¿Primera cita?

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Le parece ridicula la cantidad de veces que ha revisado su celular solo para ver si Liam respondió los mensajes que envío, quizás, no debió decirle que estaba celoso, por supuesto que no debió hacerlo.

Seca el sudor de su frente con su brazo y continúa golpeando el saco colgado en su habitación, los gritos de Yaser están siendo silenciados con la voz de Damiano David sonando fuerte en el parlante en la esquina de su habitación.

Vuelve a mirar su teléfono y aún no hay respuesta, se saca las vendas de sus manos y se dirige a su cómoda, abre el primer cajón en donde guarda su ropa interior, pero también otras cosas.

Saca la pequeña bolsa con polvo blanco, la abre por una esquina y deja dibujada una línea antes de devolver la bolsa a su lugar, saca del bolsillo trasero de sus pantalones un billete y lo enrolla antes de utilizarlo para aspirar la línea de cocaina.

No consume siempre, solo ocasionalmente cuando está de fiesta o cuando quiere sentirse un poco más alegre o con energía, se mira en el espejo y ve el sudor en su torso desnudo, no le importa, toma su chaqueta de cuero, se la pone sobre su cuerpo sudado y la abrocha, toma el celular junto a la billetera y sale de la habitación.

Como siempre, cierra su habitación con candado, pasa junto a Yaser quien le grita que es un "marica mal agradecido", lo ignora y sale de la casa.

Toma una bocanada de aire y camina hacia la casa de Adam. Al llegar abre la puerta y se encuentra con Nana viendo televisión, mientras Adam lleva dos tazas de té en una pequeña bandeja.

— ¡Hola! — saluda enérgico y Adam levanta una ceja de inmediato.

— ¿Que desea? — pregunta Nana amablemente mientras toma una de las tazas que Adam lleva.

— Venía a verte — dice Zayn con una sonrisa — ¿Puedo sentarme con ustedes?

Nana arruga el entrecejo y mira a Adam de manera desconfiada.

— Rick, dile que se largue. No es hora de que te estén visitando.

Rick, el hijo mayor de Nana, tío de Adam, al cual jamás conocieron porque falleció antes de cumplir los veinte. Claramente Nana esta con su mente pedida, otra vez.

— Está bien mamá, es solo un amigo que vive cerca. — dice Adam siguiéndole la corriente y le da una mirada confundida a Zayn — Iré a ver qué quiere ¿Si?

Ella asiente y Zayn lo continúa mirando con una sonrisa desde la puerta.

— ¿Que paso? — pregunta Adam en cuanto llega a su lado

— ¿Vamos a un bar?

Adam lo mira unos minutos en silencio y voltea a ver a Nana que sonríe por algo que sale en la televisión

— No creo hermano, ha sido un día complicado hoy con Nana, no puedo dejarla sola.

Zayn asiente, más veces de las necesarias.

— Bien, si, tienes razón, si, te veo luego

Antes de que pudiera voltearse para irse, Adam toma su brazo para detenerlo.

— ¿Que te paso? ¿Problemas con El Niño?

— No es tu asunto, nos vemos.

Se fue de allí sin mirar atrás, no quiere contarle a Adam como anda mendigando atención de Liam, y tampoco quiere ir a ver a Harry porque sabe que preguntara que mierda sucede con Liam y solo ¡jodida mierda!

Caminó pensando más tiempo y distancia de la que pensaba, y solo se dio cuenta de que estaba fuera de la casa de Liam cuando su celular comenzó a sonar con un mensaje.

Siempre tú ZIAMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora