Lucy
Mis padres me reciben en su casa con los brazos abiertos. Estoy más que contenta de pensar en que no volveré a Nueva York dentro de largo rato ahora que decidí regresar definitivamente a California.
-Extrañaba estar aquí. -digo acostándome en el sillón de la casa de mis padres.
-Y nosotros extrañamos tenerte aquí. -mamá dice inclinándose hacia mí y besando mi cabeza.
-Lástima que ya no tienes por qué quedarte con nosotros. -papá suspira.
-Sí, extrañaré mi habitación, pero Nico y yo ya tenemos una cama lista en nuestra casa. -digo y me siento nuevamente. -Aunque igual podría quedarme aquí si me lo piden.
-Lucy, ya eres una mujer casada, con tu propio hogar e independencia. No tienes que quedarte aquí. -Mamá se sienta a mi lado y me abraza.
-Lo sé. -digo y hago puchero mientras recuesto mi cabeza en su hombro.
-La casa se siente tan vacía a veces que pensamos en rentar las habitaciones a estudiantes universitarios, pero a la vez, no quiero que nadie más que ustedes habiten la casa. -mamá me dice.
-Tu mamá también pensó en que quizá podríamos vender la casa, ya que se nos ha quedado grande. -papá dice.
-¿Qué? ¿Vender la casa? -digo alarmada.
-Tranquila, no lo haremos, llevamos viviendo aquí desde que los gemelos nacieron. Sus últimos recuerdos de niñez están por toda la casa y ahora el espacio lo usaremos para cuando nuestros nietos vengan a hacer pijamadas.
Me río ante eso y asiento sabiendo lo consentidores que son con sus actuales nietos.
-Ustedes aún no me den nietos, es muy pronto. -papá le advierte a Nico, quien no entiende nada porque acaba de venir de la cocina.
-En mi defensa. -Nico se aclara la garganta. -Usted dijo que no tuviéramos hijos antes de los veinticinco y ya tenemos esa edad, he cumplido mi palabra. -dice llevándose la mano al pecho y entregándome un vaso con agua fría.
-Alarguen la edad.
-Papá. -le advierto, mirándolo mal.
Él gruñe.
-Ya no puedo usar el argumento de que aún no están casados como excusa.
-¿Acaso tú esperaste a estar casado antes de embarazarme? -mamá alza una ceja.
-Eso fue diferente.
-Adam estaría muy ofendido si te escuchara. -Ella resopla. -Deja a nuestra hija y a nuestro yerno hacer sus vidas. Van a tener hijos cuando estén listos, ya sea hoy o en cinco años y tú debes aceptarlo.
-Aclaro que no será hoy. -añado.
Nico se ríe, sentado a mi lado mientras que papá resopla en su lugar, frotándose las sienes.
-Eso al menos me alivia un poco.
***
Nico se encuentra sentado en el sillón de la casa de Rubén, cargando a Cecily, la hija menor de Tere y Tom. Betsy, la segunda mayor, está sentada a un lado, mordiendo algo mientras que Amber cuenta una historia frente a ellos. Dante se encuentra sobre el piso y los únicos que hacen falta ahí, son Rai, el hijo adoptivo de Rubén y Aaron, el bebé aún no nacido, hermano del último.
Es impresionante cómo en tres años, la familia se ha expandido, ahora tengo cuatro sobrinos y uno más por nacer.
-Realmente ver a Nico rodeado de niños, me tienta a querer tener uno. -digo y suspiro. -Esto es mucha presión. ¿Cómo lo haces? Tenemos la misma edad y tú ya vas por tu tercera hija.
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Siempre Juntos Chicos (SC Libro #3)
Teen FictionLIBRO #3 "SAGA CHICOS" Tres años después del incidente que le puso pausa a su vida normal y cotidiana, Lucy regresa con una mejor versión de sí misma. Ahora es una Lucy de 22 años, una recién graduada de la universidad y una de las caras principales...