Una nueva noche se mostraba en el lugar, muchos decidieron no cenar y tan solo quedarse en su cabaña, otros casos era estar un rato fuera, como el caso de Charlotte y Kelly.
Las chicas caminaban juntos riendo y hablando de temas absurdos, miraban de vez en cuando a personas que también pasaban por allí, la luna también entraba en sus miradas por ratos.
—Ya es algo tarde—dijo Char temblando por el frío—. Debemos regresar a la cabaña.
—Si, claro—dijo Piquet sonriente y comenzando a caminar de regreso—
Aun bajo la luz de la luna comenzaron a caminar al lugar, primero irían a la cabaña principal por algunos panes dulces pues Honnie les dio a conocer que se encontraban allí, después se moverían al su cabaña y los comerían.
El camino no eran tan largo pero lo sintieron así, estaban por llegar a su destino cuando Kelly escucho un sonido cerca de los arbustos.
—Ignóralo Ke, volvamos rápido, el frío me está matando—dijo la castaña teniendo más frío que antes—
Kelly hizo caso omiso y se acerco un poco al origen del sonido, tal vez podría ser algún animal herido como dejarlo solo sin que este pueda defenderse, extrañada no encontró nada y se quito del lugar.
—No era nada Char, podemos ir por el rico pan, muero de ham...—al regresar su amiga ya no se encontraba parada allí—. ¿Char?
La pelinegra comenzó a mirar de un lado a otro buscando a su amiga, se acerco un poco más a donde estaba antes la chica, en su búsqueda cayó manchando su ropa con un liquido algo espeso, confundida intento limpiarse un poco, algo que no logro.
Poco le importo y se reincorporó aun en la búsqueda de su amiga o algo eso pensaba hacer hasta que piso aquel líquido, noto lo rojo y comenzó a dudar en lo que se encontraba allí, comenzaba a asustarse un poco.
Charlotte caminaba de regreso al lugar donde dejo a su amiga, para su sorpresa, no la encontró, algo confundida la busco con la mirada, poco a poco el lugar se hacía más oscuro impidiendo el poder buscar a Kelly.
—Ke, donde mierda te metiste—dijo la chica sin obtener una respuesta, trataría de buscarla, pero, primero necesita una linterna—
Todo esto mientras Kelly se encontraba llena de sangre sin saberlo, aun buscaba a Charlotte, pero, como también pasó con la castaña, la oscuridad comenzaba a ser un gran obstáculo.
Obstáculo que causó una caída de la pelinegra, la chica como pudo se levantó, demasiadas caídas en un día, había llegado a el pequeño muelle, la luna por fin dejó ver su ropa, está tenía una mezcla de lodo y sangre, juraría qué tomaría 30 baños después de encontrar a la chica y tal vez darle uno que otro golpe.
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𝘾𝙖𝙢𝙥𝙚𝙧 𝙖𝙫𝙚𝙘 𝙡𝙖 𝙢𝙤𝙧𝙩
HorrorSolo queríamos pasarla bien, reír, hacer manualidades, quemar malvaviscos y contar historias de terror alrededor de la fogata. Lo último que pensábamos era formar parte de una.