Solo queríamos pasarla bien, reír, hacer manualidades, quemar malvaviscos y contar historias de terror alrededor de la fogata.
Lo último que pensábamos era formar parte de una.
El movimiento de cortar las luces no dio un buen resultado para Sebastian, solo logro matar a una persona, herir a una y dejar huir a muchas personas, con el paso de los minutos su sed de sangre era mayor, su siguiente pieza a mover fue activar una de las alarmas del lugar y parecía que le funcionó.
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Para todos la situación les parecía totalmente confusa, las luces, la alarma, todo esto parecía algo descabellado, como si fuera el fin del mundo pero claramente no lo es, una broma se veía más viable, el punto era que una persona hacía todo eso con un fin.
Sorpresivamente Kimi se encontró con sus dos compañeros, sin rastro de Vettel, solo eran ellos tres enfrente de la cabaña principal, las vibras del lugar comenzaron a cambiar, no eran bonitas.
—¿QUÉ CARAJOS PASA?—grito Horner buscando respuestas de los otros dos—
Los otros dos tan solo se miraron alzando los hombros, Torget siempre estuvo con el por lo tanto no activo la alarma, Kimi estaba desubicado, se notaba que no había dejado de dormir en un buen rato y Sebastian no se encontraba allí, a ciencia cierta no sabía si el la activo o alguien más, un campista podría.
—¿Porque tanto escándalo?—ante ellos se presentó un Sebastian confundido—
—Alguien prendió la alarma—contestó Wolff acercándose a su pareja para calmarla—. Al menos no fue la que llama a las autoridades, esto solo debe ser una broma, alguien debe ir a apagar esa cosa.
Vettel alzó la mano dando a entender que el lo haría, asintieron, Kimi quiso acompañarlo pero este se negó, expresó que sería mejor que se quedarán allí y tratara de dormir, el se encargaría de todo ese tema.
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Los hermanos junto a la pelinegra comenzaron a caminar adentrandose al bosque, en dicho lugar la alarma no era tan irritante, mientras hablaba y caminaban por el lugar se encontraron con un Lando y Fernando totalmente alterados, sin entender mucho de lo que decían pidieron tranquilidad.
—¿Paso algo?—pregunto Lily tratando de calmarlos—
Los dos asintieron sin saber muy bien como explicar los acontecimientos que pudieron presenciar.
