5.4

231 19 4
                                    

Desolación [3000 palabras]

Con desesperación, Killua intentó auxiliar a Kite como pudo, ayudándolo a que apoye su espalda en la pared. El más alto gemía de dolor.

—Está bien, Killua...

Era claro que no, Killua se daba cuenta, no era tonto. La herida necesitaba ser tratada, de no ser así, podía contraer una infección. De inmediato, la chica que Franklin había utilizado como rehén, pudo reaccionar, buscando primeros auxilios en su departamento, colocando alcohol en la abierta herida.

Killua no tenía ni idea de medicina.

—¿Estará bien?— Preguntó, con temor. La chica parecía experimentada en ese ámbito.

—Tiene una costilla rota, o al menos eso parece. Sale demasiada sangre, puede ser que el corte haya rozado alguna arteria mesentérica. Pedí al chico que vive en el departamento de al lado que llame a la ambulancia, así que ni tardarán en venir.

Killua suspiró. Había sido una situación tan rápida como traumante, sorpresiva. —Es un alivio—. Siguió inquieto, mirando la puerta. La chica notó eso.

—Se que no tienes porqué confiar en mí, pero te aseguro que el estará bien, les debo la vida. Si tienes algo que hacer, puedes ir—. Le confirmó. Kite lo miró, y asintió, dando a entender que estaba de acuerdo.

—Hay una cosa que tengo que hacer, gracias. Confío en ustedes—. Lo dijo como una advertencia, retirándose del lugar intentando buscar algún rastro que lo guíe hacia algún lugar.

Corrió en las desoladas calles, se oía la policía de fondo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Corrió en las desoladas calles, se oía la policía de fondo.

Intentó perseguir el aroma que tenían los Alfas de la Araña, en ese mismo momento deseó tener a Gon a su lado; él podría haberlos encontrado mediante su aroma. Aún así, se podía llegar a distinguir una muy ligera esencia de Alfa, que lo guiaba hacia calles aún más desoladas.

—"Quizás Gon y yo estemos destinados a estar separados. Mierda, siempre sucede algo que nos aleja"—. Pensó pesimista, negando con la cabeza. No debía desviarse de su razón principal en ese momento: salvar a Gon.

Podía activar Kanmuru, pero no lo hizo. Prefirió ahorrar la energía para más adelante, presentía que la iba a necesitar.

Su lobo interior estaba molesto, quería ser protagonista y él no iba a dejar eso. Por eso mismo, pidió a su interior que le ceda el 100% del control, ya que los dos querían lo mismo. La respuesta fue un rotundo sí, sin embargo, no fue gratis, el lobo le pidió una condición; la condición era...

A lo lejos observó dos cuerpos en movimiento, era más rápido por naturaleza que ambos. No podía contener su ira, que iba creciendo poco. Además, ahora su lobo interior no contenía sus emociones para que pueda reunir información sobre Gon. Ahora mismo quería una sola cosa: venganza.

Un Omega Diferente || Wattys 2021 ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora