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Yeonjun

—Oye, hijo de puta, te traje un poco de café.

Levantando la vista de la computadora, donde estoy pidiendo algo en algunas partes, Changbin se acerca al mostrador, con una bandeja de bebidas con tres cafés helados en la mano. Los deja y me entrega el mío.

—Gracias.—digo, inmediatamente tomando un largo sorbo.—¿Dónde está Baek?—Antes de que pueda responder, se escuchan pasos detrás de mí.

—Estoy aquí. ¿Nos trajiste café? Qué buen chico de los recados eres.—Changbin pone los ojos en blanco mientras yo suelto una carcajada.—¿Cómo estuvo el resto de tu fin de semana?—me pregunta Baekhyun.

—Esa conexión ¿Valió la pena dejarme el viernes?

—No estuvo mal.—miento encogiéndome de hombros.—Nunca adivinarás quién es mi nuevo el vecino, está al otro lado del pasillo. Se mudó el sábado.

—¿Tu encuentro del viernes por la noche?—Baek habla arrastrando las palabras. Sacudiendo la cabeza, digo: —No, aún mejor, recuerda que yo estaba conectado con alguien que tenía novio.

—Oh, joder, se mudaron al otro lado del pasillo,
¿no?— Changbin prácticamente está saltando de emoción. Le encanta el drama, siempre y cuando no lo incluya a él.

—Algo así, el novio lo hizo.—Los ojos de Baekhyun se abren mientras la mandíbula de Changbin se abre. No puedo evitar la sonrisa que se dibuja en mis labios. Toda la situación es hilarante para mí. Por supuesto, esto podría significar un montón de drama con el que no quiero lidiar, que es la razón exacta por la que ignoré el último mensaje de texto de Jeongin. Pero si estoy siendo honesto, estoy casi emocionado de ver cómo se desarrolla.

Especialmente con lo enojado que parecía Beomgyu parado frente a su puerta con las llaves apretadas en el puño y el ceño oscuro fruncido.

—Me estás cargando.—farfulla Changbin. —No, te lo juro.

—¿Cuáles son las jodidas probabilidades, hombre?.

—Deberías haber visto su cara cuando se dio cuenta de quién era yo.

—Probablemente quería matarte.—escupe Baek.

—Quiero decir, probablemente yo también querría matarme.—respondo con un bufido.—Él es Aunque jodidamente caliente, incluso más caliente de lo que recuerdo, probablemente porque la primera vez, mi memoria estaba un poco confusa por haber sido golpeado en la cabeza con una lámpara.

—Maldita sea, allá vamos.—murmura Changbin. Arqueando una ceja, me burlo.—¿Y qué carajo se supone que significa eso?.

—Significa que conozco esa mirada en tus ojos.

—¿Cuál mirada?.

—El que dice que estás a punto de convertirlo en tu próxima víctima.—Solté una carcajada.—Actúas como si fuera un asesino en serie.

—Dime que estoy equivocado.—desafía, con una ceja arqueada. La sonrisa que se divide en mi rostro es tan amplia que estoy seguro de que entrecierro los ojos.—Escucha, por supuesto, me encantaría follarlo. No te equivocas ahí, él es muy guapo, mucho más sexy que su novio.—Ahora realmente me pregunto si podría lograr que me dejara follarlo... Sé que su ex es versátil. Lo mismo decía en su perfil de Grindr. ¿Beom también será versátil...?

—Buena suerte con eso.—resopla Baek.

—¿Qué? ¿No crees que puedo?

—Conociéndote a ti y a tu extraña suerte, probablemente podrías.—dijo murmurando, y pongo los ojos en blanco.—Podría ser divertido

Say My Name (Yeongyu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora