CAPITULO 28: Dominante

27 4 6
                                    

🔞 ADVERTENCIA, ESCENA EXPLICITA, SE CUIDADOSO AL LEER, GRACIAS.🔞

(*Después de algunos años*)

Salgo corriendo de aquella habitación, ¿qué me pasó?, Tonelay cautivo algo de mi que me confunde, ¿cómo puedo sentir esto por él?, mis sentimientos son como absorbidos, necesito una respuesta, me siento mareada por todo esto.

Casi al llegar a una calle poco transitada siento como una mano se posa sobre mi hombro, mi mirada se posa en ese hombre, brazos grandes, en tamaño igual, sus cabellos plateados y esos ojos que me llegan hasta el alma, su mirada me reclama admirarlo, mi corazón enloquece con sus roces, siento como su mano de posa sobre mi mejilla, sujeta mi otro brazo con rudeza mientras me deja contra la pared.

Gretel:
— C~ciro... —siento como mi cuerpo está temblando.

Ciro:
— No pensé que sueles atraer moscas, no puedo evitar pensar que así como estás tratando de pagarme. Mi querida Gretel.

Sin poder responderle me lleva a arrastras hasta su vehículo, ambos tomamos asientos, la calle parece totalmente solitaria, arranca el automóvil mientras se siente un aire tan tenso, ¿él se dio cuenta de todo?, no puedo creer esto, no puedo soportar la idea de que Ciro quiera tomarme odio y hacerme pagar.

Se orilla cuidadosamente en carretera, la lluvia comienza a caer en esta zona, Ciro clava su mirada en mí.

Ciro:
— Súbete a mis piernas

Gretel:
— ¿Q-que?, Ciro, quiero que hablemos.

Ciro:
— ¿No me has escuchado? —tragando en seco, me coloco encima de sus piernas mirando hacia otra dirección y tratando de que mi vestido no se levante— ¿Por qué no quieres mirarme?

Gretel:
— Ciro, lo siento, en serio, no se que podría pasarme.

Ciro:
— No te creo, —sus manos se van directo a mis glúteos, sube el vestido y yo trato de bajarlo.— no puedes hacer eso, así que es mejor que me obedezcas.

Gretel:
— Ciro... —siento como mi cara arde.

Ciro:
— Te demostraré cuánto puedo llegar a amarte Gretel.

Mis palabras no logran llegar hasta él, no puede comprenderme de esta manera, el desliza sus manos por todo mi cuerpo debajo de mi vestido, siento como un bulto aparece entre mis piernas, se siente muy duro, una de sus manos se coloca en mi zona íntima frotando de una manera suave y constante, siento que mi cuerpo se calienta, maldición se siente bien, Ciro sabe sobre mi casi en su totalidad.

Un impulso me hace besarlo, sus labios y los míos se unen en un caluroso beso, sin perder tiempo él desabrocha mi sujetador y baja mis bragas, sus manos grandes sujetan mis pechos mientras tomamos un respiro de nuestro beso salvaje, sus manos bajan a su pantalón, quitando su cinturón, desabrochando su botón y bajando el cierre de su pantalón, haciendo a un lado su ropa interior su flamante amigo hace presencia.

Lo frota contra mí, se siente caliente, siento que podría derretirme, Ciro comienza a ponerlo mientras besa mi cuello de una manera excitante, en un empujón todo entra completamente, no puedo evitar gemir al sentirlo tan dentro de mi, mi piel se eriza.

Ciro:
— Muévete para mí, mi dulce Gretel. — me susurro en la oreja.

Muevo mis caderas de arriba hacia abajo, no puedo dejar de gemir, Ciro suelta leves gemidos y su rostro se ve algo rojo, sus orejas también, nuevamente uno nuestros labios mientras Ciro con sus manos hace que mueva más rápido mis caderas, el auto tiene todos los vidrios empañados, siento como me penetra de una manera brusca pero me excita, casi a punto de llegar hasta el orgasmo lo miro a los ojos.

Su rostro es tan apuesto, su cabello tan llamativo, no podría confundirlo con nadie, Ciro es como una especie de fruta prohibida, no puedes dejar de tener de él. Nuestros cuerpos chocando.

Ciro:
— Estoy a punto de acabar, se siente tan bien todo de ti, me encanta, Gretel te amo tanto. —sus palabras resuenan entre todo mi ser.

Gretel:
— Ciro, me encantas.

Sumergida de placer, llegó al orgasmo y de igual manera él, siento como algo caliente recorre mis piernas, siento como late y aún permanece dentro de mi, Ciro mirandome con su rostro todo sonrojado mantiene una cara sería pero complacido.

Ciro:
— Debes saber que no dejaré que pertenezcas a alguien más, debes saber que solo podrás tenerlo todo de mi. —sujeta mi rostro con una mano.

Ciro se estira un poco hacia la guantera y saca unos pañuelos, sosteniendo su mirada en mí, me hace sentir nerviosa, desvío mi mirada mientras me retiro de sus piernas, de la posición que habíamos tomado. Me limpio un poco mientras Ciro hace lo mismo.

Gretel:
— Ciro, yo quiero que me escuches. —el se acomoda su ropa, al terminar arranca el vehículo.

Ciro:
— Ya e escuchado lo suficiente, no hay porque hablar de personas que no tendrán mucho tiempo en este mundo.

Gretel:
— Ciro, por favor, ya no hagas daño a más gente.

Ciro:
— Si hubieras escuchado antes, abría más probabilidad de escucharte yo a ti.

Nos quedamos en silencio, Ciro es muy amable la mayoría del tiempo aunque entiendo, mi corazón retumba de una manera grotesca, Ciro nos trajo a una de las mansiones que le fue dada por Gregory, es tan grande, la gente de aquí es muy amable conmigo también.

Una de las más leales mucamas de Ciro me tiene una bata afuera, bajando me cubre con ella y la cierra de manera suave, una leve sonrisa aparece en ella.

Gretel:
— Gracias. —ella solo se inclina un poco y va a un lado de Ciro.

Ciro:
— Marbella, ¿mi padre está aquí?

Marbella:.
— Si amo Ciro, su padre debía atender unos asuntos urgentes con usted, llevaré a la señorita Gretel a su habitación.

Ciro:
— Asegúrate de que así sea, después volveré con ella al terminar de hablar con mi padre.

Marbella:
— Si joven amo.Ciro me da una última mirada, se ve un poco triste.

Voy detrás de la mucama sin mirar el camino, mis piernas me tiemblan un poco, la mucama se queda alado de la puerta y la abre para que yo pueda pasar.

Marbella:
— Ciro estuvo preocupado por usted, incluso uno de los empleados pago las consecuencias de su desesperación.

Gretel:
— ¿¡Esta bien?!

Marbella:
— Sus familiares recibieron una suma de cantidad y se cubrieron los gastos de su "accidente". —siento como mi cuerpo pesa.

La mucama se va dejándome sola en la habitación, me siento mareada nuevamente, no puedo dejar de sentir esto por Ciro, me desnudo mientras me dirijo hasta el baño, necesito dormir, no puedo más con este sentimiento tan pesado en mi corazón.

Besos Sin Aliento. (+18)©️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora