Familia

13

Megumi abrió sus ojos, la luz entraba por la ventana directo a su rostro.

— ¿Mamá Geto?— Llamó al mayor, sin respuesta, confundido salió de la cama, directo a la sala, en ella se encontraba su hermana, quien parecía que había llorado.

— No esta mamá, también se fue. — La lagrima se amontonaban en sus ojos apunto de caer por sus mejillas, las cuales se encontraban rojizas ante el llanto que había tenido antes de la aparición de Megumi.

— ... — No hubo respuesta de Megumi, sus manos jugaban con el borde de su camisa, atemorizado, no quería volver a vivir el abandono, menos ahora que había conocido el amor paternal.

La sala fue absorbida por el silencio de ambos, sentían el mundo caer pedazo por pedazo, de nuevo, ¿Gojo los querría ahora que no estaba Geto? Tenían pánico de la respuesta. El sonido de la puerta seguido del frenesí consecuente fue algo que ninguno de los hermanos esperaría, todo era tan confuso, Geto había llegado sin más, aporreando la puerta de un solo movimiento y abriéndola con ello, traía consigo el cuerpo de dos niñas, una maldición lo ayudaba con el traslado, colocando a ambas en el suelo del departamento, Tsumiki fue la primera en reaccionar, corriendo al lado de su madre con el pañuelo que había usado para sus lágrimas.

— Amor, tráeme el botiquín del baño, por favor. — La voz suplicante pero amorosa reparo un poco del miedo de los hermanos. — Megumi, mi cielo, por favor tráeme agua. —

Ninguno objetaron las peticiones, corriendo respectivamente a las acciones requeridas, no sabían quien eran esas niñas pero no les importaba mientras mamá Geto estuviera con ellos.