Era hora de salida, estaba esperando a Sam para ir a las audiciones pero no llegaba, note que nuvia se impacientadaba cada vez más.
– ari, ya tardo demasiado, vamos a los dormitorios – hablo nuvia ya fastidiada.
– espera, no tarda en llegar – y como si fuera arte de magia vi a lo lejos a Sam corre hacia nosotras.
– hola amor, hola nuvia – nos saludo a ambas vastante cansada – amor, las veo a la hora que te dije en la cancha, tengo que ir a cambiarme y comprar algunas cosas – hablo apenada, nuvia disimulaba su enojo bastante bien.
– esta bien – ella sonrió y beso mi mejilla para correr de nuevo en otra dirección.
– me va decir usted que espere aquí tanto tiempo para que tu enamorada se fuera, además ¿por que te dice amor? Te vas a meter en problemas por eso – la mire triste mientras me regañaba – quita esa cara íbamos a hacer eso a los dormitorios para tenerlo listo antes que vallamos a la cancha – ella comenzó a caminar y solamente la seguí en silencio.
– perdón – fue lo único que se me ocurrió decir ante todo lo que mi amiga me reclamo
– mira, me da igual lo que me hagas hacer por amor, las dos estamos estúpidas por eso haremos cosas ridículas y las dos nos apoyaremos, pero te estas metiendo en problemas abi – seguía en silencio poniendo atención a sus palabras mientras caminábamos, entramos a los dormitorios y fuimos a nuestra habitación, al entrar nos quedamos en silencio un buen tiempo lo que fue incómodo, sabia que ella me diría algo y yo no lo tomaría en cuenta por que mi mente rechaza todos los problemas que surgen al tener este estilo de vida que tengo – entonces, hay que empezar con eso –
– bueno – comencé a sacar todos los materiales que necesitábamos para hacer la sorpresa que tenia planeada, agradecía con todo mi ser a nuvia pues en todo este tiempo a estado soportando lo que hacía por rivers.
– entonces ari – hablo mientras seguía dibujando en el cartel, yo la mire confusa ante sus palabras, pensé que ya no diría nada, era una buena amiga y se preocupaba por mi pero a veces no sabia como hablar sobre esas cosas– ¿ te gusta juan ? – respire profundo al oír esa pregunta, era confuso y no podría responder con certeza, no quería anticipar nada sin antes averiguar y aclarar mis sentimientos.
– si – dije en bajo soltando el aire que retuve mientras pensaba en una respuesta que no definiera nada pero no encontré ninguna y solo me limite a confirmar lo que tal vez debería ser obvio.
– ¿ y rivers ? – me detuve, era algo confuso también, ¿ ella me gustaba ? ¿ era algo más que atracción? ¿ solo es un capricho y después se pasará? Tantas dudas me perseguían desde el día que bese a Sam y sentí ese revoltijo de sentimientos, cosa que jamás había sentido nunca tal vez por eso era tan difícil saber, por que era algo nuevo para mi – ey, estas bien – nuvia sacudió mi brazo llamando de nuevo mi atención, por un momento me perdí en ese mar de dudas que cada día me ahogaba más con cada momento que ella me preguntaba sobre lo nuestro.
– es complicado, no lo se – ella suspiro ante mi respuesta, que esperaba que le dijera, nada cambiaba la situación en la que me había metido.
– estas jugando con fuego abril, tarde o temprano te vas a quemar y será tan doloroso, más por que en verdad quieres a samantha – la mire sin ninguna emoción en mi, como ella suponía eso sin ni siquiera saber yo misma si eso era verdad – eh visto como la miras, lo que sientes es más que obvio, si juan no lo a notado es por que es un idiota y esta loco por ti – aclaro la garganta al escuchar eso último, no quería hacerle daño, a ninguno de los dos, pero creo que a uno de ellos ya lo estoy haciendo.
Paso el tiempo y ninguna de las dos hablo más del tema, lamentablemente ella me hacía pensar cosas que no quería pensar, sabia que debía tomar un decisión pero no hacer lo correcto me aterraba, saber que en ambos escenarios tendría que hacer sufrir a alguien.