53. Críticas y cotilleos

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Zoro despertó en su cama y medio dormido se giró para encontrarse con Sanji ya despierto mirando el móvil.

- Buenos días marimo

El rubio recibió un gruñido como respuesta por parte de su marido.

- Mira esto - dijo poniéndole el teléfono a pocos centímetros de la cara

Zoro cogió el teléfono y se incorporó para coger las gafas de la mesilla de noche.

- ¿Has siquiera dormido o te has pasado la noche en vela con los grupos de adopción? - preguntó devolviéndole el aparato tras ver que seguía metido en grupos de consejos para pasar la primera fase de la entrevista con la asistente social

- Es que te juro que no puedo dormir sabiendo que hoy tenemos la entrevista

- Relájate cocinero que ya has comprobado la seguridad de la casa al menos veinte veces, todo irá bien - se quitó las gafas y acarició la pierna de Sanji intentando confortarlo

- Eso espero, estoy deseando que llegue la hora de la entrevista porque necesito sacármela de encima

- Sabes que esto es un proceso largo, no te dan un crío de la noche a la mañana cejillas

- Lo sé. Solo ignórame estoy agobiado y entro en bucle, ya me conoces

El peliverde se incorporó un poco más para que el rubio pudiese apoyar la cabeza en su hombro y comenzó a frotar con suavidad sus brazos.

- ¿Quieres que salgamos a dar una vuelta? Creo que te sentará bien, te invito a desayunar fuera y te despejas

- Está bien, de verdad que siento ser tan pesado

- No eres pesado. Yo también estoy nervioso, es normal - besó á cabeza del cocinero y se levantó para vestirse

Sanji le observaba desde la cama mientras el espadachín se cambiaba.
Envidiaba la capacidad de Zoro para lidiar con situaciones difíciles. Él se convertía en una masa de negatividad y angustia mientras el peliverde seguía avanzando y enfrentando cualquier problema.

- ¿Te arreglas o vas a seguir mirándome el culo cejillas?

- Voy marimo aunque no puedes culparme, son unas bonitas vistas - le palmeó trasero y besó sus labios para dirigirse al baño a darse una ducha antes de salir.

Cuando entró al salón ya cambiado vio a Zoro en la mesa de comedor con las gafas puestas mirando en el ordenador combates de kendo mientras acariciaba a Wado que se encontraba dormido en su regazo.
Sanji se acercó por detrás para besar su cabeza.

- ¿Tú próximo contrincante?

- Veremos... es un chico coreano que entro en la liga de adultos hace dos años. Es muy bueno

- No tanto como tú musgo

- Tiene 20 años y yo ya tengo 33 cejillas

- Bueno... más experiencia ¿nos vamos?

- Sí - cerró el portátil y guardó las gafas en el bolsillo de la chaqueta - ¿dónde quieres ir a desayunar cejillas?

- Llévame al sitio ese de brunchs que abrió hace un par de meses. Le hicieron una buena crítica y tengo que robar ideas a la competencia - dijo con una sonrisa

Al llegar se sentaron en una de las mesas libres pegadas al ventanal y en cuanto les entregaron la carta Sanji la revisó de arriba abajo.

- Me esperaba más, esto es burdo

- Pero si no hemos pedido todavía cejas raras ¿cómo sabes que es burdo?

- Por favor, no me hace falta pedir para saber que es una carta básica, aburrida y sin una pizca de imaginación. En mi opinión profesional una propuesta chabacana

CONOCIÉNDOTE (Sanzo/Zosan +18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora