—Buenos días, bonito. –le dije dándole una pequeña nalgada.
Pablo soltó un quejido y enterró más su rostro en mi cuello, acomodándose para seguir durmiendo. Solté una pequeña risa.
—Nene, tenemos que levantarnos ya. Hay entreno.
Pablo volvió a quejarse y se movió pegándose más a mi. Llevé mis manos a sus costillas y empecé a hacer rápidos y traviesos movimientos con mis dedos haciéndole cosquillas. Pablo se empezó a mover intentando apartar mis manos y la habitación pronto se llenó de su melodiosa risa.
Cuando vi que ya estaba bien despierto, paré, rodeando cuerpo con mis brazos. El contacto con su piel era suave. Pablo me miró con una sonrisa y soltó un suspiro. Sus manos acariciaban mi pelo.
—Buenos días, guapetón. –me dijo dejando un corto beso en mis labios. Luego volvió a quedárseme mirando.
Yo sonreí y le cogí la cara pillándolo desprevenido. Empecé a atacarlo a besos haciendo que riese de nuevo.
—Tu barba me hace cosquillas. –dijo aun entre risas mientras besaba su cuello.
Me separé y toqué mi mentón. Era verdad, había crecido bastante y raspaba. Llevaba días sin afeitarme.
—Me toca afeitarme. –respondí levantándome de la cama totalmente desnudo. Vi como Pablo se mordía el labio y me seguía con la mirada.
—No. –se quejó alargando la "o" y haciendo un puchero. Se levantó siguiéndome al baño. —No te afeites, que me gusta tu barbita.
Yo ya estaba lavándome la cara. Pablo se puso a mi lado mientras me secaba el rostro.
—Lo siento, pero se va. –le dije.
—Jope. –se volvió a quejar. Se sentó encima de la encimera del baño y me atrajo con sus piernas rodeando mi trasero. Empezó a besarme la mandíbula. —Es que te queda muy bien, es muy sexy.
Solté una pequeña risa. —Se lo que estás haciendo señorito, y no te va a funcionar. Parezco un señor mayor con esta barba.
Me separé de su agarre y fui al armario a buscar la espuma y la cuchilla. Pablo me miró divertido. Me coloqué en frente del espejo y mi novio se puso delante impidiéndome ver.
—¡Pablo! –me quejé.
—Bueno, vale. –se rindió al final. —Pero déjame afeitarte.
—Ni de coña.
—¡Porfa!
—¡Si bueno, tu 'tas loco! ¡Que me rajas la cara!
—¡Pepi, porfi! –volvió a insistir. Me hizo un puchero super exagerado pero era imposible no morirse de ternura con el.
Lo miré no muy seguro pero sabía que si no se iba a poner muy pesado y al final terminaría convenciéndome, así que le di la espuma y la cuchilla. Una gran sonrisa victoriosa se dibujó en su cara.
—¿Te he dicho ya que te quiero? –me dijo haciendo que me riese.
Volvió a sentarse en la encimera, al lado del lavabo y me coloqué entre sus piernas.
Pablo se mojó las manos y luego me humedeció la barba. Puso espuma en su mano y la esparció para después ponerla en mi cara.—Pareces Santa Claus. –dijo con una sonrisa divertida al terminar de esparcir la espuma sobre mi barba. Se lo estaba pasando muy bien.
Yo sonreí también y saqué los morros. —Dame un besito.
Pablo iba a darme un pico pero justo cuando nuestros labios iban a tocarse, moví mi cabeza para mancharlo de espuma. Pablo me miró con la aboca abierta pero reaccionó rápido y agarró la lata de espuma. Intenté pararlo al ver sus intenciones pero fue imposible porque cuando quise darme cuenta ya estaba poniendo espuma por toda mi cara haciendo que cerrase los ojos.
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A Sky Full of Stars ; Pedri & Gavi
FanfictionA raíz de un viaje, Pedri y Gavi se dan cuenta de que sienten algo más que amistad por el otro. Las dos jóvenes promesas del Fútbol Club Barcelona descubrirán lo que es el amor y el deseo, encontrándose algún que otro bache en su camino porque por m...