17. Años después

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Pasaron unos cuantos años desde que Kokichi logró salir del hospital.

Claramente al comienzo la paso terriblemente mal, encontrándose con gente indeseable, pero nada que él no pudiera superar. 

Según él, supero al menos un poco el juego. Seguía teniendo pesadillas de vez en cuando, y también sentía que su mundo se derrumbaba cuando recordaba cosas del juego, pero esto solo  A VECES, además unos ataques mas fuertes que otros. Pero, aunque esto seguía afectándolo, de verdad se sentía mucho mejor que en el comienzo, y definitivamente quería seguir mejorando, hasta que tal vez en un punto pueda tener una vida más normal.

Esa era una de sus metas más importantes "una vida más normal", él sabía que le costaría y que todavía faltaba tiempo para llegar a esa meta, pero estaba dispuesto a darlo todo.

Recordaba muy bien la primera ciudad a la que fue al salir del hospital, de hecho, se quedo en la misma ciudad en donde estaba el hospital por un tiempo. En ese lugar la mayoría de gente lo reconocía, lo que le causo muchos problemas, no solo sociales, si no que también laborales.

La mayoría de los que lo reconocían eran personas muy raras, bueno en realidad todos eran raros, pero específicamente las personas que lo reconocían eran o muy prejuiciosas hacía él o muy  enfermas. De vez en cuando se topaba con gente más normal, quienes le pedían fotos y cosas así, pero eso era casi nunca. Pero en general, todos lo miraban con desprecio.

En un punto, ya le llegaba a molestar, el hecho de que la gente solo lo reconociera por lo que fue en el juego, de verdad era un asco, había veces que hasta llegaba a negar ser ese tal "Kokichi Ouma", algunos le creían, otros no.

Por esta razón normalmente se peinaba distinto que en el juego. En vez de llevar su largo cabello , que ahora se había oscurecido un poco, suelto, lo llevaba en una cola. Además de esto, también usaba plataformas, para aumentar un poco su altura, esto porque al Kokichi del juego lo reconocían mayormente por su tamaño abajo del promedio. Mientras más se alejaba de esa ciudad, menos lo reconocían, lo que era definitivamente mejor para su salud mental.

Los primeros meses fuera del hospital si que se descuido un poco, bueno, un poco mucho. Su apariencia era realmente deplorable. Para su suerte, se dio cuenta de esto a tiempo, y comenzó a cuidarse más a si mismo.

Su cabello, que antes se caía con regularidad, alcanzo un bello brillo saludable. Había veces que después de peinarse le quedaba tan hermoso que se odiaba por recogerlo en una cola, y había otras veces en las que le quedaba excesivamente bien, se rendía y lo llevaba suelto. Sin embargo a esto, otros días lo sentía horrible, y había hasta veces que cancelaba sus planes para el día porque no quería salir y que los demás lo vieran en tan asqueroso estado.

Él, además, comenzó a comer más saludable, y su piel dejo de ser tan enfermamente pálida. Usaba maquillaje recurrentemente, no mucho, solo lo necesario para quedar aceptable. Una de las mejores sensaciones para él era sentirse lindo, en el juego también lo disfrutaba, pero era un sentimiento algo distinto. Agh, debería dejar de pensar tanto sobre el juego.

Por otra parte, después de mucha búsqueda, logró encontrar una hermosa ciudad a las afueras que lo enamoro, estaba alejada de la capital del país, y allí logró encontrar un bellísima casa que hasta ahora sigue pagando con el dinero que gana en su cafetería. Realmente no le gusta mucho usar el dinero que gano en el juego, lo siente como si fuera dinero sucio o algo parecido, solo lo uso en gran cantidad para pagar el inicial de la casa y para comprar un pequeño lugar que convirtió poco a poco en esa tranquila cafetería.

Vivir ahí era realmente genial, y alejarse lo ayudo mucho a superar al menos un poco el juego, aunque claramente todavía lo afectaba un poco. Pero bueno, odiaba centrarse en lo malo, cada vez que lo hacía solo se hundía cada vez más profundo.

Al salir del hospital - Saiouma postgameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora