Inesperado-Jenna Ortega x Lector Masculino

15-Cuidados y...despedida

Pasaba las horas hablando por chat y hablando con mi madre quien estuvo varios días llorando por todo lo sucedido, dijo que tenía miedo de que algo malo me pasase. La tranquilicé un poco con ayuda de mi padre y prima. Las redes sociales se hicieron eco y todo el mundo apuntaba a Edward mientras que otros lo hacian a los fans. Jenna sacó un comunicado condenando el ataque y diciendo que aceptasen que yo era su pareja gustase o no a los fans.

Jenna llegaba agotada al hospital y cuando entraba, esbozaba esa sonrisa. Pero yo me daba cuenta de que había venido casi corriendo, agotada por el sudor y con los ojos muy cansados.

―Jenna, quiero pedirte un favor―dije.

―Dime, ¿qué sucede?―preguntó mientras se sentaba cerca. Hasta la respiración era de cansancio.

―Me gustaría que no vinieras en dos días a verme―ella abrió los ojos.

―¿Qué ocurre?―preguntó alterada―¿te han amenazado?, ¿alguien quiere hacerte daño?―yo la tome de las manos para que se tranquilizase.

―No, lo que quiero es que descanses. Estás con entrevistas, rodajes, sesiones de fotos y encima vienes a verme―fue a hablar pero la callé―no te preocupes por mí, aquí estoy bien. Por favor, tu salud también es importante. Cuando acabes mañana y pasado de trabajar, ve al hotel a descansar y mucho.

―Pero...

―Jenna estás sudando, tienes ojeras y te veo agotada. Por favor, hazlo por mí―ella asintió.

―Lo siento

―No te preocupes, ahora ya que estás aquí relájate y cuenta tu aburrido día de rodaje.

Ella se rió  un poco antes de beber agua y empezamos a hablar de su día.

―Anda, ve al hotel a dormir―dije.

―Quiero estar un poco más aquí contigo―susurró mirándome.

―Está bien...no te puedo decir que no.

Jenna cumplió su palabra aunque le costó. No vino durante esos dos días y muchos paparazzi dijeron que había problemas en nuestra relación por no venir a verme. Realmente esa gente no aprendía nada. 

Las redes estaban ardiendo por el tema, Edward se defendió de las acusaciones y finalmente se comprobó que no fue él.

―Puedo llegar a ser rencoroso pero nunca mandar a pegar a alguien―dijo por redes―espero que la gente que me ha acusado pida perdón.

Al final tras comprobar las cámaras, chats y demás de los arrestados se comprobó que era unos fans celosos que también estuvieron en el incidente donde las salvé a ella y Emma. Después del anuncio y demás, las redes bajaron su intensidad y el tema que había quedado algo olvidado resurgió pues Edward estaba siendo condenado por delitos contra la intimidad. 

Cuando se trataba de famosos y con las cámaras del hotel en la parte del comedor donde se vio que cuando Jenna se marchó un momento al baño, él aprovechó para sacar fotos, todo fue muy fluido y rápido. Edward perdió no solamente ese papel millonario, sino también otros futuros además de tener que pagarnos a los dos una buena suma de dinero.

―Nunca he visto mi cuenta tan llena―pensé mirando la cuenta desde el teléfono.

 Cuando me pude recuperar del todo y me dieron el alta, salí del hospital acompañado por paparazzi y Jenna. Yo apenas pude decir algo pues ella me dijo que se encargaba a pesar de mi insistencia. 

―Dios, no respetan nada―dijo molesta.

―Cariño, ya ha pasado...gracias por cuidar de mí―ella me besó la mejilla.

Acudimos al hotel donde mi amigo me dijo que tuviera cuidado porque a este paso me iba a despedir por estar tanto tiempo de baja. Pero el jefe dijo que no hiciera caso pues gracias a estos incidentes y estar con Jenna el hotel había ganado mucha fama y todos acudían allí.

―Entonces debería tener un extra―dije en tono de broma.

―No abuses de tu suerte―me susurró mi amigo.

Volví al trabajo y al cabo de unos pocos días Jenna acudió a mi habitación. Cenamos tranquilamente, charlando y ella me tenía que contar algo.

―Debo irme lejos a grabar para una película―dijo algo triste. Yo sabía que tarde o temprano iba a pasar.

―¿Y estás preocupada por nuestra relación?―pregunté.

Ella asintió triste.

―No llores eh―ella levantó la mirada―yo sabía que esto podía pasar. Me duele pero es tu trabajo y tu futuro. Ya he aceptado las desventajas. Debes hacerlo por los dos, pero sobretodo por ti―ella sonrió.

Comió un poco en silencio.

―Pase lo que pase te voy a apoyar en todo, ¿entendido?―pregunté haciendo que soltase unas lágrimas―seguro que disfrutas mucho con este papel y logras premios, eres una persona trabajadora, madura y ordenada. A por ello.

Jenna estuvo llorando un poco más hasta que se limpió las lágrimas.

―En lugar de llorar...celebremos por nosotros y sobretodo por ti―levanté la copa―¡para que tengas mucho éxito señorita Ortega!.

Celebramos durante un buen rato a pesar de lo emocional que nos pusimos ambos. Luego, antes de irse, ambos nos tumbamos a besarnos. Lentamente nos dejamos llevar, nuestras besos fueron mucho más pasionales que de costumbre hasta quedarnos allí, mirándonos el uno al otro.

―Aún es pronto―dijo levantándose―debo irme a dormir, mañana trabajo.

―Te quiero―la abracé por la espalda.

―Siento que no demos el paso y...y...y..yo...―le di un beso.

―No pasa nada, poco a poco, ¿sí?―asintió y me besó.

Aquellos días pasaron muy rápido. Y finalmente llegó el día donde tuve que tomar las maletas para llevarlas hasta la entrada. A pesar de estar trabajando, me permitieron despedirme apropiadamente de ella.

―Nos vemos―dijo con las gafas para no verla llorar.

―Eh, ánimo, mucha suerte y que vaya todo muy bien. Estoy orgulloso de ti―me agarró antes de besarme de manera pasional.

―Jenna...puede haber paparazzi―susurré rojo.

―Mejor, así tengo una foto de recuerdo―me dio otro y se subió al coche.

Vi el coche marcharse, yo me quedé viéndolo hasta perderlo de vista.

―Bueno...se ha ido―después de trabajar y cenar, me marché a mi habitación la cual ahora estaba mucho más vacía sin ella.

Puede que tampoco fuera demasiado tiempo ella...pero su ausencia en el hotel ya empezaba a notarse. Sentía que el sol iluminaba menos en un día tan gris como aquel.

Ella me escribiría cuando acabase de aterrizar e instalarse, le dije que no tuviera prisa y que se asentase bien en el lugar.

―Te echo de menos―susurré allí a oscuras.

Los días iban a ser realmente duros, pero yo sabía que así era nuestra relación.

Al día siguiente recibí un te quiero por su parte consiguiendo así las fuerzas para seguir.

―A por otro día―me dije antes de salir de la habitación.

Continuará...

Sé que he dicho que no subiría pero al final si xD

Un saludo y espero que les haya gustado.