Entre a el mundo de la lectura a los once años.
Ahora resulta que soy una antagonista en el mundo de un libro que no conozco pero se la mayoría de cosas importantes por fanfinc.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
— ¿Qué es todo esto? — Adam se gira hacia mi y abre la cortina de la sala para permitirme ver a Christopher inconscientemente. — ¿Y su abuela y tío? — Sonreí.
— No fue necesario intervenir los italianos los atacaron primero. — Me informa. — Pero salieron ilesos.
— Comprueba que estén bien, no quiero que mueran antes de conocerlos y más a Recce. — Entro a la habitación para ver fijamente al coronel. — Te dije que no podías contra mi y que me necesitarías. — Susurro en su oído — ¿Dónde están tus salvadores después de que tirara un edificio encima de ti?
Su rostro sigue sin emoción, su respiración es normal por lo que me alejo y le acerco al doctor. — Hagan lo necesario en cuanto despierte hay que sedarlo.
— ¿Qué haremos después de eso?
— Dáselo a las sombras y que lo envíen a mi casa junto a Zeus. — Me giro para ver a Adam — Y si le haremos creer que nosotros lo encontramos cuando ustedes atacaron el hospital militar, nadie sabe que fuimos nosotros ¿verdad?
— Nadie. — Niega y asiento cuando me abre la puerta.
— Bien. — Me quito los guantes dejándolos en la bandeja para caminar a mi habitación.
— Hasta que llegas. Tenemos un problema, Mascherano te quiere con él. Le ordenó a mi padre conseguir información sobre ti.
— Pronto le daremos la cara, un paso a la vez Vlad y por favor regresa a ser rubio me estresa verte castaño.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Aparecerme en el hospital militar no era uno de mis planes pero decidí finalmente ver de cerca a lo que me enfrentaba.
— Disculpe. El coronel Christopher Morgan. — La recepcionista me escanea de pies a cabeza. — ¿Qué? Se te perdió una igualita, mi amor se que quisieras que alguien tan maravillosa como yo te hiciera caso pero estoy casada. — Muestro el anillo que me regalo Vladimir que tiene extrañamente tiene una Kpor dentro.
— Disculpe pero no puedo dejarla pasar, esto es la FEMF. — Se burla.
— Es un hospital militar y gano más que tú incluso si volviera a trabajar en mi pastelería. — Le tiro el agua encima de la computadora y finjo preocupación. — Cuanto lo siento.