"Dos mundos se alinean. La línea que los separa es delgada y frágil, pero está ahí. El poder, el amor, la lealtad... Todo es cuestión de elecciones, y a veces puede ser difícil decidir cuál es el camino correcto."
⚡Libro 1 - ✓
⚡Libro 2 - (en proceso...
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L
a estancia en la mansión Zabini era cien veces mucho mejor que estar en la Madriguera, la señora Zabini procuraba mucho la comodidad y el bienestar de la pelinegra. Alessia se ofreció a darle clases de piano mientras los chicos concluían sus entrenamientos, Theodore tenía el deseo de entrar al equipo de Slytherin y por eso tenía que entrenar mucho.
Uno de esos días Alya bajo de su habitación solo para darse cuenta de que ya habían empezado a desayunar, Alya se había quedado dormida luego de apagar su despertador y decirse a si misma que solo dormiría cinco minutos más.
—Sientate cariño —le dijo Alessia Zabini en cuanto la vio llegar al comedor.
—Lo siento, me quedé dormida —comento Alya tomando lugar aun lado de Theodore.
—Me di cuenta —aseguro Alessia Zabini con una cálida y maternal sonrisa —. Pensé que quizá estabas muy cansada y quise dejarte dormir un poco más. Anda come.
Alya le dió un sorbo a su jugo de naranja antes de comenzar con sus alimentos. Al terminar Alessia Zabini hizo un ligero movimiento de varita e hizo que los platos desaparecieran.
—Por cierto, han llegado cartas del colegio —dijo la señora Zabini entregando a Alya, Blaise y Theodore tres sobres idénticos de pergamino amarillento, con la dirección escrita en tinta verde—. Dumbledore ya sabe que estás aquí, cariño.
Hubo unos minutos de silencio mientras leían las cartas. En ella le indicaban que cogiera el tren a Hogwarts el 1 de septiembre, como de costumbre, en la estación de Kings Cross. Se adjuntaba una lista de los libros de texto que necesitaría para el curso siguiente:
Los estudiantes de segundo curso necesitarán:
—El libro reglamentario de hechizos (clase 2), Miranda Goshawk. —Recreo con la «banshee», Gilderoy Lockhart. —Una vuelta con los espíritus malignos, Gilderoy Lockhart. —Vacaciones con las brujas, Gilderoy Lockhart. —Recorridos con los trols, Gilderoy Lockhart. —Viajes con los vampiros, Gilderoy Lockhart. —Paseos con los hombres lobo, Gilderoy Lockhart. —Un año con el Yeti, Gilderoy Lockhart.
—La nueva profesora de defensa contra las artes oscuras debe ser una gran admiradora de Lockhart —comento Blaise aún leyendo la carta.
—¿Lockhart? —la pelinegra ladeó la cabeza con curiosidad. Recordaba haber escuchado a la señora Weasley mencionarlo.
—¿No sabes quién es?—pregunto Theodore y Alya negó al instante —. Es mejor así. Tiene a las mujeres vueltas locas.
—Debe ser muy guapo entonces.—bromeo.
—Conozco a hombres más guapos que ese tipo—repuso Theodore frunciendo el entrecejo.
