Capítulo 22

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Levi regresa justo después de mi fantástica ducha y de que me he puesto ropa mucho más cómoda para la noche

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Levi regresa justo después de mi fantástica ducha y de que me he puesto ropa mucho más cómoda para la noche.

Tiene dos bolsas en un brazo y una pizza en el otro, y mis ojos se iluminan cuando lo veo.

— Parece que estás más emocionada de ver la pizza que a mi. –Se queja Levi.

Me río. — Quizás... aún no lo he decidido. –Respondo, mientras le quito la pizza y él pone los ojos en blanco.

Me siento en la cama y Levi imita mi acción al otro lado. — Traje vino...

— No me digas, de la reserva especial de los Blouse. –Me burlo y él me empuja.

— Solo lo mejor para ti. –Me entrega la botella de vino y yo sonrió. — También traje chocolate.

Eso me anima. — ¿De qué tipo?

— No sabía qué tipo te gustaba, así que compré algunos. –Él comienza a entregarme varias barras de chocolate. — De leche, oscuro, blanco, con almendras y creo que también hay con nueces.

Mi corazón late fuertemente en mi pecho. Es tan dulce... demasiado dulce para mí. — Gracias. –Digo más que agradecida, tomando el contenido de sus manos. — En serio. Gracias. Puedo devolverte el dinero por-

— No, no puedes. –Interrumpe Levi. — Iré por vasos.

Yo asiento. Dios, él es tan bueno conmigo, incluso cuando ya no necesitamos seguir con el truco de la pareja falsa. Lo disfrutare mientras pueda.

Levi, ya sin abrigo, vuelve a sentarse a mi lado. Sirve vino mientras uso el control remoto para cambiar los canales de televisión y encontrar una película de comedia, de acción o algo al azar que nos entretenga lo suficiente. 

En cuanto encuentro una película que nos parece a ambos dejo el control a un lado. Levi me entrega unas servilletas y un plato, luego una copa.

Arrastro los pies hasta llevar las rodillas al pecho. Estoy justo al lado de Levi, casi hombro con hombro. Levi levanta su copa. — Por fingir ser pareja.

Sonrío y levanto mi copa. — Por fingir ser pareja con éxito. –Añado.

La película avanza y tanto Levi como yo disfrutamos. La comida es buena, el vino es bueno y la película es buena, pero creo que la mejor parte es simplemente la comodidad. Todo esto empezó ya hace dos semanas aproximadamente y nunca hubiera imaginado lo cómoda que me sentiría en presencia de Levi. Que algún día llegaría hasta aquí.

Estoy un poco nerviosa, seguro; Mi rodilla sigue chocando con la suya y nuestros hombros están presionados. Pero no es realmente ansiedad, no lo creo. Solo nervios generales que surgen de estar tan cerca de él y de la situación actual. 

Pero estoy cómoda. Estoy feliz. Y no me costo mucho llegar a este punto, las cosas con Levi simplemente se dieron con bastante facilidad.

Finalmente, la película termina y cambio a un canal de noticias que está en cuenta regresiva hasta la medianoche. Faltan solo unos minutos más para el año nuevo, y mientras Levi se pone de pie, le ayudo a pasarle algo de basura y platos sucios. Él va a dejarlos hasta la cocina; Pongo el vino en la mesa y coloco la caja de pizza vacía junto a uno de los contenedores de basura.

Una vez en Diciembre Donde viven las historias. Descúbrelo ahora