O3: Buenas noticias.

182 33 1
                                    

-¿Por qué no llaman? -murmuró Felix con voz entrecortada mientras se dejaba abrazar con fuerza por su alfa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-¿Por qué no llaman? -murmuró Felix con voz entrecortada mientras se dejaba abrazar con fuerza por su alfa.

-No lo sé, pequeño alfa, supongo que deben tener muchas parejas a las cuales informarles y deben estudiar los casos de cada una de ellas...

Chan paseaba sus dedos por entre los mechones a la vez que más feromonas protectoras los rodeaban.

Estaban los dos acostados luego de un duro día de trabajo y un increíble encuentro íntimo que no sirvió de mucho en cuanto a distracción se trataba.

-Pero ya pasó un mes -gimoteó finito- Yunjin dijo que solo debíamos esperar unas semanas.

-Lo sé, mi vida, pero no te des por vencido tan pronto.... también oíste como ella dijo que teníamos altas posibilidades de ser escogidos.

Chan quería animarlo como fuera, incluso lamiendo su marca y besando con suavidad, pero la verdad era que sus esperanzas también comenzaban a apagarse lentamente. Esa noche no pudo dormir, demasiado concentrado en velar por el sueño de su alfita, ya que hace varios días que el pequeño risueño no descansaba correctamente. Se encargó de acariciar su cabello y espalda con parsimonia, de arroparlo cuando era necesario y acomodar la almohada que solía caérsele en medio de la noche.

Al otro día, grandes ojeras adornaban su rostro pero un suave "gracias por cuidarme" y un firme beso por parte de Felix luego de entregarle su taza de café, hicieron que todo el cansancio tuviera sentido.

Llegó a la oficina arrastrando los pies, saludó a Jihyo, su secretaria, con un asentimiento y se encerró en su oficina. Sus ganas de socializar e interactuar con otras personas eran casi nulas. Maldijo internamente cuando recordó que hoy tenía varios casos que requerían de reuniones presenciales

Una vez finalizado, su secretaria ingresó varias veces con tazas de café y algún que otro documento. La mayor parte de la tarde se mantuvo tranquila, por lo que recordó agradecerle a alguna especie de deidad superior o algo así.

Al regresar a casa, Felix lo esperaba en el sofá envuelto en una gruesa manta para hacerle frente al inicio del invierno y un pote de helado entre sus piernas. Friends reproduciéndose en la pantalla plana.

Se desanudó la corbata, dejó el maletín y su saco en la mesa de centro y se dejó caer a un lado de su alfita.

Felix automáticamente se acurrucó entre sus brazos en busca del aroma amaderado y llevó una cucharada de helado de menta y chocolate a sus labios.

-¿Cómo estuvo el trabajo? -inquirió en voz bajita casi ronroneando.

-Normal. No estuvo muy pesado la verdad -respondió mientras masticaba los trocitos de chocolate y olfateaba entre los mechones- ¿Tu día?

-No hice mucho... limpié un poco, revisé correos electrónicos de la empresa que tenía pendientes y... no mucho más.

-¿Comiste algo?

Tramitando con esperanza ♡ chanlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora