El concierto que cambió mi vida [Harry Styles y tú]

41- Llaves que te cambian la vida

El cóctel finalizó y nos distribuimos en varios coches para seguir la fiesta en otro lugar. Harry se las había ingeniado para que ambos fuéramos en un coche solos. Me sentía tan bien que era imposible negarse a cualquiera de sus peticiones.

"Verla tan feliz me estaba dando la vida. Le pedí que por favor se tapara los ojos con el pañuelo que le dí. Necesitaba que la sorpresa fuera increíble y ella, como siempre, me complació con una enorme sonrisa en la cara. Sabía que estaba nerviosa por como le temblaban las manos y las piernas pero me encantaba que después todos verían la preciosa sonrisa que se dibujaría en sus labios. Llegamos donde nos esperaban todos y la cogí de la mano para guiarla hasta allí.

Todos se escondían e intentaban no hacer ningún ruído para que fuera totalmente sorpresa. Me puse tras ella y, poco a poco, le quité el pañuelo."

- Amor ¿qué es esto? -dije completamente perdida

De pronto, todos nuestros amigos salieron de su escondite gritando "Sorpresaa!" y casi me caigo del susto. Estaban todos, incluso mis amigas más cercanas habían viajado hasta allí para estar conmigo. No me lo podía creer. En cuanto ví a Harry mientras saludaba uno a uno a los asistentes supe que había sido todo idea suya y que, seguramente, aún me esperaban muchas sorpresas por delante.

Verlo sonreír como hacía, mirándome como me miraba, me hacía sentir la mujer más afortunada del planeta. Tenerlo en mi vida era lo mejor que me había pasado nunca. Y en cuanto pude me escapé a sus brazos.

- Muchísimas gracias por todo lo que has hecho por mí hoy, Harry. Eres increíble

- Esto no es ni una cuarta parte de lo que te mereces que hagan por ti, mi vida.

- Para mí es suficiente sabiendo que te tengo en mi vida

- Te quiero mucho

- Yo también te quiero tonto

La noche fue increíble y al llegar a casa casi me da un patatús. Ni sé cuando Harry pudo haber hecho eso o quién lo habría ayudado pero la casa estaba completamente llena de globos en forma de corazón y un camino de pétalos de rosa roja y blanca se dejaba ver a lo largo de la escalera. Lo miré incrédula y él se escapó corriendo hacia arriba.

Empecé a seguir el camino, disfrutando del olor de las rosas, observando que cada uno de los globos tenía una foto enganchada. Aluciné al ver fotografías mías que ni yo misma sabía que existían. Harry se había dedicado a fotografiarme mientras dormía, mientras miraba la televisión, haciendo mil cosas sin que yo me diera cuenta. Y me parecía la cosa más bonita que jamás hubieran hecho por mí.

En cuanto abrí la puerta de la habitación, ví en la cama un enorme corazón de pétalos de rosa que guardaban en su interior un ramo de flores y Harry de pie junto a la cama con una sonrisa nerviosa. Me acerqué a él y le dí un beso dándole las gracias. Con nerviosismo sacó un paquete de su espalda.

- Feliz cumpleaños mi vida

Abrí el paquete y no entendía nada. Eran dos llaves de plata con nuestras iniciales grabadas y el día en que nos conocimos.

"Ví la confusión en su rostro y me pareció el ser más adorable del planeta.

- No sabía de qué manera decirte esto ni de qué manera explicarte lo importante que eres para mí"

Aún sin entender nada, cogió la llave más pequeña de las dos que sostenía en mi mano y se agachó para sacar algo de debajo de su cama. Era una caja y al abrirla ví un montón de papeles repletos de letras. Os prometo que jamás pensé que lo que sacaría de ahí sería aquello.