"La imaginación es el principio de la creación. Imaginas lo que deseas, persigues lo que imaginas y finalmente, creas lo que persigues."
-George Bernard Shaw
Al terminar de liberar la última prenda de mi cuerpo los ojos de Devon no se apartan ni un segundo de mí. Sus hombros tensos, su respiración agitada y su mirada caliente e hipnótica causa remolinos en mi estómago. Tiemblo. Hace frío, pero mis extremidades no parecen tener problema alguno.
Hay frío, pero la mirada de Devon me calienta hasta el alma.
—Mis ojos no están por ahí abajo, Devon —suelto una risita. —Te estás confundiendo.
Ni siquiera pestañea.
—Amo los colores de tus ojos, de verdad que lo hago. Pero, Phoenix, en este preciso momento no me interesan.
—Así era que me querías desde que me conociste ¿no? —Humedezco mis labios, tentándolo. —Desnuda, caliente y necesitada ¿verdad? Maldito pervertido.
Una sonrisa traviesa se dibuja en sus labios.
—Yo no soy un pervertido, Phoenix.
—Yo sé que lo eres. Más que tus hermanos, incluso. Pervertido.
Inhala y exhala. Le está contando todo lo que tiene para no perder el control ¿pero qué lo retiene? Por algo me hizo desnudarme en pleno invernadero ¿no?
¿Qué es lo que planeas, Devon?
—Harás algo para mí —empieza. Ladeo la cabeza al verlo sostener una cámara. No me había percatado de ella ni del extraño espacio en el piso donde descansan muchas flores. —Te pondrás ahí, y posarás para mí ¿crees que puedes hacerlo, Phoenix?
Ni siquiera dudo en asentir.
—¿Quieres que me acueste ahí, desnuda?
—Así es.
Sigo sus indicaciones y me acerco hacia las flores plantadas en el piso. Al hincarme me encuentro más de cerca con las flores. Lirios de un naranja intenso adornan casi todo el espacio del invernadero, son hermosas y llamativas. Huelen riquísimo. Son muchísimas, más de las que podría contar.
Mis ojos se maravillan al ver las flores.
—¡¿Como sabes que son mis flores favoritas?!—chillo. Me agacho para tocar los pétalos del lirio.
—Lo se todo de ti, aunque no lo creas.
Sonrío.
—El misterio no me va ¿sabes? Pero solo por ahora lo dejaré pasar.
Cuando me abro un espacio en medio, los lirios naranjas me hacen cosquillas en todo el cuerpo produciéndome una sensación tan... exquisita. Sonrío. Al levantar la mirada, Devon me observa con detenimiento por todo el cuerpo y los ojos, el cabello. Todo. Sus ojos no se apartan de mí ni un segundo.
—Tus ojos brillan —susurra. Sostiene su cámara en las manos mientras la apunta hacia mí. —¿Puedes posar para mí?
Como si fuera un robot y estuviera escuchando órdenes de mi dueño, lo hago. Enredando mis piernas para qué queden de una manera decente mientras mi cabello cae en cascada por mis costados, en mi defensa, nunca en mi vida he posado para una cámara. La única vez que lo hice fue por obligación a causa de la organización.
Si no lo hacía sería maltratada mucho más de lo que ya lo era.
—¿Así?
Su silencio me pone malditamente nerviosa. Ni siquiera sé qué demonios estoy haciendo.
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SIBILINO [+21]
Mystery / ThrillerUna mujer. Tres hermanos. Un desastre. Me veo obligada a irme a suiza por culpa de mi pasado. Una parte de mi vida que espero dejarla atrás, pero el mundo tiene planes diferentes para mi. Nadie puede salvarme, ni siquiera mis mejores amigos. ¿Qué pu...