MI GUARDAESPALDAS //ZeeNuNew (Terminada)

Capítulo 56

ZEE

Termine por mudarme a la habitación de Nunew definitivamente. Quería protegerlo hasta de sus sueños malos.

La presión estaba siendo demasiado inmensa entre nosotros.  Holmes quería respuestas sobre qué haríamos, pero estábamos esperando a que Sam decidiera si era convincente que Nunew hiciera o no la misión.

Lo que pasó con Saint no dejaba de perseguirme. Aquello había sido mi culpa y por más que pasaba el tiempo, ese sentimiento no se iba.

Y pensar que a Nunew le podía pasar lo mismo, simplemente me aterrorizaba. Este me tenía preocupado, lo había visto aferrado a un cuaderno que llenaba con quien sabe qué pensamientos. Luego se iba a la sala de tiros y practicaba por horas.

Además había vuelto a entrenar con  Joss, él era el mejor cuando a técnicas de defensa personal, por lo cual deje que fuera él quien se las enseñará y debes en cuando me paseaba por el gimnasio para ver como iban.

Si era sincero, una parte de mí deseaba con todas mis fuerzas que Sam no diera el visto bueno para que Nunew hiciera aquel operativo. Pero mi instinto me decía que no iba a tener suerte.

Entre al gimnasio y me quede observándolo desde la puerta.

Joss era demasiado rudo con él. Ver como lo tiraba al suelo una y otra vez, sin apenas dejar que terminara de pararse me estaba poniendo nervioso. Sin embargo, Nunew no se rendía, peleaba con técnicas que Joss le mostró pero era muy lento para luchar con él.

Estuve diez minutos observándolo en silencio, sin intervenir, hasta que vi que la fuerza que Joss usó contra su pecho para hacerlo caer, fue demasiado dura.

—¡Eh!—grite separándome de la pared—¡Joder, Sangngern!

Joss volteó a verme, sin remordimiento alguno.

—Tú no te metas...—me decía.

Entonces todo sucedió muy rápido. Nunew le golpeó la pierna, giró sobre si mismo para tirarlo al suelo. Nunew se paró y lo miro desde arriba.

—Nunca quites los ojos de tu adversario—dijo sonriendo.

Joss y yo soltamos una carcajada. Nunew se dejo caer contra la colchoneta, estaba exhausto.

—Hemos terminado por hoy—le dijo—Mañana posiblemente te duela el cuerpo, date un baño con agua caliente. Lo estás haciendo muy bien.

Nunew se sentó y asintió con una sonrisa que no veía en mucho tiempo.

Cuando Joss se fue, me acerqué a él y le tendí la mano para ayudarlo a levantarse.

¿Estás bien?

—Casi prefiero que seas tú quien me enseñe.

¿Cómo qué casi?—dije rodeándolo de la cintura y atrayéndolo hacia mi—Pensé que era tu profesor preferido.

Se estiro para darme un beso en los labios. Yo lo recibí con ansias y atrapé su labio inferior con mis dientes.

—Siempre serás mi preferido. Pero tus clases, comparadas a las de Joss, son para niños.

Puedo ser duro contigo si quieres—dije volviéndolo a besar y empujándolo hacia atrás para que chocará contra pared.

Empecé a besar su cuello, impregnándome del sabor a sal de su piel. El verlo derribar a Joss me había encendido. Él lo había subestimado y Nunew le dió una lección.

—Necesito darme un baño...—dijo cuando mis manos lo atrajeron con más fuerza a mi cuerpo endurecido.

Puedo ayudarte si quieres—solté mirándolo a sus bonitos ojos.

—Seria divertido—dijo mordiendo suavemente mi quijada—Pero existe el riesgo de que me quede dormido una vez me meta al agua.

Con más razón necesitas de mi presencia—dije besándole la punta de la nariz—No permitiré que te ahogues en la bañera.

Se rio y ese sonido fue música para mis oídos.

—Te propongo lo siguiente...—hablo risueño—Mientras yo me baño, tú me preparas algo de comer ¿te parece?

Solté una carcajada.

¿En qué me beneficia eso a mí, gatito?

—Nunca viene mal seguir sumando puntos—contestó dándome una palmadita en el pecho para después alejarse.

Sacudí la cabeza sin poder dejar de sonreír.

¿Cómo consigues siempre salirte con la tuya?

Gatito travieso

Se encogió de hombros.

—Creo que s un don, Zee.

Me dió una bonita sonrisa coqueta antes de salir del gimnasio.