EMBARAZO [G!P]

CAPÍTULO 35

Irene prepara el desayuno en sus peores fachas. Está recién levantada, en casa solo están ella y SeulGi, así que da igual como se vea. Una camisa sin nada abajo, el boxer y nada más.

Está feliz y lo demuestra cantando The Man de Taylor, a un volumen moderado para no despertar a sus dos bebés.

El desayuno son solo frutas y un batido por lo que pica mientras canta. Ha pensado en hacer un viaje con SeulGi, ir a las islas Jeju o a una casa de campo.

¿La razón de tanta felicidad? ¡Yoona se fue! Desearía gritarlo, por ahora en su cabeza suena lindo. 

—¿Otra vez frutas?—SeulGi la sorprende. Trae cara de estar agotada.

—Mañana te hago tostadas—Le dice acercándose para darle un fugaz beso—¿Por qué parece que te pasó un camión por encima?—Mala pregunta para iniciar el día.

—¿Tan mal me veo?—Justo en su "fealdad"

—No, no, es que parece que no has dormido, dormiste más que yo. Luces hermosa pero cansada—Eso hace sentir un poco mejor a la menor.

—Bajar las escaleras es cansado, me hace doler todo.

—Mañana apenas vas a cumplir seis meses, si sigues así llegarás en silla de ruedas a los nueve meses.

—Siento como si fueran quintillizos.

—Es solo una—Por suerte—si sigues con dolores es mejor hacerte una cama en la planta baja.

SeulGi bajando la mirada asiente—¿No te han llamado?

Irene no puede evitar sonreír sabiendo que se refiere a lo de Yoona.

—La doctora Krystal dijo que tu mamá se fue a un departamento, se va a recuperar ahí—Va a morir sola. Y eso la hace aún más feliz, aunque a SeulGi parece afectarle—¿No estarás pensando en ir a visitarla?

—Ya no pienses que soy tonta, ella obtiene lo que merece.

—Hay un pero ¿cierto?

—Espero que le vaya bien.

La sonrisa se le borra. Desearía hacer entender a SeulGi que Yoona es el diablo y no merece la lastima de nadie.

—Iré a cazar—Avisa esperando a que le dé permiso.

—¿Desde cuando cazas?

Desde que le disparé a mi tía.

—A papá le gustaba hacerlo. ¿Puedo ir?

—¿Con quién irás?

—Con Jimin.

—¿Esa mariposa sabe cazar?

—Mejor de lo que crees. Si cazó a Jungkook podrá con un venado. Oh...¡le dijiste mariposa!—Vaya, parece que aprende sus mañas.

SeulGi se encoge de hombros restandole importancia. No tiene idea de quién es JungKook pero le da permiso.

—Seulbear, ¿iremos a hacer los ejercicios?—Deben estar en estiramientos para prepararse antes del parto.

—Es hasta las dos.

—¿Pero sí te vas a bañar?

SeulGi rueda los ojos cansada de la misma pregunta.

—Hace mucho frío—Es su nueva excusa.

—Para eso tenemos ducha, hay agua caliente.

—No insistas—Le da un beso—Tengo mucha hambre.

Juntas desayunan, al final tuvo que preparar las tostadas porque ahora SeulGi está comiendo el triple.