El recién coronado Rey debe escoger a un omega entre los hijos del Duque para casarse, es una lastima que su hermano menor y él se hayan enamorado del mismo omega.
Inicio: 04/08/23
—Príncipe Minho — El omega hizo una rápida reverencia, sentía el corazón agitado, su futuro alfa pocas veces le dirigía la palabra.
—¿Has tenido noticias de Jisung? — El Príncipe olía a preocupación, su distintivo aroma a café se sentía más amargo que de costumbre, un poco de celos se instalaron en el corazón del omega.
—No se a levantado de la cama en todo el día —Respondió evitando sonar tan molesto como se sentía.
—¿sabes si a comido algo?
Negó — Jisung a rechazado la comida de las betas.
—Bien, gracias Felix — se dio la vuelta para irse tan rápido como había llegado.
—Espere Príncipe Minho — Felix lo tomó de la tela de su camisa — Quisiera que pasáramos más tiempo juntos — Lo miró a los ojos suplicante, comenzó a liberar más de su aroma para tener la completa atención del alfa.
Confundido por la actitud del omega y abrumado por su aroma, retrocedió para soltarse de su agarre — Lo siento Felix, ahora mismo tengo algo importante...
—¿Qué tiene él que no tenga yo? — Preguntó en un susurro.
—¿Qué...
—¡No! — Exclamó con desesperación sorprendiendo al alfa — No intente negarlo, yo lo se todo, se que se encuentra con Jisung en la biblioteca cada día desde que llegamos al palacio, puedo olerlo en él todo el tiempo, incluso cuando el Rey deja su aroma en Jisung, su aroma a café sigue estando ahí siendo parte de él —Los ojos del omega comenzaron a cristalizarse — El Rey puede ser tan imbécil como para no notarlo, pero yo pude verlo en la forma en la mira a mi hermano, Príncipe Minho le recuerdo que su prometido soy yo.
El lobo dentro de Minho sintió temor, temía lo que un omega despechado pudiera hacer.
—Nunca me a marcado con su aroma ¿acaso no quiere que los demás sepan que soy su omega?—Una pequeña sonrisa se formó en sus labios mientras un par de lagrimas corrían por su rostro— soy más lindo que Jisung y puedo hacer todo lo que él le hace ¿por qué no me busca a mi? ¿por qué él? yo estoy dispuesto a todo por usted Príncipe Minho.
—Lo siento Felix hay cosas que no están en mis manos, no puedes obligar a tu lobo a amar a quien no es su pareja destinada.
Felix bufó con una sonrisa— ¿Fue Jisung quien le metió esas ideas fantasiosas? — Peinó su cabello frustrado, claro que se tenia que tratar de ideas impuestas por su astuto hermano — Príncipe Minho si lo que quería era acostarse con mi hermano pudo hacerlo sin más ¿por qué caer en sus engaños?
—Felix no hables así de tu hermano — Un ligero gruñido de advertencia salió involuntariamente.
—Estoy seguro de que no lo ama, solo es atracción física lo que siente por él — El omega tomó sus manos y se acercó más a él — Yo puedo darle lo que Jisung le da y no tendría que esconderse como un ladrón para entrar a mi habitación, está en su derecho ya que soy su omega.
—Ya te lo dije una vez Felix, y realmente esperaba no tener que hacerlo de nuevo, entiende de una vez — soltó sus manos con brusquedad, ya no tenia paciencia, su omega lo necesitaba y Felix solo le hacia perder tiempo valioso — Podrás ser mi prometido pero no pienso tomarte como mi omega, ese lugar le pertenece a alguien más.
Felix lo vio alejarse — ¡Piénselo bien Príncipe, por la seguridad de Jisung! — Exclamó desesperado y con el orgullo herido.
El lobo dentro del alfa gruñó furioso —¿Eso fue una amenaza Felix? — Regresó rápidamente al lado del omega.
— Yo seria incapaz de hacer eso — su mirada reflejaba inocencia, Minho sintió nauseas, su lobo comenzaba a rechazar al omega con más fuerza — solamente me preocupa pensar en que seria de mi hermano si llegarán a atraparlos estando juntos en la biblioteca a altas horas de la noche, al Rey no le agradaría saber que su omega no es puro y tiene sexo todas las noches con su hermano.
—Basta, no voy a permitir que deshonres así a tu propio hermano — Mostró sus colmillos al sentirse amenazado — Te lo advierto Felix...
—No Príncipe Minho, no puede advertirme nada en su posición, no lo hará, por la seguridad de Jisung no lo hará, porque ninguno de los dos queremos verlo sufrir ¿cierto?
—¿Qué carajos quieres?
—Márcame con tu aroma alfa — Murmuró acercándose más a él — Podemos comenzar por ahí.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
