Divagaciones - Michaeng

tres

¿A dónde quiero llegar? A ningún lugar en particular, si no estás ahí ¿Por qué tendría sentido?

Supe que te fuiste sin haber partido en realidad, cuando te miré hoy y tu vista estaba fija en el suelo. Estabas distante, de tus amigas, del mundo, de mí... Aunque eso último no es novedad.

Tú eres la estrella más brillante y yo solo soy la que te admira, la que suspira, la que nunca ha buscado tu mirada por temor a desvanecerse. Aunque te miro, tanto que podría asegurar que nadie conoce tus facciones y gestos como yo, porque tus detalles son inspiración.

Solo estoy loca, lo asumí cuando supe que no podría acercarme a ti, pero no sabes que mi anhelo por escuchar tu voz dirigida a mí no es cuantificable. Desearía saber qué te abruma de esa manera, para que no haya una sonrisa grabada en tu lindo rostro o al menos, para que tus comisuras estén levantadas levemente.

Tu mente es fascinante, lo sé sin siquiera conocer un fragmento.

Solo basta ver las emociones plasmadas en tus trabajos, cada detalle, cada parte que ha sido confeccionado con tus manos.

Tus manos.

¿Serán suaves? ¿Serán cálidas? ¿Serán frías? ¿Tomarían las mías? Son tan elegantes, delicadas y bonitas, pero no me sorprende porque es parte de lo que te conforma.

Ojalá esté todo bien, tal vez no sabré el motivo pero pienso positivo por ti. Que mis buenos deseos lleguen y se queden contigo.