GENESIS || MAZE RUNNER [ THOMAS ]

24

Los tres detuvieron sus pasos. Un joven se giró hacia ellos: — ¿Vienen a la fiesta? —miró de arriba hacia abajo a Venus, Thomas se dio cuenta de ello así que se acercó hacia ella, para hacerle saber sin hablar al joven que no se les acercara, y mucho menos a ella.

— Venimos a ver a Marcus —le respondió de vuelta Brenda, el joven ladeó su cabeza—, necesitamos hablar con él, estamos buscando a nuestros amigos.

— Oh Marcus se fue hace tiempo, yo le compré la propiedad así que ahora es mía —el joven se giró para ver a las personas que estaban detrás de ellos para luego volverse a ellos.

— ¿No vió pasar a un rubio o a una chica con cabello algo largo y negro? —cuestionó Thomas, mirando al joven el cual todavía no les había dicho su nombre y tal vez nunca se los diría.

— Niño, mucha gente entra a este lugar, dime, ¿cuántas personas pueden ser rubias o peli negras? —sonrió de forma divertida sin despegarle la mirada—, la única opción que tienen es entrar allí y buscar por su cuenta, yo no les haré el trabajo, lo toman o lo dejan, es lo mejor que pueden hacer si quieren encontrarlos —señaló hacia la puerta hecha de cortinas nada más, adentro había una fiesta.

Una chica rubia se acercó por detrás de ellos y comenzó a tocar de manera suave la espalda y los hombros de Thomas. El chico solo se mantuvo quieto y miró de reojo, solo por precaución.

— Por qué no entran, ¿huh? —le murmuró la de pelo rubio acariciando su hombro—, solo tienen que tomar lo que les den para poder entrar, no es para nada difícil cariño —Venus la miró y puso los ojos en blanco, ¿acaso se sintió celosa porque una rubia estaba coqueteando con Thomas?

El joven sostenía un recipiente de cristal con una bebida dentro de color verde. Enseñándoselos a los tres ya que tenían la opción de tomárselo y entrar al lugar para buscar a sus amigos, era la única forma de entrar y de poder salir.

Thomas y Brenda no hacía nada, mientras que Venus se adelantó, agarró el recipiente de cristal con la bebida verde y le tomó un buen sorbo para después de volvérselo.

— Oh... carajo... —esbozó una mueca de asco, lo que había tomado ardía demasiado y miró a Brenda—, solo háganlo —fue lo único que les dijo y limpió por la comisura de sus labios las pocas gotas que le había dejado la bebida.

Brenda exhaló y miró a Thomas, quien también la miraba para después desviar su vista hacia Venus.

— Por qué lo hiciste —le murmuró.

— Solo tómalo y ya, ¿o no quieres encontrarlos?

— ¡Exacto! —la señaló el joven—, tu niña, ven para acá —Venus se acercó a él y pasó por sus hombros su brazo—, bienvenida a la fiesta, que te diviertas buscándolos —Venus no le miró sino nada más a Brenda y a Thomas, para que después el joven que le entregó la bebida la empujó dentro a la fiesta—, tu niño, ve a buscar a tu amante antes de que la pierdas.

Thomas le miró furioso, ni siquiera se percató de que la había llamado "su amante" a Venus. Le arrebató la bebida verde y le dio un gran trago, igual Brenda imitó los movimientos del pelo negro y los dos esbozaron una mueca, la bebida sabía horrible.

— Perfecto, ahora, ¡disfruten de la fiesta! —se acercaron y el joven los empujó exactamente como había empujado a Venus dentro.

Caminaron a paso lento, había demasiada gente dentro, bailaban y se meneaban de un lado hacia otro. ¿Qué era aquello? ¿Una fiesta cuando afuera se están muriendo por un maldito virus? Thomas dejó de enfocarse en esos pensamientos cuando la imagen de Venus se atravesó en sus pensamientos, tenía que encontrarla, necesitaba cuidarla y llevarla sana y salva a con Newt.