· ─ ❨ 𝗽𝗲𝗮𝗰𝗲 ❩
nunca creí poder conocer
algo tan bello como él
Luego de aquel evento tan horrible en el que Ōishi Yasu fuera la burla de toda la secundaria y primer año de su preparatoria, decide irse a otra lo más lejana d...
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Ōishi Yasu estaba siendo muy feliz con su novio, Hinata Shōyō. Para ella era aún mejor (si es que era posible) que el año que fueron novios. Tal vez se debía a que eran mayores, más maduros y conscientes de lo que querían para sus vidas, por lo que sin falta los días que estuvieron juntos fueron los mejores.
Los días posteriores a la entrada de Hinata en el equipo y cuando Yasu ya debía volver a Tokio para ir a sus clases extras en vacaciones (aunque no se lo había dicho a nadie), él se estuvo quedando en su casa mientras buscaba un lugar donde quedarse en Osaka. Por suerte la distancia no era tanta, ya que bastaban dos horas en tren bala y por el momento aunque fue muy cansado para él, no negaría que estaba disfrutando dormir con su novia.
Pero ya no era tan buena idea porque levantarse muy temprano y llegar muy tarde para Shōyō no era una vida tranquila, por lo que, cuando encontró un apartamento barato en renta cerca del gimnasio, no dudó en irse a vivir para allá. Yasu fue la encargada de apoyarlo en el proceso, yendo a Miyagi por las cosas indispensables que Shōyō quería tener en su nuevo hogar, y regresando hasta Osaka para dejarlas. El apartamento era pequeño pero funcional para una persona, por lo que Yasu fue la encargada de ayudarlo en todo; aunque no negaría que Hana fue quien le dio ideas porque era su especialidad.
—¡Yasu, olvidé decirte! —avisó Shōyō cuando dejaron de acomodar lo básico. Ella dejó de guardar las cosas en la pequeña nevera y lo miró—. Hoy iremos a cenar con el equipo al restaurante de Osamu, el gemelo de Atsumu.
—¡Es genial! Bueno, supongo que podré hacer unas vueltas…
—Pero tú estás invitada —la interrumpió, como si aquello fuera demasiado obvio. Yasu sintió sus mejillas sonrojarse, sintiéndose avergonzada.
—Oh…
—Les dije y a ellos les pareció buena idea, les caíste bien. Bokuto dijo que quería oírte cantar así que luego querían ir a un karaoke…
