Say My Name (Yeongyu)

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Beomgyu

El contraste entre el aire frío y el agua caliente es relajante y calmante mientras mis dedos pasan por el cabello ligeramente mojado de Yeonjun. El agotamiento se ha apoderado de mi cuerpo y de mi mente, sería muy fácil desmayarme en este momento, casi sin esfuerzo. Pero parece que no puedo alejarme de él el tiempo suficiente para salir del jacuzzi. Todavía estoy incrédulo por todo lo que acaba de pasar. Hemos tenido un sexo jodidamente fantástico.

Yeon se da vuelta para mirarme.—¿Qué te tiene tan callado, cariño?—Al recordar todo lo que pasó entre nosotros, desde el desafortunado encuentro que tuvimos hasta la tormenta de nieve, la avería de mi auto y esta noche, mentiría si no admitiera que Yeonjun siempre ha sido notoriamente muy sincero acerca de cómo él se está sintiendo. Ha sido continuamente honesto. Continuamente se ha permitido ser vulnerable con el fin de ser fiel a sí mismo en lo que respecta a sus sentimientos por mí.

Entonces, aunque mis manos tiemblan y mi mente me grita que no lo haga, le respondo con la verdad, porque si él puede confiar en mí con su oscuridad y miedo, entonces yo puedo hacer lo mismo. Tragando el nudo que tengo en la garganta, digo honestamente: —Estoy pensando en lo completamente equivocado que estaba contigo y me doy cuenta de lo feliz que estoy de estar equivocado.

La sonrisa que dibuja en sus labios es coqueta, pero también arrogante. Es perfectamente Yeonjun.—¿Es eso así?—Asiento, pongo los ojos en blanco y formo una sonrisa.—Sí, bastardo presumido.

—Entonces, ¿lo que estás diciendo es que te vas de aquí como un maldito demonio por la forma en que te hago sentir?—Yeonjun mueve las cejas hacia mí y no se me escapa que está repitiendo la misma amenaza que me dijo el día de la tormenta de nieve. Debería irritarme, y antes probablemente lo hubiera hecho. Pero no es así. Es entrañable. Por mucho que odie admitirlo, su arrogancia es una de las razones por las que sin duda me enamoré de él.

Su confianza y la forma en que siempre está tan seguro de sí mismo, cuando yo rara vez lo estoy. Admitir eso, incluso ante mí mismo, es extraño, pero es la
verdad—Eres jodidamente ridículo.— digo, sacudiendo la cabeza.

Se inclina y sus labios presionan los míos. Mi cuerpo se relaja inmediatamente al sentir su lengua rozando la mía, mis brazos rodeando su cuello para acercarlo. Ser honesto conmigo mismo y con él es una tonelada de ladrillos que se me quitan de los hombros. Es un soplo de aire fresco. Ni siquiera podría decir cuánto tiempo pasamos sentados aquí en el jacuzzi, besándonos como adolescentes, pero cuando nos separamos, nuestras dos pollas están duras otra vez y nuestros pechos están agitados. Ninguno de nosotros hace ningún movimiento para cuidar las furiosas erecciones, ni tampoco para poner distancia entre nosotros. Este momento es el comienzo de un nuevo capítulo. Un capítulo que nunca en un maldito millón de años pensé que vería. Pero es un capítulo que ahora no puedo imaginar sin comenzar.

Yeonjun me quita un pelo suelto de la frente y sus ojos verde menta beben—Entonces, ¿qué significa esto para ti y para mí, mi amor?—Hago una mueca, sintiendo mis mejillas calentarse—¿Pequeños pasos?—Ofrezco con un perezoso encogimiento de hombros.

—A la mierda eso—resopla—Creo que esto significa que soy tu novio.

Es vergonzoso lo fuerte que golpea el órgano en mi pecho por esa palabra que cae de sus labios sexys como el pecado—No sé nada de eso—bromeo. La cabeza de Yeonjun cae hacia atrás sobre su hombro mientras suelta una carcajada.—Oh, joder, por favor, cariño. Soy tu novio ahora. Será mejor que te acostumbres.

Fingiendo salir del jacuzzi, murmuro: —Lo retiro todo. Hasta la última palabra. Te odio.

De alguna manera, como siempre, terminamos abrazándonos, dejando que nuestros labios y lengua digan todo lo que tenemos que decir. Nuestros dedos de manos y pies están arrugados cuando finalmente salimos del jacuzzi y, sin ropa, nos metemos juntos en la cama y permanecemos abrigados toda la noche. Una parte de mí estaba preocupada de que me despertaría y que el sol de la mañana iluminaría mi arrepentimiento, pero el arrepentimiento nunca llegó. A pesar de todo lo que tuve que pasar para llegar a este momento, no cambiaría nada. Cada dura lección, cada dolor de corazón, cada aventura de una noche que nunca fue más allá... todo eso me llevó hasta aquí, a Yeonjun, por muy loco que parezca. Yeon me vio a mí. Él me eligió. Y continúa escogiéndome día tras día. Nunca fui un sólo por una noche. Nunca fui una ocurrencia tardía. O una segunda opción para él. Yeonjun apareció, una fuerza a tener en cuenta, y resultó ser absolutamente todo lo que nunca supe que necesitaba. No sé cómo se ve nuestro nuevo capítulo, pero sí sé que estoy emocionado de descubrir.

[...]

Bueno, debo decirles que quedan 2 capítulos más, entre estos serían el capítulo 40 y el epílogo. 😭

Ya no habrán meta de votos, solo me gustaría que comenten y apoyen mucho este capítulo para saber cuanto les gusta este fic.