✨️Ohm✨️
Voy a terminar los análisis del mes que estoy haciendo en la computadora, cuando veo a Force.
—Tienes que leer estos —dice colocando unos informes sobre mi escritorio.
—Literalmente te pago para que los leas por mí —le recuerdo— ¿Puedo firmarlos y ya?
—Eres un holgazán.
—No lo soy, solo quiero irme a casa.
—No se va a poder, tengo unos balances para que los revises, necesito acabar las proyecciones del resto del año.
—¿Es urgente?
—Ohm —dice serio— lamento tener que decirte esto, pero últimamente pierdes todo lo que yo consigo, y me preocupa, enfócate más en la empresa, nos vas a llevar al fracaso.
—Lo sé —respondo apoyándome en la silla— es que no entiendo porqué todo está saliéndome mal.
—Solo tienes que trabajar más duro, puedes hacerlo, creo que eres muy bueno en esto, y vas a encontrar la manera de hallarle una solución a todo.
—Gracias —susurro sonriéndole y él asiente.
—Estás preocupándome, porque te quiero —dice levantándose— voy a mandarte esos balances antes de irme, creo que necesitas espacio.
Force está a cargo y soy yo el problema, él sabe más que nadie de los movimientos de la empresa, porque lo contraté para eso.
Confío en él, no podría poner todo lo que tengo en las manos de alguien más.
Veo con flojera los informes, cuando cierra la puerta.
Esto va a tomarme horas.
Doy vueltas en la silla, porque estoy estresado.
Mi mirada va a la puerta porque suena, y ya es tarde.
Seguramente mi secretaria ya se ha ido.
—Está abierto —digo acomodando los papeles.
—¿Te molesto?
Sonrío, al ver que es First.
—No, pero me sorprende que estés visitándome, es tarde.
—Tenía una reunión en el edificio del lado, se me ocurrió pasar a verte.
—¿De trabajo?
—Sí, lo de siempre, necesito uno formal, pero ninguna empresa me llama, terminan de decepcionarse en la entrevista personal.
—Van a hacerlo, eres bueno en lo que haces —digo ya firmando un informe.
—¿Vas a avisarme cuando el área legal tenga espacios acá?
—Claro que sí, serás mi primera opción, a Nanon va a encantarle la idea.
Él suspira.
—Gracias, Ohm —dice sonriéndome.
—A veces la cago en grande, no será el trabajo de tus sueños.
—Créeme, puedo ser muy bueno si se trata de defenderte a ti.
—¿Intentas comvertir esta conversación en una entrevista laboral?
—No, solo quiero que sepas que cuentas conmigo si lo necesitas, siempre que quieras.
