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Tenia sueño, Sam me abrazaba por detrás haciéndome sentir cómoda, sentí que me dormí un tiempo mientras mirábamos la película.
Pero me desperté al sentir como rivers besaba mi cuello lentamente, me causaba una sensación de placer inmenso, solté bajo un par de jadeos, lo que al parecer Sam tomaba como mi aprobación para que siguiera.
Sus manos masajeaban mi vientre por encima de su hoodie -me encanta como se te ve pero - hablo en mi oído pero paro para besar otra vez mi cuello ahora haciendo un movimiento ruidoso con su boca que provocó un leve gemido en mi - siento que estorba - paro para subir la prenda lentamente, para luego lanzarla a otro lado
- Sam - hablé bajo, ella apesar de eso me escuchaba claramente y disfrutaba el hacerme sentir así
Sentí un frio agradable en mis caderas subiendo poco a poco, las manos de Sam se movían perfectamente dentro de camisa, pero se detuvieron cerca de mis pechos.
- se que puedo pero te lo preguntaré, ¿ Puedo amor ? - su voz causaba un escalofrío en mi, recalcó la parte de amor sabiendo que apesar de todo Juan era el único que devia llamarme así.
- eres una orgullosa, hazlo ya y deja de recalcar tu ego, " amor" - ella solto una risa leve y continúo besando mi cuello para ahora sí subir sus manos masajeando mis pechos arriba del sostén, yo solo jadeaba al sentir cada movimiento.
Su cuerpo se aferro a mi acomodando sus caderas más cerca de mi trasero.
Sentí en diferentes ocasiones como enterraba levemente sus dientes en mi piel desnuda, comenzó a desabrochar mi camisa apresurada por continuar.
Al ver su agilidad supuse que no era la primera vez que ella hacía algo así, pero la mía si, Juan es muy tímido aunque no lo parezca y siente que me faltaría al respeto si hace algo parecido, nunca me lo insinuó ni yo tampoco pero si hablamos de esto y quedamos de acuerdo que hasta que ambos no estuviéramos preparados lo haríamos.
Siendo sincera no me imaginé que mi primera vez fuera como lo que estaba sucediendo en ese momento, siempre pensé que sería algo romántico y cliché como en las películas de amor que siempre veo.
Nunca tuve fantacias con esto pero si pensaba que sería romántico y especial.
- Ari - ella volvió a llamar mi atención solo para notar que mi camisa ya no estaba, mi sostén era lo único que impedía que Sam me viera casi desnuda.
- ¿ Si ? - pregunté al ver que paro y solo me abrazo fuerte recargando su cabeza en mi cuello
- te amo - gire mi cuerpo quedando a horcadas de ella, la mire fijamente a los ojos y luego me escondí en su cuello - no pienso hacer nada - suspiro y me tomo de la cintura para pegarme más a ella - aún no los haz echo con nadie - fue más una afirmación.
Separé mi rostro y la mire confusa - ¿tu si?- ella sonrió y guardo silencio un rato, yo estaba apunto de separarme de nuestra posición, sabía que ella ya lo había vivido más de una vez pero saberlo directamente me hería de alguna forma.
- no - ella me impidió romper su agarre, - nunca lo eh echo, aunque parezca, siempre quise que mi primera vez sea con la persona correcta y con la que pasaré toda mi vida, quiero que sea algo especial que nunca podamos olvidar esa persona y yo, se que suena cliché o absurdo - me miró apenada por sus confesiones, tome sus mejillas acortando la distancia en un beso suave que al poco tiempo Sam correspondió, ella se separó confundida
- no es absurdo, yo también pienso y quiero lo mismo que tú - sus ojos brillaron más por un instante y me abrazo emocionada
- no me estoy equivocado al enamorarme de ti - dijo rápido aún abrazada de mi.
Yo guarde silencio, ella se separó de inmediato noto lo que había dicho - no es que diga que lo haga, si no que si yo lo estuviera haciendo no me estaría equivocado, sabes - se sonrojo demasiado y trato de enmendar sus palabras
- no sabía que te estas enamorado de mi - rei al ver cómo jugaba con su cabello avergonzada, tome sus manos y las acerque a mi cara - es lindo saber eso - ella sonrió y levemente apretó mis cachetes.
- siempre me gustaron tus cachetitos- río tierna jugando con mi cara
- a mi no - hice un puchero, ella volvió a reír y me dió unos cuantos besos cortos
- son hermosos no entiendo por qué no te gustan - sonrió amplio bajando sus manos hacia mi cintura, ahora yo subí mis manos a su rostro y acaricie sus mejillas, ella mantuvo su sonrisa
- a mi me gustan tus hoyuelos - ella cerró sus ojos disfrutando de mis caricias.
Después de un rato me puso de nuevo su hoodie y apago la televisión, ambas nos recostamos en su cama, note algo divertido en ella, un pequeño peluche de pollito la adornaba.
- que lindo - lo tome en mis brazos y lo oli, su aroma estaba impregnado en el, lo cual era bastante agradable
- me lo compre hace tiempo cuando vivía con mi padre - susurro y me abrazo.
- me gusta, huele a ti - cerré los ojos y seguí inhalando aquel tan delicioso aroma con toques de lavanda y una loción que amo, que solo la eh olido en rivers y a nadie le quedaría mejor que a ella.
- quedate lo - me beso la frente cerrando los ojos
- eventualmente diría que no pero encerio quiero dormir con el todo el tiempo y abrazarlo como si fueras tu - ella río y acaricio mi cabeza
Hubo un silencio cómodo hasta que Sam volvió a hablar - bueno ahora me tienes aquí, abrazame a mi - reprochó haciendo un puchero muy tierno, yo aparte el peluche y me acerque a ella abrazándola colocando mi cabeza en su pecho.
Sus latidos acelerados eran una bella melodía y me emocionaba tanto al escuchar que yo provocaba eso en ella.
Suspiré cómoda y me dispuse a dormir - buenas noches amor - dijo ella antes de que cerrará sus ojos
- buenas noches - me acomode acercándome un poco más a ella - amor - termine mi frase y escuché como sus latidos que ya se calmaban comenzaron a tamborear de nuevo, solo rei y ella no comprendió ni intento preguntar pues se sentía nerviosa, yo también, quien no al escuchar a ella llamarte de tal manera y que no fuera una broma o un simple juego entre las dos.
Pronto sus latidos se calmaron y escuché su respiración que indicaba que dormía cómodamente.
Yo sonreí boba mirando hacia arriba, ella tenía una cara tan tierna que no había podido observar bien hace un rato en la sala de estar cuando ella dormía.
No pelié más con el sueño y caí dormida con la imagen de Sam dormir abrazada a mi.
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