ver a Abraham tranquilo se que los necesita yo les ayudare— Pienso en lograr la felicidad plena de mi Abraham

-Gracias— Dice Antonio que consuela a Susana que llora

-Te invito a comer el viernes— Dice Susana cuando me despiden en la puerta de su hogar

-Claro— Digo dándole dos besos me despido de Antonio

-Vamos— Dice Tony

Nos subimos al auto Tony me hace plática pero no puedo pensar en nada

-Gracias—Dice Tony dejándome en la puerta

-Los ayudare— Él sonríe apagadamente sube a su auto y se marcha

Subo a mi cuarto y abro la puerta del balcón
Me he dado una ducha, estoy tirada viendo el techo pensando en Abraham y en su vida pasada no es el mismo
digo una y otra vez, él ahora es distinto pero un ruido me distrae me levanto rápido agarró una botella cuando veo una sombra en mi balcón

-¡Sorpresa!— Grita Abraham yo grito y suelto la botella lo observo sonríe y yo siento como los colores abandonan mi rostro no estoy preparada para verlo.