17-Estrés

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Al despertar encontré a Jenna ya cambiada y arreglada para irse a trabajar. Hablaba por teléfono con sus agentes y yo veía toda la escena de manera natural, con una sonrisa en la cara después de despertar en la misma cama que ella. Jenna volteó un segundo viéndome sonreír como un idiota y también sonrió.

―Buenos días―dije en voz baja.

Ella hizo lo mismo sin hablar, simplemente moviendo los labios.

Al colgar, me dio un beso de buenos días.

―¿Qué tal has dormido?―preguntó mientras acariciaba mi mejilla.

―Maravillosamente―respondí feliz―¿y tú?.

―Me ha costado dormir, pero suele pasar―comentó.

Después de charlar durante un rato se despidió de mí con un beso y yo bajé a desayunar. Estaba en una nube, sin trabajar y allí en aquel tranquilo lugar. Me tomé unas tostadas mientras contemplaba el enorme parque natural que no quedaba lejos.

Estuve dando vueltas por el recinto y en la zona cercana hasta que Jenna regresó. La vi algo cansada, quería pasar tiempo con ella pero si estaba así mejor esperar.

―No, claro que estoy bien, se me pasará enseguida―dijo mientras me abrazaba―me cambio y vamos a caminar.

Yo asentí y la esperé abajo. Tardó un poco en bajar. Iba con sus gafas, cascos y demás. Tomó mi mano y marchamos a andar.

El parque era increíble, lleno de vida y belleza que no se podía ver en otros sitios. Yo cargaba con algunas cosas de picoteo y agua. Era algo tarde pero mejor, menos gente. Nos sacamos algunas fotos y reímos hasta la noche.

―¿Estás bien?―pregunté viendo que caminaba lentamente.

―Si, es solo que quiero disfrutar de este sitio antes de regresar...ya sabes...guardarlo en mi mente.

Volvimos al hotel y allí nos duchamos antes de cenar. Pero algo pasaba, la notaba algo distante, o mejor dicho...menos habladora. ¿Tal vez había hecho algo?.

―Jenna...¿no tienes hambre?―apenas probaba bocado.

―Ah, sí...perdona...es que he comido antes de picoteo que has llevado.

Regresamos a la habitación y se sentó, la vi tocarse los hombros. Yo comprendí que estaba demasiado agotada.

La abrace por la espalda y la besé en la mejilla.

―Tn cariño...no tengo ganas ahora―dijo en un tono preocupada.

―Lo sé boba, no todo es...eso―reí―túmbate, te voy a hacer un pequeño masaje.

Lo hizo, se tumbó y me coloqué encima para darle un masaje. Y pronto me di cuenta de que ella se había quedado profundamente dormida. La cubrí y me puse a su lado. Sabía que su despertador era para toda la semana así que no me preocupé por eso.

En la mañana, la noté con los ojos cansados. Al intentar dar unos pasos por poco se cae.

―¡Jenna!―grité antes de sujetarla.

La acompañe al baño y allí vomitó mucho. Ella dijo que sentía una fuerte presión en el pecho así que enseguida llame a un médico que acudió a los cinco minutos. No venía solo sino con ayudantes. La colocaron en la cama y le hicieron unas pequeñas pruebas.

―Ya veo...si...no es nada grave―suspiré―pero puede serlo sino se cuida. Lo que tienes Jenna es mucho estrés―explicó―¿puedo ver su agenda?―ella asintió.

Al revisarlo, mis ojos se abrieron ante la cantidad de trabajo que tenía. Sesiones, entrevistas online o rodajes...no había día que parase. Del rodaje eran todo planificado por la compañía pero el resto era la propia Jenna y sus agentes. Hasta el momento le había ido bien así pero ahora mismo, a la larga, le había sentado mal para su salud.

―Hoy descanse, y mañana, de lo contrario puede recaer y acabar muy mal señorita Ortega―dijo antes de darle una receta.

―Yo me haré cargo―dije firme―le encargaré a un agente que traiga todo esto mientras yo me quedo cuidando de ella. Si ocurre algo le llamaré―estaba preocupado―gracias doctor.

Yo hice todo lo que me dijo el médico. También avisé a los del rodaje que no podía ir así que grabarían las escenas donde ella no salía para ir adelantando faena.

―Lo siento―dijo casi llorando―lamento mucho arruinar nuestros días juntos.

―Eh, no lo has hecho. Pero por favor, cuida mucho tu salud―dije―no puedes poner en riesgo tu estado por unas entrevistas.

―Lo hago...por...―yo la callé con un beso.

―Si, por los fans, para que vean tu lado más humano y cercano, lo sé. Pero si sigues así no habrá más entrevistas ni nada Jen, entiende―ella me sonrió.

―Es la primera vez que me llamas Jen.

Me asegure de que Jenna se tomaba toda la mediación y descansaba. Por eso me tiraba las horas en el hotel con ella. Ya me había pasado así que en cierto modo tenía experiencia. Hablé con sus padres porque estaban preocupados o recibí la visita de Emma a quien deje a solas con ella para que charlasen cuando vi que ella se recuperaba un poco.

―Realmente se esfuerza demasiado―dijo su agente.

―Si, ¿no hay forma de asegurar que tenga más descansos?

―Cuando una se vuelve famosa empiezan a lloverle entrevistas de todos lados. Normalmente se aceptan porque es el mejor momento de aprovechar el estrellato para ganar dinero y fama de cara a futuros proyectos porque nunca sabes cuando volverás a tener esa oportunidad.

Le llevé la cena y ella tenía mejor color de cara. Aunque no comió demasiado, si más que en todo el día. Yo sonreí y poco a poco le fui dando la comida, como a una niña pequeña.

―Me tratas demasiado bien―dijo―no tienes que hacerlo.

―Claro que si―reí―di...ahhh.

Ella abrió la boca antes de recibir una cucharada de sopa.

Después, ella y yo nos pusimos a ver una película. Pero ella no tardaría en dormirse así que apague la televisión y me fui a dormir.

Jenna se encontraba mucho mejor y con más fuerza. Esa misma mañana de descanso aprovechó para organizar sus entrevistas y tener más tiempo entre cada una de ellas, sus sesiones y los rodajes.

―Gracias por cuidarme―dijo besándome lentamente―en cuanto tenga tiempo lo pasaremos juntos―susurró en mi oreja.

―Ya veo...

―Me voy a trabajar, te quiero―nos besamos y se fue acompañada y después de la revisión médica.

A lo tonto, me quedé dormido en la cama ya que era de una gran calidad.

Desperté al cabo de unas horas y me estiré para desperezarme. Pase todo el día haciendo el vago, tocándome los...y sin hacer otra cosa que pasear.

―Tn―llamó una voz.

Ya era de noche.

Era Jenna con Emma y otros miembros del  reparto para ir a cenar. Me dio un abrazo y nos fuimos a cambiar al cuarto para ir a la cena.

Esperaba que ella no siguiera esforzándose más o el estrés la haría recaer de nuevo, pero allí estaría para vigilar que eso no pasase ya que al igual que ella me cuidó con los fans, yo haría lo mismo con su salud.

Continuará...

Inesperado-Jenna Ortega x Lector MasculinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora