Leonardo's sleepless night / rottmnt

22

Capítulo 22:  ¿?

Leonardo, tras la batalla contra el krang y la victoria que había conseguido se encontraba en su cuarto. Eran las 4am y no podía conciliar el sueño, trás estar unos minutos más en pleno silencio, este se levantó de la cama para así comenzar a caminar al rededor de la casa.

"Vaya.." fue lo único que pudo decir al ver su cara reflejada en el espejo de la sala, sus ojeras últimamente habían empeorado, pero eso era lo único mínimamente grave. Se alteró levemente cuando escuchó unos leves ruidos salir de la cocina por lo que decidió ir a investigar.

"Mikey.. que se supone que haces.." Preguntó el mayor observando al menor el cual estaba calentando una pizza en plena madrugada "Antojo nocturno Leo!" Exclamó el menor con una sonrisa de oreja a oreja "¿Quieres un poco?" Le preguntó, aunque Leonardo solo declinó moviendo levemente la cabeza. "No tengo hambre, pero gracias igualmente Mikey" refutó aunque solo fue recibido con una mirada algo deprimida por parte de la tortuga de Caja "Deberías comer más.. estás últimamente comiendo muy poco, te hará mal.." fue lo último que Leonardo escuchó antes de salir de la cocina.

En un parpadeo, se encontraba en el bosque junto a Rafael tomando una taza de té viendo el amanecer. "¿No te parece precioso?" Preguntó Rafa observando a Leo con una sonrisa "que..". La tonada de Leonardo era una baja y apagada, se quedó en blanco en unos instantes hasta que sintió el abrazo de Rafael apretandolo un poco. Sin pensarlo, antes de que siquiera pudiera levantar la mano para ceder el abrazo del mayor, este apareció en el laboratorio de Donatello.

"Que quieres Leonardo, estoy ocupado" aclaró la tortuga de caparazón blando ignorando por completo a su gemelo "Donnie yo.. lo siento por todo enserio.." "de que hablas Leo?" "Del como maté a-" recibió un golpe directo de Donatello en la mejilla y cayó al piso. Abrió los ojos de golpe y su garganta se cerró, Estaba siendo aficciado por la manta que le había regalado su hermano.

"HHGHHG!" hacía chillidos para intentar llamar a alguien que lo ayude, aunque solo tomó unos instantes hasta que Donatello cruzó la puerta y lo ayudó a liberarse, aunque rápidamente recibió un abrazo lleno de lágrimas por parte de Leo "Hu.. tranquilo.." fue lo único que pudo decir sin antes aceptar el abrazo, dándole un pequeño beso en la frente. Leonardo de a poco comenzó a cerrar los ojos nuevamente, aferrandose a su gemelo Mientras recibía las caricias."¿Un mal suelo, eh? Eso es raro de ti.." exclamó el de morado mientras acariciaba el caparazón, Leonardo comenzó a aferrarse a el con fuerza, demasiada como para no ponerse levemente alerta, eso hizo que Donatello se apartara, las uñas de la tortuga de orejas rojas había rebanado su piel por intentar aferrarse, un grito de dolor se hizo presente.

" AHG LEONARDO" al escuchar el grito, el mencionado se alejó metiéndose en su caparazón, a pesar de que Donatello era quien lo cuidaba más que nadie, aun tenía en su mente el electroshock por el que tuvo que pasar. El miedo aun le era presente. "hu- Leo yo.. no quise gritarte.. ven, hoy te daré de comer algo especial si quieres.." sin embargo el gemelo mayor dió un siseo, haciendo que Donatello quien tenía las manos extendidas se hiciera levemente para atrás.

"hu.. bien, entiendo! No te preocupes por ello, necesitas tu espacio de todos modos, he.."

Rafael a las horas llegó donde Leo y le entrego la comida, el salió de debajo de la cama con un peluche en su boca, Hey! Era el pequeño peluche que Donatello le había regalado por si algún día Rafa despertaba, era un.. bonito detalle, aunque se veía mordisqueado y babeando, Rafael hizo una leve mueca disimulada. "Que lindo peluche Leo.. Rafa está muy feliz de verlo a el también" dió una sonrisa leve mientras le hacía caricias en la cabeza. Dando leves movimientos en la cola Leonardo comenzó a comer, acurrucandose en el regazo de Rafael mientras se aferraba, evitaba verle la cara pues tenía una venda que le tapaba la mayoría de ella.

"¿Sucede algo Leonardo?" Preguntó con una sonrisa el mayor haciendo relucir ese colmillito característico. Leo se quedó callado, ni un solo sonido salió de el, eso preocupó levemente a la tortuga caimán.

Todo volvió a estar Negro por unos segundos, de nuevo volviendo a estar en el bosque. Leonardo, comenzó a caminar hacía donde había una leve luz y murmullos

"Y ENTONCES REBOTE POR TODOS LADOS! QUE OPINAS DONATELLO?!" "es una experiencia.. encantadora, Aunque que horror tanto caos, no es mi estilo" "Miguel Ángel! Pudiste lastimado tortuguita.."

La tortuga de orejas rojas se quedó escuchando la conversación detrás de uno de los arboles, de repente, su respiración se cerró de golpe "Hey Leo! Por que la cara larga! Ven, siéntate, justo les estaba contando a Rafa y a Donatello el como derrote villanos ayer! LE DÍ UN GOLPE A UNO, Y ATRO, Y LE HICE PUM, PLAM! ESCAPLUSH!". No hubo respuesta por unos minutos, sin más, Leo esbozó una leve sonrisa y se sentó, su cara demostraba cansancio, aunque se quedó escuchando la historia de Miguel Ángel.

Durmió junto a ellos, aferrados como si fueran lo más importante en su vida, pues son su familia! Claro que lo eran. Mientras abrazaba a Miguel angel y dormía, una sombra tapó la luz de la luna. Rafael a contra luz con una gran roca en la mano sobre su cabeza siendo sostenida por ambas manos mientras miraba fijamente a Leo, el cual rápidamente se despertó volviendo a la realidad y apartándose de su hermano de forma desesperada "AHGJAHH" dio quejidos fuertes, mientras que el mayor sin entender que pasaba, intentaba consolarlo.

"Dejalo Rafael, está delirando, con una inyección se le va a pasar.." mencionó Donatello mientras observaba la escena "..pobrecito, no merece ser tratado así, Rafa cree que-" "¿Rafa cree que me dirá como hacer mi trabajo?"

"No.." "eso pensé".