Enjaulado

Capitulo 21 - ¡Bienvenido! O... ¿No?

Al llegar finalmente el día que saldría del hospital, el sentimiento de que algo no estaba bien lo molestaba constantemente, después de todo lo que había pasado no había forma de que simplemente pudiera ponerse en pie, salir y fingir que no había pasado nada, no pensar en lo que había pasado era imposible, mucho menos cuando la misma policía quien debía ayudarlo lo señalaba sin el más mínimo remordimiento como el culpable.
El extraño sentimiento de culpa y miedo eran como si se pudriera desde dentro de él.

No importaba quien dijera que todo estaría bien, que no era su culpa. Tenía claro que todo estaba mal y que era su culpa, si no hubiera ido a ese colegio, si no hubiera estado en esa clase, en ese curso, si no hubiera postulado para ese puesto, si no hubiera pedido ese empleo, si tan solo no hubiese hablado, si no hubiese dicho que estaba bien quedarse ese día a solas, cada una de sus desiciones lo llevaron a donde estaba ahora.

Su pesadilla no había acabado, solo se había pospuesto, al menos en el hospital tenía la seguridad de que no sería tan tonto como para ir por el pero estando afuera no había nada que pudiera detenerlo.

Sabía perfectamente que Peter no le perdonaría lo que hizo, el escapar y poner a la policía en alerta eran 2 cosas por las que estaba seguro que en el momento en que Peter lo encontrase lo haría arrepentirse de haberlo hecho.

Estaba aterrado de salir del hospital, era el único lugar en el que se sentía seguro, siempre rodeado de personas, nada más bastaba un botón y ya tenía a alguien junto a él.

Presionaba con fuerza sus manos hasta que su piel se enrojecía intentando calmarse para que no notaran su preocupación y sospecharan aún más de que no decía todo lo que sabía.

—¿Estás listo?

La voz de Rick lo hizo salirse de sus pensamientos volteándolo a ver inexpresivo.
Rick se sentó junto a él en la cama mirándolo algo preocupado.
— ¿Por qué me ves así?
Te ves pálido, más de lo normal.
Bromeo pero no recibió ninguna respuesta del menor.
— ¿Que pasa, debería llamar al doctor?
— No, estoy bien. Es solo que es extraño, eso es todo...
Le contestó riendo a lo último como si intentara ocultar su miedo y ansiedad con sonrisa, pero se le daba terrible.
— Cambia ya esa cara, entonces. ¿Qué te preocupa?, sales hoy deberías estar más animado.
— ¿Por qué? ¿Qué hay afuera que pueda emocionarme?
Rick lo miró preguntándose que podría decir pero no se le ocurrió nada que pudiera responder, no podía asegurar que realmente estaría bien y no terminaba de entender cómo se sentía como para simplemente decirle "no te preocupes". Si decía eso era seguro que lo haría enojar y lo menos que quería era tener más tensión entre ambos.
— No le des mucha cabeza... deja que yo me encargue.
Le sonrío dándole un par de palmadas en la espalda sin controlar su fuerza haciendo que se hiciera hacia adelante y lo mirara molesto.
— ¿Encargarte de qué? No digas estupideces.
Le contestó frunciendo el entrecejo molesto de escucharlo hablar siempre tan a la ligera.
— Pero que humor nos cargamos hoy.
Le contestó bromeando acercándose a su cara haciendo que Lucas se echara para atrás asegurándose de mantener la distancia entre ambos.
— No hagas eso, no es gracioso.
— Contigo nada lo es...
Lucas lo miró ofendido pero lo que recibió fue una risa de Rick al ver que seguía siendo igual de fácil molestarlo.
— Bueno, ya. Hoy solo te toca disfrutar tu primer día fuera de aquí. Podemos hacer lo que quieras.
— No quiero hacer nada.
— ¿Ni comer un helado?
— Está helando afuera, claro que no.

Se tranquilizó un poco de por menos ver que sea siendo el mismo refunfuñon de siempre.

Le ayudó a ponerse en pie junto con las muletas asegurándose de que no perdiera el equilibrio.
— ¿Cómo las sientes, bien?
— Ya deja de preoc...!

No pudo terminar de contestarle al case caerse por tambalearse al intentar mantenerse en mi por si solo pero Rick lo sostuvo para no caer.
— ¡Ten cuidado! ¿Acaso quieres otro yeso?
Lucas torció sus ojos ignorándolo comenzando a caminar despacio en lo que se acostumbraba a utilizarlas. Eran algo pesadas pero que poco a poco lograba caminar mejor.