Capítulo 13. Misterio

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Arthit arrastraba los pies cuando volvía a su dormitorio. Se encontraba realmente agotado. Acababa de descubrir que hablar con esa persona podía cansarle hasta la saciedad. Tan cansado estaba que no se dio cuenta que durante todo el camino estuvo arrastrando los pies.

- Odio a ese tipo. – Murmuró alto el castaño cuando abría la puerta. – Realmente lo odio.

"¿Te gusta Maze?

Las palabras de Kong resonaron en la mente del castaño, haciéndole fruncir el ceño con disgusto. Se quedó pensando que en otras circunstancias, hubiera pensado que era un chico bastante atractivo y realmente sexy, pero su mente volvió a Kong.

- Eres denso. – Se dejó caer en la cama y suspiró. - ¿Por qué no podrás darte cuenta que eres tú quien me gusta? – Miró al techo y empezó a patalear cuando en su mente, vívidas imágenes del moreno con ese estúpido mayor aparecieron danzando en su mente.

Kong riendo. Kong sonriendo cogiéndole de la mano. Cogidos de la mano a la salida del cine después de haber compartido el estúpido bol de palomitas. Cogidos de la mano felices dirigiéndose a su casa. Mirándose fijamente mientras estaban frente al otro, acercándose lentamente. Besándose. Besándose lentamente mientras se dejaban caer en la cama.

- ¡Basta! – Pateó nuevamente furioso. - ¡Espera! ¿En qué estoy pensando? – Se sentó de golpe en la cama. – Seré memo.

Se golpeó la frente con la mano, recordando que el estúpido mayor le había dicho que había quedado. Sabía que Kong era Kong, no por ello había sido su mejor amigo desde niño convirtiéndose después en su primer amor y queriendo que se convirtiera en su primer beso y su primera vez.

Se tumbó de nuevo, pensando ahora en la conversación que había tenido con el horrible mayor. Los ojos empezaron a picarle y no pudo evitar que un par de lágrimas se deslizaran de sus ojos. Empezó a tranquilizarse, buscando una razón para que no hubiera acudido a él, pero no encontró ninguna, así que suspiró abatido.

- ¿Qué habrá querido decir con eso? – Se preguntó a si mismo mientras se dejaba caer en la cama. Pensativo miraba al techo. - ¡Joder! Dos días durmiendo en un parque. ¡Dos! ¿En qué están pensando?

Pronto empezó a cruzar por su mente, la última parte de la conversación, donde le había hecho preguntas sin parar, haciéndole sentir que él tenía toda la culpa. Pero por más que Arthit pensara, no lograba saber de qué.

Empezó a darle vueltas y más vueltas, hasta que molesto y frustrado por no encontrar la respuesta que buscaba, cogió el móvil y empezó a teclear.

"Hola tía Nit, he recibido mensaje de Kong. Gracias por darle recado."

De tanto insistir, al final lo conseguí

:)

Esperó paciente la respuesta, que tardó un buen rato en llegar.

- A ver qué excusa me das, tía. – El moreno replicó al móvil y encendió la pantalla para leer la respuesta.

"Me alegro mucho, hijo"

"Ahora a dormir tienes clase mañana"

Arthit ignoró el último mensaje y siguió escribiendo a la vez que lo leía en voz alta.

- Me ha dicho, que está en Bangkok por unos días y que quiere verme.

La respuesta se transformó en llamada.

- Arthit cariño, – Nit empezó tranquilo. – Buenas noches.

- Hola tía Nit. Estoy feliz, realmente feliz, muy, pero que muy, muy feliz. Moon me ha escrito diciéndome que quiere verme después de tanto tiempo.

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