Un Omega Diferente || Wattys 2021 ||

2.1

Admisión [4800 palabras]

—Hermana, sabes que esa historia carece de argumentos científicos, ¿cierto? Probablemente desde hace mucho antes que ya estaban naciendo los betas—. Dijo siendo un total aguafiestas.

El moreno quiso regañarlo, pero todas sus réplicas quedaron en el olvido al ver al más alto, ¿era su idea o el albino se veía distinto? Se mordió el labio al no saber qué era lo que exactamente tenía el ojiazul.

—¡Hermano no seas aguafiestas!— Infló sus mejillas mientras se cruzaba de brazos.

—Hazte un lado Gon—. Y sin esperar a que el moreno se moviera se tiró junto a él. Arqueó una ceja al notar cómo el moreno no se había  movido ni un centímetro. De forma descuidada, apoyó una mano cerca de la espalda del más bajo, riéndose mentalmente como este parecía estremecerse.  –¿Estás bien Gon?— Preguntó en un tono bajo.

—Oh, ¿por qué lo preguntas?— El moreno parecía genuinamente confundido.

"Es por la luna", se dice a si mismo mentalmente. Debe dejar de ver cosas donde no las hay. Pensaba Killua. Por otro lado, el moreno mentalmente se regañaba y se obligaba a mantener la calma. Un silencio incómodo cubrió a los jóvenes. Por suerte estaba ahí la morena para hacer las cosas más fáciles.

—Hermano, ¿por qué no le cuentas la historia de cómo nacieron los Alfas?, estoy segura que Gon no la ha escuchado. Gon negó de forma energética, agradecido de que la morena le de algo para distraerse de la mano que cada vez estaba más cerca de su cadera. Aunque igualmente se podría interpretar como un acto amistoso.

—Esa historia tonta...—. Dice con desgano, sacando la mano y moviéndose de lugar.

—Vamos, Alluka me contó la historia de los Beta, es lo justo que tu nos cuentes la de los alfa.

—Lo que acabas de decir ni siquiera tiene sentido—. Deseaba seguir replicando pero el ver la cara de cachorro de ambos lo dejo sin argumentos. —Bien, pero no quiero que ninguno de los 2 me interrumpa—. Miró de forma seria a ambos.

Entre risas se acomodan mejor para ver al más alto.

Killua se aclara la garganta antes de empezar a contar su relato. Mira de reojo al moreno y ve como este le regala una sonrisa cálida. "Terminemos rápido con esto para que pueda dormir", piensa para sí mismo.

—Se dice que hace mucho tiempo, la Luna estaba perdidamente enamorada de la Tierra. Era tal su amor que siempre se paseaba alrededor de ella, esperando que algún día le correspondiera. Lamentablemente, la Tierra, al igual que el resto de los planetas, solo tenían ojos para el Sol y orbitaban a su alrededor. A la Luna no le importó esto. Era tal su amor, que si no podía ser su amante sería su confidente—. Gon miraba sorprendido y Alluka observaba divertida las reacciones de el chico.

—Siempre atenta a su amada, notó como esta se deprimía cada cierto tiempo. Preocupado, le preguntó a qué se debía y esta le respondió: "estoy triste porque el Sol no me ve. Soy árida, pequeña y sin gracia", dijo, llena de tristeza. "Para mi eres perfecta" le quiso responder. Más se guardó su respuesta y pensó cómo podría ayudarla. Finalmente, tuvo una idea. Y usando su ingenio, creó un hermoso vestido azul para la Tierra—. Gon sonrió. Alluka también. Killua vio como ambos lo miraron y continuó.

—El Sol al fin la miraba; se sentía radiante. Pronto dejó de ser árida y su belleza se multiplicó. El resto de los planetas, molestos y celosos, se alejaron de la Tierra dejando de orbitar junto a ella. Pero no le importó, tenía la atención del Sol y eso era suficiente. Pero el Sol era un joven caprichoso, y pronto su interés se esfumó. Había visto mucho tiempo ese vestido, y Saturno tenía un nuevo anillo a su alrededor. Ahora la Tierra estaba sola, no tenía planetas con quien orbitar y el Sol ya no la miraba. El no tener a sus amigas cerca le ayudó a comprender que en verdad nunca estuvo cerca del Sol y lloró al darse cuenta de lo tonta que fue. "No llores yo siempre estaré contigo", y armándose de valor agregó: "Para mi, eres lo más importante"—. El albino fingió la voz de la Luna. Con mejillas sonrojadas, ya que nunca se había mostrado de esa forma con una persona que no sea su hermana.