Al salir del hospital - Saiouma postgame

2. Buscando la cafeteria

- Aaaaamh... que hora son?... - Kokichi bostezo mientras veía el reloj de la pared.

11:30.

- ...- Definitivamente ese día había dormido más que en toda su estancia en danganronpa, ignorando los 4 meses que durmió, normalmente en ese juego dormía solo 2 o 3 horas, lo máximo que podía dormir era 4, y cuando lo hacía se sentía como nuevo. Una vez mientras hablaba con Shumai le conto sobre esto, él le dijo que dejara de hacerlo, porque era malo para su salud física y mental, que dormir bien lo haría sentir mil veces mejor que dormir 4 horas... tal vez Saihara-chan tenía razón... Se sentía como nuevo, ¡y ya no le dolía la cabeza al despertar! 

El único problema ahora era que se moría de hambre. 

"¡Ay cierto! ¡El botón!" Kokichi recordó y se dispuso a presionar el botón celeste que tenía al lado de la camilla.
-BIP BIP BIP. - sonó el botón a lo lejos y al rato entro una enfermera con unas ojeras enormes. 

-¿Acaso no duermes?, pareces fantasma. - dijo Kokichi al ver a la mujer entrar.

- Hay más pacientes en este hospital. ¿Porqué llamas? ¿Tienes un problema?- dijo la enfermera como si ya hubiera dicho esa frase miles y miles de veces.

- Tengo hambre.

- Ve a la cafetería, por lo mucho que dormiste creo que es obvio que ya tienes la suficiente energía como para caminar.

- ¡Pero no camine en años! - Dijo Kokichi un poco alterado.

- Hay muletas en la esquina de la habitación. - Al decir eso, la enfermera se fue, dispuesta a no volver.

-E-ESPERA!. - Grito Kokichi ya desesperado.

- Camina de frente hasta la sala de operaciones, derecha, izq... - Y Kokichi ya no podía escuchar más.

- Tonta enfermera... - susurro Kokichi. Pero bueno, decirle tonta a alguien en un susurro no va a calmar su hambre. Es raro que ahora tenga hambre, en el juego normalmente no comía, tal vez en el juego se acostumbro a esa horrible sensación. 

Kokichi se quito la sabana que lo cubría, y se sentó en la fría esquina de la cama. Bueno, era caminar o morir de hambre. Sus piernas se sentían raras, supuso que era algo normal, porque no caminaba hace mucho, pero tenía que que caminar, así que... 

-TRES, DOS, Y UNOOOOOOO- Kokichi salto al suelo después de esa exageradamente alta cuenta regresiva.  "Wow" Kokichi pensó, ¡se podía parar! Definitivamente el universo lo amaba. 

-A-AAH, - Kokichi cayó al intentar dar el primer paso, tal vez el universo no lo amaba tanto... 

ALTO. ¿los definitivos también estarán en la cafetería? ¿COMO NO RECORDO ESO ANTES? Ahora su día estaba arruinado. Pero... ahora son como las once y cincuenta, y en el juego ellos desayunaban a las 8 o 7 de la mañana... ¿Tal vez se acostumbraron a ese horario y ahora ya no están en la cafetería? además, ¿Quién desayuna a esta hora? Entonces lo más probable es que ya no estén, pero falta poco para el almuerzo... Decidido, ira a comer su desayuno-almuerzo rápido, no se encontrara con nadie y volverá rápido a su habitación de hospital. Nada puede salir mal en su perfecto plan.

Pero, ¿Dónde estaba la cafetería? Tenía que apurarse si no se quería encontrar con alguien, a ver... la enfermera dijo algo de operaciones, derecha y ¿algo más? Bueno, operaciones suena como si le abrieran el estomago a alguien y le pusieran otro... ¡tal vez una sala donde hacen las operaciones a los pacientes! 

Alto... todavía estaba en el suelo... que raro, él juraba que ya se había parado. Ignoro eso, se puso las cómodas pantuflas que estaban al lado de la cama y se dispuso a caminar... solo había un pequeño problema. Aún no podía caminar completamente bien. Kokichi se medio arrastro a donde estaban las muletas, eso lo ayudaría un poco a caminar.

Kokichi salió del pequeño lugar en donde dormía, el resto del hospital no lucia tan diferente, fuertes luces blancas a las que ya se había acostumbrado, olor a medicina y probablemente el suelo estaría demasiado frio si no llevara pantuflas.

Con su objetivo en mente, se dirigió hacia el recepcionista, tal vez el le podría ayudar.

- Donde esta la sala de operaciones. - dijo Kokichi al recepcionista más como una orden que como una pregunta.

- ¿Es acaso usted doctor?. 

- Solo dime donde esta.

- Mire la hora!, ¡ya es mi descanso!- dijo feliz mientras se alejaba del lugar. 

- Idiota... - ¿Acaso todos en este hospital no sabían como tratar a un paciente? Definitivamente si el fuese el que estuviera pagando su estancia dejaría una muy fuerte queja, pero bueno, el no estaba pagando nada de eso. Alto...

-¿PORQUE NO LE PREGUNTE DONDE ESTABA LA CAFETERIA?- grito Kokichi llamando la atención de algunos, aunque no la del recepcionista, que prácticamente huyo del lugar.

-¿Escuchaste eso Makiroll? - Se oyó a lo lejos. Esa voz se le hacia conocida...

- No, y no nos interesa, se supone que nos reuniríamos con los demás para ver a Kiibo después de su operación. - ¿Kiibo ya despertó?

-¡Okey! Pues no nos retrasemos.-

... ¿Van a ir a ver a kiibo? ¿Todos? -bueno... no me importa. Tengo que llegar a la cafetería...-  Susurro bajo.  En ese momento era obvio que estaban yendo a la sala de operaciones que Kokichi estaba buscando, pero él no necesitaba seguir a esos tontos para llegar a la cafetería... de seguro había otra forma de llegar.

Kokichi camino por el lado contrario a donde estaban yendo Kaito y Maki, pero no por donde vinieron, por otro mas vació, sin mucha gente. 

Ese camino era reconfortante de alguna manera, ignorando el hecho de que habían algunas personas y estaba prácticamente en la parte más alejada del hospital, ese camino era relajante. Había una parte sin techo, caía la lluvia y lo único que lo separaba del lugar con techo era una pequeña cerca. Tenía arboles, él amaba los arboles, le encantaba trepar y uno de esos arboles se veía perfecto para descansar. Volvería allí después.

Luego de un rato caminando, de alguna manera rara y tal vez con intervención del universo. Kokichi llego a la cafetería. 

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Otra vez actualizando a media noche?

Si.

Buenas noches.