IV

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Ya había pasado un mes desde que inició el servicio militar y hoy todos los soldados iban a practicar tiro con diferentes armas y también a aprender a defenderse con diferentes artes marciales, Jimin estaba orgulloso de sus soldados ya que habían mejorado bastante, ya tenían más resistencia y no se cansaban rápido, incluso su soldado Min ya era mucho más aplicado y eso solo hacía que Jimin se sintiera casa vez más atraído por el.

Jimin agarro un subfusil llamado daewoo K1/K1A el cual es utilizado por el ejército coreano y apunto hacia una de las siluetas, disparo y dio justo en el blanco, luego volteó a ver a sus soldados.

— Aún son principiantes pero quiero que a final del mes ustedes puedan dominar cualquier fusil o subfusil, incluso escopetas pero vamos a empezar por los subfusiles agarren uno y pónganse como les enseñe

Los soldados hicieron lo pedido, Yoongi jamás en su vida había tenido una arma en sus manos así que estaba un poco asustado, se puso y agarro el arma como el coronel Park le había enseñado.

— Soldado Min su postura no es la correcta si dispara así se va a lastimar

El coronel Park se acercó al soldado Min y le ayudó con la postura, le agarro la mano y la puso bien en el subfusil, mientras eso pasaba Yoongi estaba muy sonrojado tenía a su coronel así de cerca incluso sentía su perfume varonil, su coronel era muy hermoso y sus labios eran aún más hermosos le gustaría probarlos al menos una vez en la vida, no le importaba si era un beta pues ya estaba profundamente enamorado de su coronel.

Por otro lado Jimin estaba muy nervioso al estar así de cerca de Yoongi, aunque era tenue podía sentir su olor natural de limón mandarina ya que en el ejército debían usar neutralizadores de aroma lo cual era una lástima pues Jimin quería sentir más el olor natural de su lindo soldado, además se había puesto aún más nervioso al agarrarle la mano a su soldado, pero lo supo disimular muy bien.

— Listos, apunten — Jimin vio que todos lo hicieran bien — ¡disparen!

Los soldados dispararon algunos con miedo y otros disfrutando del aprendizaje, por otro lado estaba Yoongi quien aún no podía creer que había dado en el blanco así que empezó a sonreír enseñando su característica sonrisa de gomita y Jimin sintió morirse, su soldado se veía tan lindo.

Asi pasaron toda la mañana aprendiendo a disparar pues Jimin debía enseñarle a los cincuenta soldados que estaban bajo su cargo, algunos eran pésimos pero esperaba que aprendieran a final del mes.

Luego de eso Jimin se llevó a todos a practicar artes marciales, en realidad aprenderían diferentes artes marciales pero iban a empezar con el hapkido un arte marcial coreano enfocado hacia la defensa personal militar.

Jimin formó a todos sus soldados y luego con ayuda de otro militar les enseñaron diferentes movimientos, mientras todos los soldados miraban, aunque por hoy iban a aprender solo lo básico así que los formó en parejas de dos para que compitieran entre sí con los movimientos básicos que les habían enseñado.

Algunos eran bastante buenos pero a otros aun se les dificultaba mucho así que tuvo que ayudar a algunos y claro también a su lindo soldado quien la estaba pasando realmente mal, Jimin estaba concentrado viendo a los demás soldados cuando escucho algo caer al suelo así que volteó hacia esa dirección y vio al soldado Min tirado en el suelo mientras su compañero no sabía que hacer, camino rápidamente a Yoongi y le ayudó a sentarse, sintió que su corazón le dolía al ver que Yoongi tenía una herida en frente ya que se había lastimado al caer.

— ¿Se puede saber que paso? — miro al otro soldado, Jimin estaba bastante molesto sobretodo porque habían lastimado al soldado Min

— Coronel Park, no fue mi intención Min tropezó y se cayo por favor no me castigue — dijo el otro soldado mientras sentía que su vida pasaba por sus ojos al ver la cara de enojo de su coronel

— ¿Eso es verdad? — volteó a ver a Yoongi

— Si coronel Park, fue mi culpa no castigue a mi compañero — dijo Yoongi apenado y avergonzado, pues por más que quisiera sorprender a su coronel solo terminaba haciendo las cosas mal

— Todos se quedan aquí iré con el soldado Min a la enfermería, sigan practicando — dio la orden y el otro militar a cargo siguio viendo a los soldados mientras el coronel Park se iba con Yoongi a la enfermería

Caminaron en silencio hasta la enfermería y entraron, luego Jimin le dijo a Yoongi que se sentara en una de más camillas mientras llegaba Jin y Hoseok, pero se estaban tardando hasta que finalmente llegaron.

— Se puede saber por que motivo no se apuran — se les quedó viendo muy enojado a los dos

— Coronel Park solo nos tardamos dos minutos — dijo Hoseok mientras empezaba a limpiar la herida de Yoongi

— ¿Tu eres el soldado Min? — pregunto Jin mientras le pasaba el alcohol al doctor Hoseok

— Si, yo soy el soldado Min Yoongi

— Ahora entiendo la urgencia — dijo Jin en voz baja al oido de su hermano

Las mejillas de Jimin se tiñeron de rojo así que se dio la vuelta rápidamente para que nadie de los presentes viera su sonrojó y aunque Jimin no lo admitía en voz alta, la verdad era que le gustaba mucho su soldado, pero debía mantener la compostura pues ellos solo tenían una relación coronel soldado y hasta allí, muy en el fondo de su corazón Jimin sentía que no tenía oportunidad con Yoongi pues no era un omega delicado era todo lo contrario y además su soldado pensaba que él era un beta así que sus ánimos se vinieron abajo.

— Ire por unas pastillas por si te da dolor o algo, mañana ven a revisión cuando te desocupes — dijo Hoseok a Yoongi y luego se fue por las pastillas, Jin también se fue para aguardar los medicamentos y tirar a la basura los algodones que habían utilizado

— Soldado Min

— Coronel Park, le prometo que la próxima vez lo haré bien pero no me castigue — se apresuró a decir

— No voy a castigarlo soldado, fue un accidente solo tenga más cuidado la próxima vez, cuando le den sus medicamentos regrese al entrenamiento — Jimin salió rápidamente de la enfermería mientras sentía su corazón latir cada vez más fuerte

— Gracias coronel Park — Yoongi sonrió, al parecer su coronel no era tan malo después de todo




















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