XIX

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Una semana después Jimin regreso a la base militar, ya se sentía mejor de su brazo aunque aún no lo podía mover mucho pero ya estaba mucho mejor. Cuando llego decidió ir a hablar con el general de division, tocó la puerta de su oficina y entró cuando su superior lo dejó pasar.

— Buenos días general — saludo a su general y luego hizo una reverencia

— Buenos días coronel tome asiento, ¿que lo trae por aquí?

Jimin se sentó al igual que su general y luego el omega tomó un poco de aire para agarrar valor.

— Quería decirle algo muy personal. Antes que llegue a sus oídos por otras personas

— Dígame, lo escucho

— Tengo una relación con el soldado Min Yoongi — vio directamente a los ojos de su general — si no hay ningún problema con eso me gustaría seguir entrenando a los soldados, también debo mencionar que aunque él sea mi novio no voy a tratarlo diferente a los demás

El general estaba muy sorprendido, nunca espero que el coronel más serio de toda la base se hubiera enamorado, incluso habían apostado que se iba a quedar soltero hasta anciano pero al parecer no iba a ser así. Luego le sonrió porque sabia que Jimin era muy profesional en su trabajo así que por él no había problema en que siguiera con los soldados que le fueron asignados.

— Seré directo con usted coronel Park — lo vio directo a los ojos

Jimin ya estaba esperando que le dijera que iban a mandar a su novio a otra base militar o lo iban a reasignar con otro coronel.

— Se que usted es muy profesional en su trabajo, así que le creo que no va a tratar de manera diferente a su pareja. Por mi no hay ningún problema siempre y cuando nadie los vea darse muestras de afecto en frente de los demás soldados porque eso podría causar algún problema, espero lo entienda

— Claro que si general lo entiendo y no se preocupe por eso no nos daremos muestras de afecto frente a todos

— Esta bien, los Park son de palabra — sonrió al recordar al señor Park el papá de Jimin quién fue su superior hace algunos años y sabía que sus hijos eran igual de rectos que él

— Gracias general — hizo una reverencia de agradecimiento — si me permite voy a retirarme ya es hora de levantar a los soldados

— No se preocupe coronel Park, vaya a hacer sus actividades — sonrió

Jimin salió de la oficina de su superior y fue a ordenar que tocarán para despertar a los soldados, mientras se realizaba el toque de Diana, Jimin estaba sonriendo al saber que iba a poder estar con su novio hasta que acabará el servicio militar y eso lo ponía demasiado feliz. No sabía que hubiera echo si su superior le hubiera dicho que no.

Los soldados se levantaron, se ducharon y vistieron. Ya estaban listos para iniciar el día así que se formaron como solían hacerlo y algunos casi lloran cuando vieron al coronel Park, claramente no eran lágrimas de felicidad eran de tristeza porque en esos días que él no estuvo habían descansado bastante pero sabían que todo eso ya no iba a ser posible.

— Espero hayan descansado cuando estuvieron con el general Namjoon, pero como saben conmigo las cosas son diferentes

Todos evitaron llorar nuevamente aún no estaban preparados para hacer todo lo que hacían con el coronel.

— Hoy ando de buen humor así que hoy solo van a correr veinte vueltas, sesenta sentadillas, cuarenta lagartijas, cuarenta abdominales, viente ejercicios con pesas luego vamos al campo de tiro y finalizamos con artes marciales — los vio a todos y las caras que tenían — anímense es poquito lo que van a hacer hoy

Todos tenían cara de no querer hacer todo eso porque iban a acabar muertos.

Yoongi amaba mucho a su novio pero aveces su entrenamiento era demasiado pesado, aunque le alegraba que ya hubiera regresado a la base militar.

Los soldados empezaron a hacer lo que su coronel les decía y al finalizar el día todos estaban más muertos que vivos incluido Yoongi.

— Mañana vamos a ir al campamento de nuevo, pero esta vez no iremos en camión hasta allá esta vez vamos a ir caminando, así que vayan a descansar lo que más puedan porque si hoy fue un día cansado mañana será peor, feliz noche soldados — Jimin dejo a todos en el comedor mientras los soldados se quejaban por la actividad de mañana

Yoongi acabo de cenar y fue a la oficina de su coronel, toco la puerta y luego entro, al ver a su novio sonreír él también sonrió.

— Hola amor — se acercó a su novio y le dio un beso

— Hola alfa, al fin vienes — se levantó de su silla y lo abrazó fuertemente — te extrañe demasiado estos días

— Yo también te extrañe — lo abrazó también mientras le daba besos en las mejillas — ¿hablaste con tu superior?

— Si, ya le dije. Dijo que no había ningún problema mientras no nos dieramos muestras de afecto en frente de todos

— Me parece bien y me hace feliz que no nos vayan a separar, me gusta que seas mi coronel aunque aveces seas un poquito cruel con nosotros

— Lo siento, pero asi debe ser el entrenamiento, aunque si lo ves de esta manera — le toco el pecho a Yoongi — cada vez te estas poniendo más musculoso

Yoongi tenía sus mejillas rojas mientras su omega le tocaba el pecho y sus abdominales que aún no estaban bien formados pero algo es algo.

— ¿Te gustaría que fuera musculoso?

— La verdad no me importa si tienes músculos o no, eso no hace que cambie de opinión en que eres demasiado sexy — le dio un beso en el cuello

— Amor — Yoongi no podía creer lo que acababa de escuchar — tu también eres muy sexy

Yoongi se inclinó hacia Jimin y lo besó con suavidad. Él omega cerro sus ojos y se dejó llevar mientras los labios de Yoongi acariciaban los suyos, con ternura, pero esa ternura fue remplazada con placer cuando Yoongi le mordió el labio. Ambos estaban empezando a exitarse aunque sabían que no podían llegar a más mientras estuvieran en la base militar, el beso fue interrumpido cuando tocaron la puerta así que ambos se separaron rápidamente mientras mantenían sus mejillas rojas.

Jimin abrió la puerta y recibió unos documentos que le había enviado el general de división, tenía que revisarlos y enviarlos de vuelta, el sargento que los había traído los iba a esperar así que Yoongi decidió irse.

— Nos vemos mañana coronel Park — sonrió aunque quería darle otro beso de buenas noches eso no sería posible con el sargento allí presente

— Feliz noche soldado Min, que descanse — Jimin sonrío mientras se sentaba en su escritorio para revisar los documentos

Yoongi se fue, dejando a su coronel hacer su trabajo. Ya mañana tal vez iban a poder darse otro beso igual sin ser interrumpidos.




























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