Capítulo 08

159 11 1
                                    

NARRADOR OMNISCIENTE

La familia Alekseeva yacían esperando en el vestíbulo vestidos con elegantes y costosos trajes blancos y joyería de oro blanco y rubíes preciosos entre las manos.

Poseían diamantes y perlas blancas como pulseras, relojes y collares.

Adecuados mientras alardeaban de su belleza, astucia, dominio y coraje.

Esperaban de todo, a miles detrás suyo, todos dispuestos a dar su sangre, su legado y su lealtad incondicional con tal de resplandecer al lado de los hijos y herederos Alekseeva y Martinelli.

Y Ara Alekseeva brillaba como la mujer de ellos.

Como su reina y su posesión más valiosa entre tantas joyas y coronas.

La chica de ojos turquesa se tornaba orgullosa mientras lucía un exquisito vestido color gris apretado y amoldado al cuerpo, con ondas en el cabello largo azabache y piel completamente clara y resplandeciente mientras sonreía y observaba a los de su linaje.

Como el primo de Ara había previsto, al lado del territorio de los Alekseeva, junto a su nueva mansión, ya se alzaba dos palacios más, listos para ser habitadas por la familia principal de la dinastía, Ara y Nikolái Alekseeva de Martinelli y en la otra, Cartel y Giovanna de Alekseeva.

Con ellos, seguidos de sus siguientes votos de matrimonio, Darya y Maurelio Alekseeva Martinelli irían a su respectiva mansión, junto a una al lado de reciente imperio del nacido justo, Hades Alekseeva y su futura esposa, Jen Sokolova.

La familia vendía y gozaba de sus increíbles dominios y poderío entre las principales potencias mundiales en el exterior e interior de la Mafia y crimen organizado.

Los Alekseeva y los Martinelli ya eran una total sensación.

A lo lejos de sus impetrantes muros, el joven Alec se alejaba y llevaba a los bebés Alekseeva a un lugar seguro, sin notar que detrás de él, un joven castaño de ojos verdes lo seguía bastante atraído por encontrar la verdad.

Ilías Ray ya tenía sospechas de quienes eran los bebés que Alec cuidaba y protegía tan sobreprotectoramente.

No tardó en investigar y sacar cuentas de quien era Alec y de donde había venido.

Solo debía esperar para ganarse su confianza. 

La vida de Alec pronto comenzaría a peligrar con ello.

Al igual que su origen...

Y al mismo tiempo, Marcos Yakovlev comenzaba a jugar sus cartas.

Manipulaba y hacía tratos ilegales y amenazantes con tal de ganar un voto entre los capos más importantes de la Mafia.

En la pirámide donde se reunirían cientos y miles de los jefes y organizaciones más sangrientas y sádicas del continente, dispuestas a dar un voto a favor de una sola dinastía.

Todo ahí se decidiría.

Quien viviría para reinar entre varios imperios de fuego, miedo y cenizas, y quien perdería para vivir entre desgracias y eternas agonías.

La fecha ya estaba fijada.

Los rusos, norteamericanos, asiáticos e ingleses ya estaban escogiendo bandos.

Y las proclamadas bodas de los Alekseeva y los Martinelli, ya estaban en su punto más alto de atención y prosperidad para su dinastía.

Su familia estaba en la cumbre del poder.

Estaban justo donde querían. En lo más alto del dominio y vigor por sangre y autoridad.

Solo les faltaba una pieza y por fin todo encajaría.

MI DIAMANTE DESEADO ♤ LIBRO 3 ♤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora