Y se paraliza con el dedo a punto de oprimir el botón verde, mira el número y después el nombre, desde que había llegado a su casa ingresó el número a su celular para guardarlo como contacto para llamarlo después, ya que el shock de tener el número de teléfono del vocalista de su banda favorita se esfumara; de eso ya eran tres días, siempre que trataba de llamar se quedaba de piedra, cuestionándose qué hacía llamándole, ni si quiera tenía un tema de conversación, era ridículo. Suspira y guarda su celular antes de que el molesto de Kise llegue y cometa una locura con ese número a su alcance.
La clase de historia comienza, sin Kise, que ha perdido dos clases antes de llegar, agitado y desaliñado, se disculpa con el profesor en turno antes de que lo deje entrar.
—Fuh —exhala acostándose en el pupitre.
—¿Y a ti qué e ha pasado? ¿Aomine no te dejo venir? —Se burla en susurros girando solo un poco la cabeza
—Cállate —gruñe agitado, desde hace tres años que Kise sentía una atracción hacía el moreno, pero nadie lo sabía, a excepción de Midorima y Kuroko —. Ojalá hubiera sido eso —hace un puchero acercándose más a la espalda de su amigo ya que el profesor ha mandado miradas fugaces molestas.
—¿Qué ha pasado? —Susurra tomando notas
—Al idiota de mi represéntate se le ocurrió la maravillosa idea de tomar un trabajo de madrugada. El muy idiota, ¡y ni siquiera me preguntó! Agh, tengo ganas de sacarle los ojos —termina soltando un bostezo.
La hora del receso llega, Kise se ha quedado dormido en todas esas horas y hasta ese momento se le ocurría despertar.
—No quiero salir —se queja escondiendo el rostro entre sus brazos cruzados sobre el pupitre.
—No te preocupes, le mandé un mensaje a los chicos, dicen que llegan en un instante —el señalador de contactos se detiene en un nombre: "Takao Kazunari", mira ese nombre leyéndolo una y otra vez; ¿será conveniente mandarle un mensaje? Aún no se creía que tenía su número.
—¡Ey Midorima! ¿Qué haces? Woooh, esté nombre no es de una chica —se burla mirando la pantalla del aparato
—¡Aomine, devuélvemelo! —Comienza a perseguirlo, tratando de quitarle el celular.
—¡Vaya Mido-chin! ¿Es tu novio? —Murasakibara entra en el juego, tomando lo que Aomine le extiende
—Regrésame eso niñote —rezonga con los brazos en jarras
—Lindo nombre Shintaro —se burla Akashi
—¡Dejen eso ya!
—¿Cómo se llama? ¿Lo conozco? —Kise se activa persiguiendo el aparato, que pasa a las manos de Kuroko —. Wooh, Takao Kazunari. ¿Es el Takao Kazunari que conozco? —Alza la ceja divertido quitándole el celular al peliceleste.
—No es de tu incumbencia, Kise idiota
—Mooo, no seas así Midorimacchi —hace un mohín.
—¿Por qué lo observabas con cara de menso? —Pregunta Aomine quitándole el desayuno a Kise —. ¿Acaso es tu 'crush'?
—No. Te. Importa —separa las palabras recalcándolas —. ¿Me devuelves el celular por favor? —Pide molesto extendiendo la mano.
—Olvídalo. No tienes ni un mensaje ni llamada, eso quiere decir que tienes la intención pero no te animas. Vamos, te daré un empujoncito
—Ni se te ocurra. ¡Kise no lo hagas!
—¿Hola? ¿Takao? —A Midorima se le salta una venita en la frente, creyendo aquello una broma —. Disculpa las molestias pero le diste tu numero a un amigo mío. 1.95 de estatura, cabello verde... ¿sí? ¿El chico de la toalla? —El rubio le mira divertido provocando que a Shintaro se le bajen los colores. Aquello no era una broma —. Sí, está bien. Midorimacchi, es para ti —le extiende el aparato sonriente agitándolo de un lado a otro.
Midorima traga grueso negando, Kise frunce el ceño.
—Anda, quiere hablar contigo —susurra tapando la bocina sin abandonar su posición.
—Olvídalo —gruñe. Siente las manos de Murasakibara sobre su cabeza, deteniéndola —. ¿Qué haces? Déjame.
—Dile hora y entabla una conversación con él —amenaza moviendo de nuevo el aparato. Midorima bufa tomándolo, Ryota le sonríe encantado; el peliverde carraspea nervioso
—Ho-hola
"—¡Shin-chan! —." Aquella voz cantarina le pone la piel de gallina, era tan alegre y tan bella como en los conciertos "—Fueron tres días, creí que ya no llamarías—." Por alguna extraña razón le imagina haciendo un puchero, se veía tan infantil que aquellos ademanes le quedaban perfectos.
—L-lo siento, no... reunía el valor suficiente para llamarte —susurra escondiendo su rostro enrojecido.
"—Jajaja. ¿Estás con alguien? ¿Quién era el que llamó?"
—Am, e-estoy con unos amigos
"—Oh, perdón si interrumpí algo —." Midorima frunce el ceño.
—No tienes que disculparte, nosotros te llamamos.
"—Cierto —." De nuevo se lo imagina, está vez sonriendo, como hace cuando termina un concierto. "—Oye Shin-chan. ¿Tienes algo qué hacer está noche —." Midorima lo piensa, tenía que estudiar para el examen de química. ¿Será conveniente posponer sus estudios?
—Yo... pu-pues...
"—Si tienes algo que hacer está bien. Será para la próxima —." Y su voz decaída le hace tomar una decisión apresurada.
—¡No! E-está bien. Pu-puedo ir.
"—Bien, te mandaré un mensaje con la dirección. ¡Nos vemos Shin-chan! —." El sonido de la llamada muerte llega antes de poder despedirse.
—¿Y?
—¿Cómo te fue? —Preguntan Kise y Aomine intrigados.
—Bien —sonríe al leer el mensaje que le ha llegado, lleno de emoticones. Sabía que era de esos.
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NOTAS DEL AUTOR: Lamento no responder los reviews, pero tengan por seguro que si los leo (lo que es Amor Yaoi y Fanfiction.net). Lamento la tardanza, no me he sentido bien en estos días; espero haya sido de su agrado, los adoro :3 Espero sus reviews *Besos y Abrazos*
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"Daяe MØ βetā" (PremiosKnB2017)
FanfictionShintaro es un joven fanático de "Daяe MØ βetā", una banda de talla mundial, es un estudiante común y corriente aunque su admiración llegue a extremos inhóspitos. Algo bueno sucede en uno de los tantos conciertos a los que asiste. ¿Eso podrá cambiar...