✨️Nanon✨️Cuando regresamos a casa, después de pasar el día fuera, ya no encuentro un lugar para colocar todas las bolsas que traemos.
Solo necesito mirar algo, y Ohm lo compra para dármelo.
No le importa el precio.
En todo el camino a casa he estado más silencioso de lo normal, porque necesito que me pregunte qué ocurre.
—¿Estás bien? —dice después de dejar a Aroon en la cuna y yo suspiro, asintiendo lento.
—Sí —susurro forzando una sonrisa que obviamente no cree.
Está hecha para que se note falsa.
—Non, ¿qué pasó?
—No quiero incomodarte, tengo algo en la cabeza que está dando vueltas.
—Puedes contarme, mi amor —dice acariciando mi mejilla y yo lo miro.
—Es por First.
—¿Por First?
—Vas a pensar que estoy loco, pero hay algo en su comportamiento que me rompe el corazón —le explico y él está poniendo atención.
—¿Qué es?
—Yo creo que le gustas.
Los movimientos son importantes, pero también el momento en que los haces.
—Amor, yo nunca le he dado un motivo para que él esté interesado en mí, soy bastante claro con todo el mundo, no hay persona a la que no le haya hablado de ti y de cuánto te amo.
—Quiero estar equivocado —respondo quebrándome— llevo un tiempo intentando no tomar de mala manera las atenciones que tiene contigo, pero... no esperaba que intentara meterse en tu empresa, mintiéndote.
—¿Lo hizo?
—Yo no quería contarte, pero él tiene un trabajo estable, no necesita otro.
Sonrío internamente, limpiando mis lágrimas.
—Quizás estoy siendo paranoico, pero me aterra que alguien pueda llegar a meterse en nuestro matrimonio, y quiero pensar en que First no sería capaz.
—Quiero pensarlo también —responde besando mi frente— tú no tienes que preocuparte por eso, yo jamás voy a dejar que otro Omega cruce la línea de la confianza conmigo.
Sonrío mirándolo a los ojos.
Es que es sincero, sé que nunca lo va a hacer.
Me acerco a su boca y presiono mis labios despacio contra los suyos.
Jadeo porque profundiza el beso, presionando sus dedos en mi cadera.
Mi teléfono suena y él me suelta, resoplando.
Me río, porque le ha molestado.
Lo saco de mi bolsillo, y quiero girar los ojos al leer el nombre de Force en la pantalla.
Parece que no ha tenido suficiente.
Supongo que ya está bastante arrepentido.
A mí nadie me amenaza.
Sí, Force es lindo, pero se está equivocando conmigo, no va a tocar mi dinero.
—Yo nunca hago esto, Nanon, pero lo de hoy ha sido bajo.
Giro, pero no me alejo demasiado de Ohm, porque tiene que escuchar.
—¿Qué ha sido bajo? —le pregunto.
—Tú sabes de lo que hablo, he cerrado la boca porque sé que vas a dejarlo algún día, y ambos pudimos beneficiarnos mucho de eso.
—¿Por qué estás hablándome así? —suelto esforzándome por sonar afectado, sin quebrarme, necesito un intermedio— tienes razón, quizás yo no sé de la empresa como tú, pero no creo que sea justo que me trates de esta manera, solo estoy preocupándome por mi esposo.
—Hijo de puta —dice colgando, porque ya se ha dado cuenta.
Volteo y Ohm ya está a mi lado.
Lo abrazo y él acaricia mi cabeza despacio.
—¿Era Force?
—No debí meterme con él hoy, tiene razón, no soy muy listo, no sé mucho de lo que él hace.
—¿Eso te ha dicho?
—Ohm —digo agarrando su brazo, porque quiere ir a agarrar su celular de la mesa.
—Voy a llamarle.
—Me sentiré terrible si causo un conflicto entre ustedes.
—Es que él no puede hablarte así a ti.
Mi Alfa va a defenderme a mí de cualquiera, ya tengo todo bajo control.