Inesperado-Jenna Ortega x Lector Masculino

23-Escenas

La cena con los padres de Jenna fue mucho mejor que la comida. Estando más relajado y tranquilo, pude conversar con ellos y disfrutar de una agradable cena. El ver a una Jenna más calmada, riendo y saludando al resto de la familia por videollamada mientras ponía caras divertidas y raras me alegró el corazón. Después de todo lo sucedido lo único que deseaba era que su cabeza desconectase de todo.

Los siguientes días ayude a Jenna ya que al fin y al cabo trabajaba para ella. Tenía la suerte de estar en el set mientras ella rodaba la siguiente temporada de Miércoles, cada temporada era más exitosa que la anterior. Yo veía todo desde la distancia, sin grabar ni nada, solamente como un espectador más atento a las escenas.

―Lo siento―dijo Emma disculpándose tras reírse en una de las tomas provocando las carcajadas del resto.

―No pasa nada, venga, empecemos otra vez―anunció Tim.

Iban cambiando los decorados o se iban a otros escenarios que me dejaban de piedra de lo bien hecho que estaban. Jenna y Emma se complementaban muy bien. El actor de Eugene también resultaba gracioso de ver.

En una de las paradas de descanso para preparar las siguientes escenas en la academia, Jenna se acercó a mí.

―Oye, he hablado con Tim―dijo―tengo una propuesta.

―Claro, dime, si puedo ayudarte―contesté con una sonrisa.

―¿Te gustaría salir en la serie de extra?―preguntó de sopetón.

―No soy actor―respondí sorprendido por la propuesta.

―Oh venga, solamente tienes que decir un par de frases. Serías un trabajador de una tienda e interectuarías conmigo―puso una cara pícara.

Yo me quedé pensativo.

―Lo siento pero no, no podría hacerlo

―Venga, verías a Miércoles Addams

―Bueno...si fuera Enid...

Jenna dio un pequeño paso atrás sorprendida.

―¿Estás diciendo que prefieres a Emma que a mi?

―Hombre...visto así...suena feo...pero sí

―¿Cómo eres capaz de decir esas cosas?

―¿Por la boca?.

Ella se cruzó de brazos.

―¿Y por qué Enid y no Miércoles?

―¿Porque Enid no me mirará como si quisiera asesinarme?, es dulce, colorida...―a cada halago el ceño de Jenna se iba volviendo más enfadado―si es ella si que salgo a escena.

―Ah muy bonito

―Venga mujer, no te pongas así.

Tras un buen rato hablando y dejando su enfado a un lado, accedí a hacer la escena. Total, era muy simple. Me dieron la ropa antes de maquillarme. Como venganza, Jenna iba sacando algunas fotos para guardarlas y hacer stickers con ella.

Me leí el guión ya que eran pocas líneas y solamente tenía que hacer eso que me pidió Tim.

En mi puesto, era que ambas entraban a comprar unas cosas en una tienda para un experimento que necesitaba Miércoles. Yo les atendía. El decorado estaba tan bien hecho, que me quedé un momento embobado hasta que gritaron acción.

Yo estaba limpiando el mostrador cuando sonó la campanita. Ambas entraron y Jenna se acercó con total fríaldad.

―Hola, ¿necesitas algo?―pregunté alegre al verla así ya que me vinieron muy buenos recuerdos de ella con ese traje (ya me entienden e.e).

―Necesito estás cosas―su tono era frío como el hielo, asustaba. Tomé la hoja.

―Esto...creo que podemos tener

―¿Creo?, ¿acaso no sabes lo que tienes de stock?, realmente se nota tu ineptitud a distancia.

Yo estaba muy sorprendido, no recordaba que eso estuviera en el guión.

―¿Te vas a quedar ahí pasmado o vas a buscar lo mío?, que poca profesionalidad―dijo mientras Enid miraba unos estantes.

―En-Enseguida―mi voz temblaba y fui tras una puerta donde a un lado ya tenía todo.

Tardé unos pocos segundos en salir con las cosas y le cobré.

―Al menos eres eficaz cobrando―comentó mientras recogía su cambio―espero que la próxima vez que venga a comprar no muestres una faceta tan idiota.

Miércoles salió seguida de Enid quien daba unos pequeños saltos. Al salir...

―¡Corten!―dijo Tim―¡genial Tn y Jenna, habéis estado magníficos!.

―¡Ha sido genial Tn!―Emma se acercó a mí, se hacia raro verla con la peluca―¡te has metido de lleno en el papel!.

Jenna se acercó a mí.

―Cambié el diálogo aposta para vengarme de tu bromita de antes―dijo sonriente y satisfecha―he de reconocer que has actuado como si tuvieras miedo.

―A ver quien le dice que si, que me he acojonado―pensé poniendo una falsa sonrisa.

Devolví toda la ropa y me cambié. Emma y Jenna se acercaron a mí.

―¿Tomamos un café?―preguntó―aún tienen que rodar los demás personajes sus escenas.

―Claro.

Tomamos café, nos hicimos fotos y charlamos alegremente. Aún faltaba un buen rato así que Emma dijo que iría a ver como iban los demás actores.

Jenna y yo fuimos al camerino de ella. Al entrar, cerró la puerta y me dio un pequeño beso en los labios. Yo le seguí el juego, nos besamos poco a poco, sentíamos el calor del otro...era una sensación maravillosa.

―No podemos―susurré―puede que te llamen y...―pero fui callado por un beso.

―Es algo...morboso...supongo―dijo antes de que nos riéramos un poco los dos.

La coloqué sobre la mesa y ella me rodeó con los brazos. Nuestros besos se iban intensificando hasta un punto que no sabíamos si continuar o dejarlo. La incógnita de que pudieran llamarla o que le pasase algo a su ropa era excitante.

―Será mejor dejarlo aquí―dije―luego seguimos...si...será lo mejor.

Ella me mordió la oreja y acarició mi pecho.

―Dios...hace tiempo que no tenemos intimidad y ahora...―estaba algo sudada.

―Esperemos, se pueden dar cuenta y encima llevas el maquillaje―ella asintió.

―Está noche no te libras de mi

―Tampoco iba a poner mucha resistencia.

Bebimos un poco de agua, nos refrescamos y volvimos a escena. Justamente ya la llamaban para continuar.

El rodaje de ese día concluyó al cabo de unas pocas horas. Jenna salió agotada y tras despedirnos de Emma, regresamos al hotel. Tim me felicitó por la escena, la verdad es que fue vergonzoso ya que era alguien a quien admiraba y me gustaban mucho sus películas.

Jenna se durmió un rato en mi hombro de regreso. Al llegar, se dio una ducha y cenamos con sus padres.

―Menudo día―se estiró y me tumbé a su lado.

―Si...

Jenna se puso encima y comenzamos a besarnos,

―¿No creerás que me he olvidado?

―No...je,je.

Bajamos la intensidad de la luz y los besos junto a las caricias continuaron hasta las altas horas de la madrugada. Llevaba tiempo deseando estar así con ella. 

Fue una noche muy especial para ambos que terminó en sudor y sonrisas por parte de ambos.

A la mañana siguiente tocaba regresar al trabajo.

Continuará...