Jugando a Seducirte

Un Nuevo Comienzo

Pov Alison

Sonrei al ver las flores en mi puerta, cada semana llegaba un ramo diferentes.

Habia pasado un mes desde que Patrick y yo decidimos intentarlo otra vez. Había sido una desicion más fácil de lo que había imaginado.

Habia mucho pasado, pero lo amaba. Amaba como me hacía sentir, amaba que aunque a veces me sentía aterrada del amor y de mis sentimientos aun así elegía seguir sintiendolos.

Tomé las flores y respire en ellas.

Estábamos empezando de nuevo, sin mentiras, ni secretos.

Puse las flores en un jarrón lleno de agua. Termine de arreglarme y salí de casa.

Hoy iría a casa de mis padres.

Salí del departamento y conduje sin prisa.

-Hola hija- saludo mi padre al abrir la puerta.

-Hola papa- lo abrace y lo sentí algo tenso.

-¿Que pasa yo...? -Me quede en silencio un momento cuando vi quien estaba al lado de mi madre.

-Hola.

-Hola- respondí.

-Tu padre y yo estaremos en el jardín -señaló mi madre.

Brittany me miró mientras tenía su actitud relajada, estaba igual a la última vez que nos habíamos visto, solo que ahora todo era muy diferente.

Cuando salí corriendo ese día del juicio no sabía donde ir, me sentía perdida y volví a la ciudad donde me di cuenta, donde llore porque supe que me gustaba, que estaba empezando a quererlo.

Me aloje en un hotel y llore, llore tanto que sentía que me quedaría sin lágrimas. Unas semanas después me encontré con Brittany en la puerta esperándome.

Verla solo me trajo esos recuerdos.

Meses atrás

-¿Que demonios haces aquí? Seguro quieres regodiarte un poco más -casi grite molesta.

Tenía unas dos semanas tomando del minibar y comiendo comida chatarra del servio a la habitación. El cabello lo tenía revuelto, y sin una gota de maquillaje haciendo que mis ojeras estuvieran pronunciadas en contrastre con mis ojos hinchados. Era un desastre en todos los aspectos.

Rota, perdida, un completo desastre.

-Necesitamos hablar- anuncio entrando en la habitación.

-No tengo nada que hablar contigo -replique- ¡lárgate! - pedí subiendo la voz.

-No -respondió cruzando los brazos.

-¿Que quieres?

-Hablar, porque estas aquí sintiendote miserable y te ves horrible- comentó mirándome de arriba a abajo.

-Genial. Porque lo que faltaba en mi vida era tener esta conversación, en este momento. Porque mejor no...

Mis palabras muriendo cuando ella le dio un golpe seco a la mesa qué tenía cerca.

-¡Me vas a escuchar! - ordenó -se que siempre eres la que tiene la autoridad pero en este momento necesito que escuches lo que tengo que decir, porque por más que pienses que todo esto lo hice por odiarte, no fue así- expuso con firmeza.

-Siempre me he mantenido alejada de todos porque tienes razón, no son mi familia -menciono arrugando el entrecejo -no de la manera que lo son para ti. -Ella Cruzo los brazos y soltó un suspiro sonoro -cuando llegue a casa de Caroline estaba enojada, era una adolescente, papa había muerto y mama pasaba más tiendo drogada que haciéndose cargo de mi y no entendía nada.