Reencribiendo la historia (Sebaciel)

1

Hola,solo queria decír que hace tiempo tenía esta historia en la cabeza,así que aquí esta,espero les guste.

P/d;puede que haya algunos errores ortográficos

Ya han pasado 134 años desde que Ciel phantomhive se convírtio en demonío. Y desdé ese momento todo se fúe al carajo. Sebastián ya no era el mismo,nisiquiera finjía sus sonrisas o se molestaba en decír con lujo de detalle lo que su amo comería, solo lo servía y se quedaba en la habitación hasta que Ciel terminará de comer para juntar todo y largarse a hacer otras cosas. Eso lastímaba mucho al conde,le dolía ya no sertir a su mayordomo molesto, aúnque el sabe que lo que un dia lo enamoró solo era una fachada. El probléma era que el amor por ese demonió seguía ahí, no se había ído. Mejor dicho;Nunca se fue.
Y el problemá esque cada vez que Ciel quiere iniciar una conversación Sebastián se vuelve mas frío y cortante. Eso suma una espína más al corazón de Ciel. Porque ese lado humano sígue ahí. Esa esperanza de que todo vuelva a ser como era sígue ahí. O nunca se fue. Porque cada vez que Ciel se acuesta y las luces artificiales de la habitación se apagán el se imagína que hubíera sido de la vida de sus sirvientes y amigos después de su supuesta muerte. Se preguntaba si Finni, Meiry,Bard o Tanaka hubíeran conseguído otro trabajo, o mejor,se hubíeran casado y formado una familia. Aveces recuerda como eran esos días en que,desde su oficína, escuchaba los gritos de Meyri cuando se le caía una torre de platos que nunca tocaban el suelo gracías a Sebastián. Eso le causaba una especíe de risa y nostalgía.

Pero este día sería distínto. Esta vez si hablaría con Sebastián, y le daría una noticía que seguro le gustaría mucho.

~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•

-Sebastián-Llamó serio el conde. El nombrado solo lo miró.-¿Tú que hubíeras hecho si pudieras haber comído mi alma?-  

El hombre de negro solo se limito a arquear las cejas mientras lo miraba confundido. No era muy común que su amo hablará de un tema así de la nada.
-Pues,siendo sinsero joven amo...-hizo una leve pausa para buscar la palabrás correctas tras sentír la mirada penetrante del chico-Luego de comer su alma. Si hubíera podido-Acláro.-hubíera vuelto al infierno esperando a otro contratista o simplemente vagaría por el mundo hasta aburrirme.-
-¿Eso quiere decir que si yo ahora rompería nuestro contrato tu te irías a vagar dejando tu estricta figura de moyordomo perfecto atrás?-Sebastián volvio a arquear una ceja al no enterder a que quería llegar su amo. Pero sea lo que sea lo estaba comenzándo a preocupar,preocupación que Ciel notó. -Lo dígo porque luego de investígar por mucho tiempo,y con mucho tiempo me refíero al último siglo,descubrí una forma de romper el contrato.-
Ante la respuesta de su joven amo Sebastián abrío los ojos y se quedo inmovíl. Eso no estaba en sus planes del día,y a sus planes del día me refíero a después de terminar sus labores sentarse mirando a la nada esperando todo. Pero no se esperaba que ese 'todo' sea su pase de libertad. Eso le aterro. Pero la duda lo carcomia, quería saber cual era esa trituradora que despedase su contrato.
-¿Cual es joven amo?-El nombrado sol sonrio orgulloso y apoyo su codo sobre su escritorio dejando caer su cabeza en su puño cerrado.
-Si tanto quieres librarte de mí tendras que enseñarme como hacer ciertas cosas.- La respuesta hizo que Sebastián bufára. Por algúna extraná razón no quería enseñarle a su amo a hacer cosas, o a lo que nosotros llamamos;Ser autosuficiente. Era algo a lo cual se negaba rotundamente.
-Bocchan.-Sebastián cambío su voz tranquila a una más sería y ronca haciendo que a Ciel se le herizara la piel.-Usted sabe que no tengo intenciones de enseñerle cosas comúnes, y si eso implíca servírle durante toda la eternidad, lo hare.-
Con esas palabras el orgullo y seguridad de Ciel cayeron traspanzando el suelo hasta llegar al,seguramente, infierno. Tendría que sacar su última carta. Una muy eféctiva
-Sebastián,yo, Ciel Phantomhive,te ordéno que me enseñes a ser autosuficiente.- Sebastián bufó enojado .
-Yes my lord.-