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— ¡Tienes que estar bromeando! —miré a Jisoo con incredulidad —. ¿Miya dijo eso?
Es posible que haya olvidado cómo parpadear.
Cambié mi mirada hacia Mingyu para ver si él se reía y decía que fue idea de Jisoo hacer la broma.
No sucedió tal cosa.
Pasé de ser sospechoso a víctima y ahora mi propia hermana me había convertido en un verdadero asesino.
Miré las paredes grises de la sala de interrogatorios.
Jisoo fue el primera en hablar —: ¿Quieres algo de beber, Jeonghan? ¿Té, café o agua?
— Sólo necesito una respuesta.
— La respuesta a tu pregunta es sí. No dijo directamente que mataste a todas esas personas, pero sugirió que podrías tener algo que ver con eso. —Jisoo no tenía ninguna expresión en su rostro.
Ellos pensaban que estaba desquiciado.
No me gustaba esa sensación.
— ¿Realmente crees que maté a Mad-Dave, al enfermero Karl y a mi mejor amigo? —Jisoo no respondió esta vez, fue Mingyu quien lo hizo.
— Tu hermana tiene motivos para creer que puedes haberlo hecho sin saberlo.
Todo esto me desconcertó, y mi ira iba a disparar a través del techo.
— Agente Kim, ¿podrías... detenerte?
— ¿Mejor ir al grano? Muy bien, Miya nos dijo que estabas experimentando algunos dolores de cabeza y desmayos, y luego de algunas investigaciones de nuestra parte... —Hizo una pausa y miró a Jisoo —. El personal de ForestVille confirmó que de hecho era cierto que te encontraron en las salas vacías dormido por consumir una gran cantidad de pastillas para dormir.
— Eso sucedió solo una vez cuando accidentalmente me tragué la medicación de Joshua. —dije.
— ¿Y recuerda cómo sucedió? ¿Cómo o porqué tragó el medicamento recetado a su paciente?
— Por lo que recuerdo, Joshua no era cooperativo. Tenía la impresión de que iba a obligarlo a tragar las patillas como todos los demás enfermeros antes que yo, pero no lo era.
— Tu hermana también nos mostró el diario que escribiste, toda la investigación sobre el criminal. —dijo Mingyu.
Jisoo solo siguió mirándome como si fuera un rompecabezas que necesitaba resolver. Tenía las piernas estiradas delante de él, su postura relajada.
— Hice esas investigaciones como un medio para ayudarme a comprender la salud mental de mis pacientes. De hecho, la Dra. Sieun lo alentó. No fue nada más que un estudio sobre algo que me apasiona.
