✧✧Especial De Navidad✧✧

240 29 2
                                    

1987

Rea: Despierten!- exclamó la anciana tirando de las mantas de la menor de las Black

Lyra: ainsss... No moleste vieja- dijo en un murmullo inaudible tapándose la cara con la almohada

La señora fue a la otra cama y también quitó las mantas, despertando en el proceso a la mayor de las hermanas

Alya: pero! Se puede saber que te pasa!!- le gritó, bastante molesta, la pequeña de apenas siete años

Rea: son las diez de la mañana!- les informo, tomando también las sábanas de un tiron, casi tumbando a Lyra de la cama- hoy es día de limpieza, a si que les sugiero que saquen toda su ropa sucia si no quieren lavarla ustedes

Antes de marcharse, también tomo las sábanas de Alya, que ya se había levantado.

Lyra: esa vieja me las pagará!- exclamó enojada dirigiéndose al baño

Alya: te acompaño en el sentimiento..- susurro, también dirigiéndose al baño

Ambas tomaron sus cestas de ropa sucia y bajaron hasta la pequeña habitación donde Rea lavaba la ropa y la planchaba una vez estando seca. Rea, al ser una squib, no podía usar la magia para realizar las tareas domésticas y Severus no pudo conseguir un elfo doméstico cuando decidió cuidarlas, su mejor opción había sido contratar a la anciana.
Las mellizas dejaron la ropa sucia en aquel lugar; junto a la lavadora que Severus compro para Rea, y se dirigieron al comedor donde la squib preparaba el desayuno y lo dejaba en la mesa. Lyra agarró los cereales y el jugo de naranja, Alya prefirió unas tostadas y la leche con chocolate, ambas desayunaron lo más rápido y silencioso que pudieron y una vez hubieron terminado, fueron a su cuarto a vestirse. Había demasiado frío para ponerse unos vestidos, por lo que se decidieron por unos pantalones de mezclilla y unos suéteres que Sev les había regalado la Navidad pasada; el de Alya era verde, y el de Lyra rojo con un árbol de navidad tejido en la parte delantera.
Sus planes para ese día no habían variado, siempre hacían los mismo desde que habían llegado a aquella casa; como era navidad, Lyra iría a la cocina a hacer galletas en cuanto Rea la desocupara, Alya se quedaría en la habitación estudiando uno de los libros de Defensa Contra las Artes Oscuras que le había prestado Severus. A pesar de que el primer año en el que convivieron juntas conociéndose habían llegado a hacer confianza, desde que sus padres había muerto y habían llegado a aquel lugar, su pequeña amistad, se había congelado en el tiempo y simplemente se trataban como conocidas. Aquello era algo que por supuesto, a Lyra le incomodaba, no estaba segura de cómo iniciar una conversación con ella sin que cayeran en un silencio incómodo o que de pronto, ella dijera algo que pudiera enojar a la otra. Había algo que tenía intrigada a Lyra desde hacía un tiempo; las pesadillas de Alya, no eran muy frecuentes, sin embargo, cuando estás aparecían y escuchaba a Alya murmurar, sollozar en la noche e incluso, escucharla gritar, era suficiente para helar la sangre de la más pequeña.

Suspiró, las galletas ya estaban listas. Dudo por un momento, antes de tomar las galletas que había acomodado en una bandeja y subir con ellas a su habitación. Tocó la puerta, se escucho un adelante de parte de Alya, antes de que Lyra entrará con las galletas

Alya: tú nunca tocas la puerta- dijo la niña, sin levantar la vista del libro- pero sabía que eras tú, nadie más está en la casa a parte de Rea; y ella nunca pide permiso para entrar

Despegó la vista de su libro mirando a Lyra con una ceja arqueada

Lyra: no quería interrumpir, si estabas haciendo algo importante- le mostró la bandeja- quieres una?

Alya se encojio de hombros y Lyra se se sentó al borde de la cama tendiéndole la bandeja para que tomara una

Alya: gracias- dijo cuando tomo una, tenía forma de cocodrilo

¿Reencarne En Harry Potter? 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora