37. LOCO POR TI

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SUSY

Me estaba aguantando las ganas para no brincar encima de él. Sería una estúpida al no admitir que lo había extrañado. Ahora verlo tan seguro de sí mismo y tan decidido a recuperarnos, hace que una tibia corriente se instale en mi cuerpo. No quiero que crea que me tiene ganada, lo haré sufrir un poco más. Como si en el cielo me estuvieran escuchando, Rhett aparece para despedirse y me reservaré su identidad para mí por los momentos. Claro que a ustedes si les diré quién es Rhett en realidad o para la sociedad. Es el hijo menor del emperador japones, pero no quiere ni desea nada de los protocolos por lo que se rige su padre. Por esa razón se logró escapar hace unos años y vino a Londres a cumplir su sueño y convertirse en maestro de literatura. Tal vez ser un maestro de literatura no sea el trabajo soñado de muchos, pero para Rhett sí. Su mentor y tutor desde que él era un niño, le compartió su pasión y fascinación por los libros. Rhett me confesó que, para él, los libros fueron su escape del mundo real. Los problemas entre sus padres, protocolos, exigencias, expectativas eran mucho para él y mejor se refugiaba en el mundo fantasioso y surreal de los libros. 

Rhett tiene 27 años y es un hombre muy guapo, ya se no me regañen, estoy enamorada de Alan, sí, pero no estoy ciega. Me gusta Rhett para Liz o Sol, comparten esa misma pasión por los libros. Mas de alguna vez escuché a Sol hablar sobre que su esposo debe tener la misma pasión por la literatura, por lo que Rhett sería el candidato perfecto para ella. Me dejé llevar un poco por la complicidad que tenía con mi maestro para molestar a Alan. De reojo pude observar lo mal que la estaba pasando tanto que mejor prefirió ir a buscar a nuestro hijo. El reencuentro entre Khoa y Alan fue muy emotivo, aunque no se vieran físicamente, todos los días le mostraba fotos de Alan, también las videollamadas ayudaron mucho. De lejos pude observar cómo Alan ayuda a mi madre con él y podía ver algo diferente en él. No cabe duda de que este Alan, era muy diferente con el que compartí hace unos años. Lo resumiré a una sola palabra, libre. Siento que ahora es libre de poder hablarme con la verdad, sin rodeos, sin mentiras, sin malentendidos.

—Ya deja de verlo que se te sale la baba por aquí —me susurra mi abuelo.

—Ideas tuyas abuelo —le digo y el niega. Clavo de nuevo mis ojos a la escena en el comedor.

—No había visto tus ojitos brillar así desde que eras una niña que se emocionaba por jugar entre los girasoles del jardín. Veo ese mismo brillo en él, parece que el estar lejos les ayudó. No creas, también lo mantuve bien vigilado y no hizo nada de lo que me haga dudar de sus intenciones —comenta mi abuelo y estoy por voltearme y seguir hablando, pero él ya estaba llegando hasta ellos.

Bueno una cosa esta más que segura, Alan está de regreso en nuestras vidas, pero ¿Esta vez será para siempre? Tenía que averiguarlo, aceptaría sus invitaciones. Siento que empezar desde cero es lo más sano que se puede hacer, después de lo malo que vivimos por culpa de no confiar el uno con el otro. Ayudé a llevar a Khoa a que hiciera su siesta, creí que no la haría después de haberse comido ese pedazo de pastel, pero el pobre estaba tan cansado que no tardo nada en dormirse. 

Bajé y pude observar a Alan sentado en una de las sillas del jardín viendo como Aitor jugaba al futbol con Tiam. Me senté en la silla a su lado llamando su atención, sin que pudiera evitarlo entrelazó nuestras manos y aunque me quería resistir ante este gesto no pude. Dejé que sostuviera mi mano mientras hablábamos. Me comentó sobre el amor que Aitor le tiene a mi madre y a Tiam. Si, Aitor se ha entregado voluntariamente a mis hermanos, algunas veces pienso que Aitor debió haber nacido en otra época. Trata a mi madre como una reina. Algunas veces los he visto platicar por el jardín en las noches. Me recuerda mucho a lo que hacíamos Alan y yo. Esperar a que todos se durmieran para poder tener la noche y las estrellas solo para nosotros. Mi madre aún está muy renuente ante esa posibilidad, pero sé que esa batalla de si está bien o mal versus sus sentimientos la tienen hecha un lio. Aitor no estaba interesado en quitar el dedo del renglón. 2 años sin sexo para un hombre tan promiscuo como el, da a entender lo mucho que quiere y respeta a mi madre. Aun sin ser pareja, él no ha estado con alguien. Eso hace preguntarme ¿Alan habrá tenido sexo con alguien?

Jugaste y sufríDonde viven las historias. Descúbrelo ahora