"Todo El Vecindario"

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CONTENIDO +18

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—Ta-Takao no es necesario. No quiero que pierdas tiempo conmigo —dice una vez en la calle mientras esperan a que el ballet parkin traiga el auto de Takao.

—No te preocupes Shin-chan, solo te dejaré y volveré —le muestra los dientes en una sonrisa provocando que Shintaro simplemente baje la mirada. Takao es tan tierno de mucha maneras.

Al fin el hombre llega con el auto gris deportivo de Takao; ambos suben para que, con un quemón de llantas, arranque a toda velocidad, Midorima apenas y se ha podido colocar correctamente el cinturón. Ahora se agarra con las uñas del asiento de cuero negro, Takao era un loco tras el volante.

El radio es encendido, la pantalla touch indica el nombre de una canción, interpretada por OLCODEX, las bocinas retumban por el volumen tan alto que se maneja. Takao está tan absorto cantando la canción, esquivando autos a gran velocidad y pasando las luces preventivas. Kazunari pasa la calle por donde debía dar vuelta, y Midorima apenas y se ha dado cuenta.

—Ta-Takao... Ey Takao... ¡TAKAO! —Grita exasperado, no quería seguir avanzando, aquello solo significaba perder tiempo valioso, dando ventaja a sus padres de despertar y ser castigado por más tiempo.

—¡Oh, lo siento! —Baja el volumen —. ¿Sucede algo¡

—Te has pasado ocho calles... nueve de la que se supone debías dar vuelta... ahora son diez.

—¿Por qué no lo dijiste antes? —Frunce el ceño antes de dar una vuelta en U para pasar al carril del sentido contrario.

El hombreo de Midorima golpea la puerta por la repentina acción, siente que el alma lo abandona con aquel acto tan violento, sumándole las repentinas paradas y bocinazos de los otros conductores.

—¡Whoooo! Jajaja. Entonces Shin-chan, ¿en dónde vives? —Pregunta son despegar la vista del camino ni bajar la velocidad.

—Ikebukuro, 12-14 —indica acomodándose adecuadamente en el asiento; Takao ha bajado un poco la velocidad para poder dar vuelta tres calles antes de la que se debe tomar.

—Ah... Takao

—No te preocupes, es un atajo —Midorima guarda silencio, confiaría en Kazunari.

.

.

—Bien, hemos llegado —sonríe Takao apagando el motor del auto.

—Gracias por traerme —trata de salir pero el seguro sigue puesto —. Ah, Ta-Takao

—¿No te despedirás de mí? —Pícaro acercándose a Midorima.

Shintaro se queda quieto, ver los ojos iluminados de Takao por las lámparas del exterior le paralizan, sin duda es una imagen digna de admirar detenidamente.

El espacio se reduce hasta que sus labios se juntan en un contacto tierno, aun Midorima teniendo prisa la verdad es que siempre le podía donar un poco de su tiempo a ese hermoso cantante.

Sin preverlo Takao se sienta sobre él a horcajadas, aún besándole; sin duda alguna Midorima le atraía, siente tanto deseo por aquel estudiante que simplemente al verlo se excita sobremanera.

—Ta-Takao, espera —murmura entre beso y beso —. Te-ten...go que... irme

—Solo un poco Shin-chan. Te deseo —susurra peinando los cabellos de Midorima hacia atrás.

"Daяe MØ βetā" (PremiosKnB2017)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora